Un débil castillo de naipes
El Granada CF vuelve a desaprovechar la ocasión única de llevarse tres puntos a domicilio y en Mestalla · Buen primer tiempo de los de Alcaraz, que se vieron arrollados al inicio de la segunda parte · El equipo solo ha perdido uno de sus últimos cuatro partidos
Carcela, que marcó el tanto con el que el Granada CF se adelantó, se lamenta tras intentar llegar al área del Valencia. Foto: LOF
FICHA DEL PARTIDO
Valencia: Alves; Montoya (Munir, 46'), Garay, Mangala, Gayá; Pérez, Suárez, Parejo, Cancelo, Nani (Bakkali, 63'); y Rodrigo.
Granada CF: Ochoa; Cuenca, Vezo, Saunier, Gastón Silva, Gabriel Silva; Uche, Pereira (Samper, 63'), Boga, Carcela (Toral, 85'); y Kravets (Barral, 77').
Árbitro: Hernández Hernández (Las Palmas). Amonestó al local Cancelo y a los visitantes Samper, Pereira y Toral. Expulsó a Lucas Alcaraz.
Goles: 0-1, Carcela (+46'). 1-1, Nani (47').
Incidencias: Encuentro disputado en el Estadio de Mestalla ante unos 35.000 espectadores.
No se trata de ver el vaso medio lleno o medio vacío. Ni siquiera de ser más o menos optimista o alarmista. El Granada CF ha vuelto a demostrar que pese a su notable mejoría en las últimas jornadas (solo ha perdido un partido de cuatro), el equipo tiene construido sobre sí mismo un débil castillo de naipes que se desmorona a poco que sople el viento.
Los de Lucas Alcaraz se adelantaron en el marcador después de un buen primer tiempo, pero la renta les duró poco, fue una cruel demostración más de que todavía queda mucho por hacer y construir, sobre todo en la concentración de los jugadores. Más allá de que el punto en Mestalla probablemente sepa mucho mejor cuando avancen las semanas y, evidentemente, lleguen las victorias.
El técnico granadino optó por comenzar el partido con la misma defensa de los dos últimos encuentros. Tres centrales y dos carrileros -con la única incorporación de Gastón Silva- que en esta ocasión solo terminaron de dar buenos frutos en la primera parte, pues nada más comenzar la segunda el gol del Valencia les dejó en evidencia. A ello hay que añadir la apuesta por Pereira por dentro con un resultado más que discreto, Boga en una banda sin terminar de definir y un desaparecido Kravets en la delantera. A toro pasado, obviamente, todo se ve de otra forma.
En cualquier caso la primera parte desempeñada por los rojiblancos no fue mala, merced principalmente a que el Valencia salió adormilado y se dejó enmarañar por la defensa de cinco de Alcaraz. Los de Prandelli empezaron llevando la iniciativa en los primeros compases, aunque el Granada CF dejó claro que el empate no sería bueno, al menos blanco sobre negro.
Así, Carcela probó tímidamente cómo de espabilado estaba Alves bajo la portería valencianista para intentarlo sin demasiado peligro desde la frontal del área. El meta detuvo sin problema. Ese tímido primer acercamiento despertó algo más a los locales, que tuvieron en las votas de Nani una llegada en el minuto 9 y posteriormente a los 27 de juego, cuando Ochoa tuvo que esmerarse para repeler un buen remate de Rodrigo a raíz de un centro lateral. El nerviosismo de los che iba en aumento mientras el Granada CF dominaba sin problema.
Bien situados
Los de Alcaraz continuaron muy bien situados sobre el césped hasta el punto de que en una contra, la primera del partido con verdadero peligro, Carcela se marchó por la banda izquierda aprovechando su velocidad y se la dejó en bandeja a Boga, pero la carrera era más acelerada que el centro y el balón se le quedó atrás al francés sin poder aprovechar la ocasión.
Siete minutos más tarde se produjo otra aproximación con peligro. Un clamoroso fallo de Parejo en el centro del campo permitió a Kravets irse con el balón hasta las inmediaciones del área de Alves. Cuando el ucraniano notó el aliento de un oponente cerca disparó pero sin la precisión suficiente para enviar el esférico al fondo de la red.
Sin embargo, justo antes del descanso, el Granada CF logró pegar el zarpazo que el equipo había buscando en dos oportunidades previas. Carcela logró plantarse solo ante Alves y, en esta ocasión, sí definió en el minuto de descuento dado por Hernández Hernández. El extremo logró definir a la perfección y permitió a los rojiblancos irse por encima a la caseta.
Sin tiempo de disfrutar
Alcaraz quiso retocar poco el equipo tras la reanudación. A buen seguro incidió una y otra vez para que el gol del Valencia, de producirse, lo hiciera lo más tarde posible. Nada más lejos de la realidad.
Al equipo se le fue de la mano la forma en la que los locales salieron tras el paso por vestuarios. Mucho más espabilados y activos, los de Prandelli lograron adelantarse a los dos minutos de la segunda parte. Lo hizo Nani, quien aprovechó una segunda jugada a raíz de un rechace de Ochoa, quien previamente había rechazado un remate de cabeza de Parejo tras centro de Cancelo.
El partido podía haber comenzado, pero el Granada CF, al contrario que en la primera parte, no estaba en su sitio y quedó totalmente descompuesto ante los arreones de los locales, que a través de Nani, Rodrigo o Parejo intentaron sin éxito batir a Ochoa por segunda vez.
En este segundo periodo solo hubo una llegada al área de Alves por parte de los granadinistas. Lo hizo Carcela, que cedió de tacón para que Kravets entrase desde atrás. Cumplió el primer cometido, no así el de rematar a portería.
A falta de siete minutos el Granada CF estuvo a punto de sufrir el varapalo más grueso. Fue en una llegada de Bakkali, que recibió en el segundo palo y se escoró a la línea de fondo con la intención de disparar de tiro cruzado. Sin embargo, fue el momento de que Ochoa se reivindicara así mismo y salvara al equipo del desastre total.
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