Un ensayo reconstruye el periodo de exilio en Argentina del pintor Manuel Ángeles Ortiz
El profesor de la Universidad de Granada, Rodrigo Gutiérrez Viñuales, reconstruye los nueve años de exilio argentino del artista andaluz
El libro 'Manuel Ángeles Ortiz. Memoria de la Argentina' reconstruye, a partir de la abundante documentación acopiada por el autor a ambos lados del Atlántico, el periodo hasta ahora quizá más oscuro en la trayectoria del artista, sus nueve años de exilio en Argentina, a partir de su llegada a Buenos Aires en 1939.
Gutiérrez Viñales examina con detalle las múltiples acciones y el papel desempeñado por el pintor, escenógrafo y ceramista en el rico contexto del arte y la cultura argentina de su tiempo, a la vez que se recupera del olvido la amplia fortuna crítica de que gozó su obra en aquel país.
El ensayo, que se presenta este viernes en el Palacio Condes de Gabia, ha sido editado por la Diputación de Granada, coincidiendo con el 60 aniversario de la última exposición del pintor en Buenos Aires y con el 20 de la retrospectiva del Museo Nacional Reina Sofía.
El esta obra -con 18 ilustraciones a color y 102 en blanco y negro- el autor analiza detalladamente la producción argentina de Manuel Ángeles Ortiz como parte de un trayecto continuado de modernidad, recorre sus trayectos por la Patagonia, repasa sus exposiciones y su presencia en los libros de arte argentino entre 1939 y 1948 y finaliza con su última estancia (1955) y la exposición individual en la Galería Bonino (1956).
El profesor titular de Historia del Arte de la Universidad de Granada, Rodrigo Gutiérrez Viñuales, especialista en pintura argentina y arte iberoamericano, confiesa que este libro tiene su origen a principios de los noventa, cuando supo de la existencia de un "periodo argentino" de casi una década del pintor, lo cual le dejó sorprendido porque su nombre no aparecía en los estudios de arte argentino que entonces se estaban haciendo sobre los años cuarenta, momento de su acción allí.
Durante el primer viaje que realizó el autor a Buenos Aires desde su venida a Granada, a mediados de 1995, se propuso detectar y acopiar materiales sobre el artista de la Generación del 27, amigo de Lorca, Falla, Hermenegildo Lanz o Ángel Barrios.
En su búsqueda argentina, encontró un ejemplar de la primera monografía publicada sobre su obra en la editorial Poseidón en 1945 y al mismo tiempo, en Granada hizo amistad con Antonio García Bascón, el historiador del arte que con más ahínco se dedicaba ya entonces a estudiar y difundir la obra de Manuel Ángeles Ortiz.
A partir de aquí, Gutiérrez Viñuales comenzó una profunda y extensa investigación que fue incorporando documentación a lo largo de veinte años, a partir de diversas entrevistas y de las visitas en 1999 al archivo Manual Ángeles Ortiz del Centro de Documentación del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
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