De la libertad para gestionar recursos
Desde su creación en 2005, la Entidad Local Autónoma (ELA) de Carchuna-Calahonda es la administración responsable del Llano donde se sitúan estas dos localidades pertenecientes al municipio de Motril, pero que cuenta con un importante número de competencias propias. En estos años ha pasado de la asfixia económica por parte del Ayuntamiento matriz en tiempos del hoy diputado Carlos Rojas, a la firma de generosos convenios y una potente cartera de servicios.
Por extraño que parezca en la España sobreendeudada, en la actualidad y bajo los mandatos del PP y su rodillo de mayoría absoluta en la ELA, esta pequeña población de 3800 habitantes tiene en su haber, según cuentas oficiales presentadas, casi 1,6 millones de euros de remanente positivo de tesorería, además de 200.000€ de superávit en presupuestos y la mencionada cartera de servicios con el Ayuntamiento de Motril no ejecutada.
Esto que podría parecer el resultado de una buena gestión, no es más que el reflejo de una incapacidad absoluta para gobernar y gestionar, un abandono total de la función pública, como si los ciudadanos del Llano de Carchuna y Calahonda que pagan sus impuestos no tuvieran necesidades que cubrir o los pueblos no necesitaran ninguna mejora.
Así, tras varias infructuosas peticiones de información y solicitudes para invertir ese dinero en mejoras para los vecinos, desde Podemos Motril nos pusimos a trabajar y analizar las cuentas para argumentar con mayor exactitud nuestras peticiones rechazadas en base a la regla de gasto de la ´Ley Montoro´. La regla de gasto que se recoge en la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, merma considerablemente la autonomía presupuestaria y condena a los ayuntamientos a no cubrir servicios necesarios, incluso básicos para la ciudadanía.
Los ayuntamientos deben tener libertad para invertir sus remanentes para el beneficio colectivo excluyéndolo de los planes económicos-financieros. No es concebible el castigo que la Ley Montoro somete a los municipios, que aun habiendo cumplido los condicionantes impuestos se ven sometidos a una legislación injusta. Aún así, el 1,6 millones de euros de remanente positivo de tesorería es una cantidad que pudiendo, no se invierte por negativa expresa de la autoridad de la ELA perteneciente al Partido Popular.
Profundizando el análisis y las causas de la negativa de la Presidenta de la ELA a invertir ese dinero en el pueblo, encontramos que la entidad cumple con todos los requisitos exigidos por la Ley Orgánica 2/2012 de 27 de abril de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, con los matices introducidos en la ley 9/2013 de control de la deuda comercial en el sector público que desarrolla el artículo 32 con sus excepciones al destino del superávit, mediante una Disposición Adicional Sexta, es decir, estabilidad presupuestaria, cumplimiento del pago a proveedores y remanente positivo de tesorería.
Una vez con esos datos contrastados, pedimos otra vez a la ELA que invirtieran el remanente positivo en actuaciones por la mejora de la calidad de vida de los vecinos del Llano. Se negaron alegando que la ´Ley Montoro´ se lo impedía. Volvimos a insistir explicando porque sí se podía invertir el dinero ya que se cumplían todos los requisitos legales para poder hacerlo y pedimos que se trasladara la información al Ministerio de Hacienda. Se negaron. A pesar de las limitaciones legales a la hora de invertir, insistimos una vez más proponiendo una serie actuaciones como la iluminación del camino viejo entre Carchuna y Calahonda, la instalación de puntos limpios o la eliminación de barreras arquitectónicas. En esta ocasión acompañamos la petición de ejemplos de municipios en los que se habían llevado a cabo actuaciones del mismo tipo. Se volvieron a negar. Mayoría absoluta manda.
Sin embargo, a principios de año empezamos una campaña informativa por las dos localidades y ha debido servir de acicate, pues hace unas semanas el PP de Motril se animaba a poner en conocimiento del Ministerio la situación financiera de la ELA, tal como le pedíamos en la moción denegada. Ya era hora.
Decía Rosa Félix “es evidente que de los ayuntamientos depende la calidad de vida de los vecinos ya que son el primer eslabón al que acuden los ciudadanos en busca de respuestas efectivas a sus necesidades”. Para llevarlo a cabo, hacen falta buenos gestores que hagan su trabajo y no se queden mirando.
Antonio González
Vocal de la Entidad Local Autónoma Carchuna-Calahonda
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