Luna creciente (Una y dos) (4-3-2015)
Una y dos
Siempre han existido las dos Españas de Machado. Aunque en estos increíbles espacios temporales las dos Españas son como una España real y otra irreal. La España real es la de casi seis millones de desempleados; la de una corrupción política y empresarial que es bestialmente miserable e inaceptable; la del desencanto político de la ciudadanía; la de la destrucción del Estado Social; y la de unos partidos políticos que se han desfasado en solo algo más de treinta años democráticos. Y la España irreal es la que nos pintan con los colores más pintorescos los políticos que ganan unas elecciones y nos gobiernan y nos administran. Y por cierto, pensando que la España pintada de ellos es como el país de Alicia con sus maravillas. Cada día a los españoles les cuesta más esfuerzo ir a votar en las llamadas a las urnas. Y ya que los españoles, ya era hora, son concientes de lo que después les cae encima con los políticos que han elegido. Por poner un ejemplo simple: ¿quiénes serán capaces de ir a votar al PSOE de Andalucía en las próximas elecciones autonómicas? Y a pesar del gran esfuerzo, ni ella debe de creer en sus palabras, que la candidata Díaz, doña Susana del PSOE, está desplegando con su folclore tipo andalusí que se traduce en infantilismo político andaluz. No paran en la vida real los casos de corrupción política en Andalucía, y el personal votante debe de estar perplejo ante la tesitura de ir a votar o irse de excursión el día 22 de Marzo. Y la cuestión no para ahí: ¿quiénes serán capaces de votar a ese PP que le ha dado tanto trabajo a los fiscales y jueces con sus corrupciones en otras Comunidades Autónomas? Ahora no sirve lo de que al no votar, no se pueden pedir ningunas responsabilidades. Se han pedido responsabilidades votando, y ni puto caso por parte de los partidos políticos. Y los fiscales y jueces, lo mejor de lo público, a trancas y barrancas porque lo tienen muy difícil.
Popular ahora
