Ricky Martin provoca un subidón de adrenalina en Granada
El artista puertorriqueño no defrauda en su cita en la Plaza de Toros, en la que conquista a un público con sus temas clásicos y los más recientes
Ricky Martin impuso su pasión sobre el escenario de la Plaza de Toros. Foto: Álex Cámara
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El nerviosismo de sus fans más empedernidos no pudo paliarse ni cuando a las 22.00 horas Ricky Martin se subió al escenario de la Plaza de Toros de Granada, donde provocó un subidón de adrenalina y de temperatura marcado por los ritmos latinos del artista.
Ricky Martin encandiló a las más de 8.000 personas que casi dejaron sin papel la monumental de la Avenida del Doctor Oloriz, donde no faltaron sus éxitos recientes y pasados y en el que que dejó su impronta sobre las tablas. Es lo que tienen más de dos tres décadas de carrera.
Y en eso el puertorriqueño ha sabido actualizarse. Ha ido adaptándose a las exigencia de sus generaciones más fieles, presentes en el concierto; y de las nuevas que se dejan llevar por el 'flow' de los temas que ahora suenan en cada discoteca y pub.
Así, nada más comenzar quedó patente que lo de la noche de este miércoles en Granada iba a ser un romance eterno entre Martin y sus fieles seguidores, que no pararon de cantar y acompañarle cada vez que se lo requería.
El artista combinó sus letras en castellano más conocidas y clásicas con las de la lengua de William Shakespeare, un 'aprendiz' en esto de los idilios en comparación con lo demostrado por Ricky Martin sobre el escenario.
La sensualidad caldeó mucho más el ambiente de todos los asistentes. Foto: Álex Cámara
'La Bomba', 'Por arriba, por abajo', 'Pégate', 'María' o 'la Copa de la Vida' demostraron que quien tuvo retuvo y en ello el cantante tampoco deja lugar a la duda, recordando que la juventud es un divino tesoro.
Donde las y los más 'jóvenes' definitivamente 'dimitieron' de su control de lo que hacían fue cuando sonaron temas como 'Adrenalina', 'Drop it on me', 'La Mordidita' o su popular 'Vente pa ca', que aun sin Maluma sobre el escenario transmitió todo lo que se espera de una de las canciones del verano pasado y del que está por llegar.
Si los movimientos de cadera del puertorriqueño podían ser insuficientes, el artista ya llegaba acompañado de su grupo de baile que daba mucha más escenificación a lo que sucedía sobre el espectacular escenario instalado en el recinto donde Frascuelo dio sus mejores tardes de gloria.
"Os quiero Granada", dijo el artista para despedirse de un público que comparte el sentimiento cariñoso hacia un Ricky Martin que lo dio todo durante su más de hora y media de idilio con la ciudad.
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