Una fiesta de San Lucas limpia y menos concurrida
Las advertencias de la Policía Local hace que los estudiantes de Medicina opten por celebrar su patrón sin rociar a los alunmos de Primero
Probablemente para los estudiantes de Medicina de la Universidad de Granada este San Lucas, en comparación con el de años anteriores, haya sido un tanto 'descafeinado'. Aunque si se les pregunta a los establecimientos de Derecho o próximos a la Plaza de San Lázaro, la conmemoración de esta efeméride haya sido la más tranquila en mucho tiempo.
Y es que las advertencias de los agentes de la Policía Local de Granada, muy vigilantes en todo momento con lo que hacían o dejaban de hacer los veteranos y novatos de Medicina han servido para calmar algo los ánimos y evitar las escenas de jóvenes rociados de harina y todo tipo de líquidos para dar la bienvenida oficial al nuevo curso.
Los 'borregos', término empleado para definir a los recién llegados, han tenido que soportar esos sí las novatadas de sus compañeros más 'longevos' en la Facultad de la Universidad de Granada, aunque solo han sido pintados en la cara para quedar claramente identificados.
Después de quedar congregados en los Jardines del Triunfo, los participantes se han dirigido hacia las inmediaciones de San Lázaro, en donde les han hecho cantar y bailar y alguna trastada más, aunque nada de huevos, harina, tomate o mostaza. Todo en un ambiente limpio.
Después ha llegado el turno de la Plaza de Derecho, en donde en esta ocasión solo se han podido lanzar una vez desde la estatua que preside este enclave granadino. De nuevo los agentes de la Policía Local han vigilado de cerca todos los movimientos, aunque fuentes de este cuerpo han informado a ahoraGranada que los actos se han desarrollado sin incidentes y un comportamiento correcto por parte de los participantes.
La fiesta, eso sí, este año ha tenido que continuar en una discoteca ubicada en Las Gabias, ante el cierre del Botellódromo, lo que ha hecho que la asistencia haya sido menor que en años anteriores. San Lucas no conserva la esencia, aunque muchos se hayan dado cuenta de que quizás no hacía falta.