Algo se quema en la Vega de Granada cuando el verano se va
Los rastrojos forman parte del paisaje con la llegada del frío y las bajas temperaturas · Los bomberos de Granada reciben medio centenar de llamadas en octubre alertando de grandes columnas de humo cuyos fuegos estaban autorizados
· [PDF] Consulte la normativa y recomendaciones del Infoca respecto a los fuegos forestales
Con el final de las altas temperaturas llegan los rastrojos a la Vega de Granada. Grandes columnas de humo toman el protagonismo en el horizonte que rodea el Área Metropolitana granadina y no, no son incendios por los que haya que alarmarse.
Precisamente, los bomberos de la capital recibieron en torno a medio centenar de llamadas durante el pasado octubre alertando de posibles incendios forestales que resultaban ser la quema de restos agrícolas o forestales, pero controlados por el hombre.
Según ha explicado a ahoraGranada el jefe del servicio de Bomberos de Granada, Jesús Cabrera, este dato ha aumentado en los últimos años porque "todo el mundo tiene móvil", pero las falsas alarmas no han complicado su labor demasiado.
Y es que los Bomberos de la capital, que intervienen en todo el 'Cinturón' de Granada capital, tienen en los agentes de la Guardia Civil y de las distintas policías locales de cada pueblo a sus grandes aliados: "Ellos van a ver si realmente está controlado el fuego o se trata de alguna emergencia, más que nada por enviar o no los efectivos necesarios".
Dado que el operativo implica una coordinación entre todos, el Centro Coordinador de Emergencias 112 de Andalucía sí tiene constancia de qué quema de rastrojos está prevista en algún punto concreto.
Autorizaciones
Dependiendo de la época del año, la quema de rastrojos debe estar autorizada, comunicada o no es posible por las altas temperaturas. Estas fechas van variando cada año según las estimaciones que efectúan los técnicos especialistas en la materia.
Así, en esta época por ejemplo, se ha considerado temporada de riesgo alto del 1 de junio al 15 de octubre, fechas durante las que no solo se ha prohibido la quema de cualquier tipo de rastrojo, sino incluso la circulación de vehículos a motor por zonas que están fuera de la red de carreteras.
Del 16 de octubre al 1 de noviembre el riesgo se ha reducido a medio. En este periodo sí se han autorizado ya los fuegos como los rastrojos, aunque en cuyo caso se ha debido de contar con la autorización de la Consejería de Medio Ambiente. Este nivel medio también suele aplicarse en mayo, cuando empiezan a llegar de nuevo las altas temperaturas.
Por último, desde el 2 de noviembre hasta el 30 de abril se considera temporada de riesgo bajo, de modo que los rastrojos no necesitan de autorización aunque sí deben ser comunicados igualmente a la Consejería de Medio Ambiente.
Precauciones
Pero la quema, siempre que sea controlada, necesita de una serie de requisitos y precauciones mínimas que han de cumplirse por parte de quien lleva a cabo esta práctica.
En este caso, y en todos, Cabrera recomienda como mínimo prestar atención a las condiciones climatológicas del día a día, como por ejemplo el viento, que puede alterar la normal quema de estos rastrojos.
Además, el propio Infoca ha elaborado un documento en el que se precisa que cuando se trata de temporada de riesgo alto la autorización precisará que se podrá quemar desde la salida del sol y la hora que se fije.
Además, cuando se efectúa la práctica debe tenerse en cuenta la zona de peligro y de influencia forestal, que se tratan de terrenos circundantes a los terrenos forestales en una franja de 400 metros. Las quemas estarán limitadas igual que en los terrenos forestales.
Por último, cuando se trata de zonas de fuera de peligro no se requiere de autorización siempre que se trata de época baja. En este caso se trata de árboles, arbustos, vegetación de ribera o plantaciones lineales con una superficie inferior a la de un enclave forestal y se exige la apertura de un cortafuegos perimetral de cinco metros de anchura mínima que no podrá afectar a dicha vegetación.