viernes 29 marzo
FC BARCELONA - GRANADA CF | LA CRÓNICA  |   | Nacho Santana

Araújo despierta del sueño a un buen Granada CF

Los de Robert Moreno encuentran la solidez defensiva ante un Barcelona que encontró el gol a un minuto del final

Domingos Duarte remata el balón del tanto granadinista. Foto: Granada CF

Volvió el Granada CF a sus orígenes en el Camp Nou, escenario de su última victoria en Liga. Se reencontró con su versión sólida y ello le permitió soñar con sumar los tres puntos en la Ciudad Condal, un sueño del que obligó a despertar un testarazo de Araújo.

En un partido en el que todo invitaba al pesimismo, con ambos equipos en dinámica negativa y un Granada CF a la deriva en jornadas anteriores, los rojiblancos dieron un golpe sobre la mesa en el Camp Nou.

Lo hicieron bien temprano, antes de que el marcador llegase al primer minuto y medio. Encontró un saque de esquina el conjunto de Robert Moreno, que se encargó de poner en juego Escudero. No prosperó la jugada, pero el lateral izquierdo reapareció para recuperar el esférico, desbordar en su camino hacia el área y ponerla en el segundo palo para que Duarte se impusiese en el aire a De Jong, anotando a puerta vacía.

Se vio por delante el Granada CF antes de saber siquiera cómo sería su encaje en el rompecabezas que proponía el encuentro. Con el viento a favor, los visitantes defendieron su idea, la más cercana a la de la temporada pasada de las mostradas en este curso.

Juntaron líneas los rojiblancos, defendiendo en bloque bajo y buscando la velocidad arriba de jugadores como Machís. Precisamente el venezolano fue el protagonista de la siguiente ocasión clara de los suyos, con un centro que no mandó a la red por poco Jorge Molina.

Respondió el Barcelona con un disparo de Sergi Roberto desde dentro del área tras una jugada embarullada. Podría haber sido el tanto que volviese a igualar el marcador y rompiese la comodidad visitante, pero se estrelló en el larguero de la portería defendida por un Maximiano que solo pudo mirar.

Ya a la media hora de partido, con el Granada CF meciéndose plácidamente en la dinámica favorable del partido ante un rival obcecado en buscar el centro, Robert Moreno tuvo que hacer frente a un contratiempo en forma de lesión. Se rompió Yan Eteki, que entró para aportar músculo en la medular, dejando su lugar a Ángel Montoro.

Ya en los últimos compases de la primera mitad, cerca estuvo Monchu de duplicar la distancia en el marcador con un disparo desde la frontal del área al que supo reaccionar Ter Stegen. De portería a portería, pues minutos después Maximiano tuvo que volar para rechazar con la punta de los dedos un testarazo de Araújo.

Avisos en la segunda mitad

Mismo protagonista en la faceta ofensiva tuvo la primera jugada de peligro de la segunda mitad. Encontró nuevamente Araújo el esférico en un saque de esquina tras el fallo en la marca de Abram. Sin embargo, el testarazo del central no encontró portería.

Volvió a avisar el conjunto blaugrana. Peinó De Jong un centro lateral y la dejó de cara para Depay, que disparó a la media vuelta. Sin embargo, el disparo del delantero holandés se marchó sobre la portería del Granada CF en una ocasión de quilates.

Se escaparon los minutos entre faltas y tímidas llegadas de ambos conjuntos. El Barcelona no encontraba la forma de abrir el caparazón rojiblanco, consagrado a los centros laterales tras la entrada de De Jong y Piqué, que pasó a jugar como delantero centro en busca de un posible balón aéreo.

A solo tres minutos del final el encuentro se enturbió. Cayó en el área Araújo y los jugadores del Granada CF corrieron a protestar su simulación y apareció Eric García para empujar a Germán, acción que derivó en una tangana que se saldó con cartulinas para ambos conjuntos y una pérdida de tiempo favorable a los visitantes.

Con dos centrales como delanteros, el Barcelona acabó por encontrar el premio. Bajó el balón Piqué y abrió para Gavi, que la esperaba escorado a la derecha y puso el centro al área, donde apareció Araújo tras simular el penalti para poner el empate en el marcador a los 89 minutos de juego.

Se escapó casi de forma cruel la que estaba llamada a ser la primera victoria de Robert Moreno. El técnico volvió a los orígenes del equipo, los que le dieron alas, para acercarse a una versión que hizo más plausible puntuar en el Camp Nou.

Cumplió el equipo con las claves del técnico, mejoró sensaciones y sacó un punto que sabe a poco pero que vale oro por la entidad del rival. No acompañó la suerte, cruel verduga, pero sí que lo hizo la solidez defensiva y la solidaridad entre compañeros, que se ayudaron en el campo hasta rozar una victoria que habría hecho justicia a lo visto sobre el campo.

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