Aviso amarillo en Granada y el Área Metropolitana por posibles lluvias y tormentas
Permanecerá activado hasta las 12.00 horas de este martes en toda la comarca · En la recta final de los últimos años hidrológico se produjeron lluvias que causaron daños en Alfacar, Atarfe, Casanueva o La Zubia
La comarca del Área Metropolitana y Granada capital, incluidas ambas en la Cuenca del Genil, se encuentran este lunes con el aviso amarillo activado por parte de la Agencia Estatal de Meteorología ante la posibilidad de fuertes lluvias y tormentas.
Según la información recogida en su web, consultada por ahoraGranada, esta zona hidrológica permanecerá con el aviso amarillo por posibles lluvias y tormentas, junto a las de Guadix y Baza, entre las 15.00 horas de este lunes hasta las 12.00 horas de este martes.
En la primera jornada de esta semana, la probabilidad de que se produzcan precipitaciones y tormentas, con hasta 20 litros por metro cuadrado, es de entre el 40 y el 70%; mientras que las probabilidades para el martes se reducen entre el 20 y el 40%.
En las últimas semanas del año hidrológico o primeras del siguiente es habitual que en Granada y el Área Metropolitana se produzcan lluvias y tormentas torrenciales, como la caída por ejemplo el pasado 30 de agosto del año pasado que causó importantes daños en Alfacar, y anegó varias zonas de Peligros o Güevéjar.
También el año pasado, el 30 de septiembre, último día del año hidrológico, se produjo una tromba de agua que afectó fundamentalmente a la localidad metropolitana de Atarfe y a algunas zonas de Granada capital.
Otra de las tormentas caídas en la recta final del año hidrológico se dio el 14 de septiembre, cuando entonces la tormenta causó daños en algunos puntos de Gójar y La Zubia, si bien la peor parte se la llevó Riofrío, también incluido en la Cuenca del Genil.
En 2014 la tormenta causó daños el 3 de octubre en Casanueva y Atarfe y el día 9 en Bobadilla en Granada capital; mientras que en 2015, el 30 de septiembre, fueron La Zubia y Granada capital los que se llevaron la peor parte de la tormenta.
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