Ayuntamiento y Universidad se unen para embellecer las señales de Centro, Albaicín y Realejo
Impulsarán un estudio para identificar los distintos elementos existentes en estos barrios, y hacer propuestas sobre el tipo de señalización más idóneo o la ubicación más adecuada
La Agencia Albaicín, dependiente del Ayuntamiento, y el Departamento de Física Aplicada y la Fundación General de la Universidad de Granada (UGR), han firmado este jueves un convenio para el inicio de un estudio sobre el impacto visual en las señales del casco histórico de la ciudad al objeto de embellecer y adaptar a Europa dichos elementos en los barrios del Centro, el Albaicín, y el Realejo.
Según ha informado el Ayuntamiento de Granada, en la firma y presentación informativa del documento, el concejal de Turismo de Granada, Manuel Olivares, ha manifestado que se trata de "apostar porque estos entornos protegidos y espacios patrimoniales tengan una señalización acorde, no sólo por razones visuales o estéticas, sino para adaptarnos poco a poco a las normativas europeas y de la Unesco, y seguir siendo una ciudad con una oferta turística de vanguardia, de calidad y diferenciada para visitantes y visitados".
Para Olivares, "resulta fundamental que el estudio lo realice un equipo de expertos de la Universidad de Granada, por el rigor profesional y amplitud de criterios y variables a tener en cuenta, y dado que el trabajo ha de ser fundamentado en razones técnicas y tiene vocación de permanecer en el tiempo con independencia de cualquier equipo y color político".
El edil ha explicado que los trabajos tendrán un coste de 14.500 euros financiados por la Agencia Albaicín y, tras la firma del contrato para la prestación del servicio, arranca la labor de diagnóstico con el horizonte de mayo 2020 para dar a conocer los resultados del estudio.
Compete a la UGR la realización del trabajo de campo, observación y registro, que podría estar concluido en febrero, así como la elaboración de un catálogo y análisis de la información hallada, una fase prevista para abril, para que, en mayo, esté finalizado el informe con los distintos indicadores y magnitudes que "permitan conocer y cuantificar el grado de afección que las distintas señales suponen y propuestas para su mejora".
El profesor del Departamento de Física Aplicada de la UGR encargado del estudio, Jerónimo Vida, ha indicado que se fundamenta "no sólo en razones estéticas sino también de salud, de identidad urbana que hay que preservar y para una mayor información a la ciudadanía, dada la importancia que la saturación o diversidad de señales puede tener en la percepción por parte del ciudadano o visitante, al que es preciso orientar y no confundir".
Por otro lado, el Ayuntamiento irá dando pasos en materia de licitación de las nuevas señales, para lo que "se hará un concurso con los requerimientos técnicos que sean necesarios" dado que "este proyecto implica una inversión cuantiosa que ha de permanecer en el tiempo, ser operativa", es decir, "viene para quedarse".
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