Boicotean los dos radares de la A395 junto a los túneles del Serrallo en Granada
Se trata de unos de los últimos dispositivos instalados en esta vía, donde la limitación de velocidad se sitúa en los 80 kilómetros por hora
Los dos radares fijos situados en la A395 junto a los túneles del Serrallo en Granada han sido boicoteados al encontrarse las cristaleras de visualización de la cámara dañadas.
Se trata de dos de los dispositivos más recientes que la Dirección General de Tráfico tiene instalados en la capital y que se activaron hace apenas dos años.
En este punto, justo después de la incorporación a la autovía autonómica desde Huétor Vega, la velocidad está limitada a 80 kilómetros por hora, si bien debido a estos actos vandálicos actualmente no pueden captar a los infractores.
Los radares están situados dentro de una caja metálica que cuentan con una cristalera que permite captar con cámaras si alguien supera la velocidad, si bien esos espacios abiertos permanecen dañados y rotos.
A este punto, donde no está permitida la circulación a pie, el acceso es sencilla, si bien no es descartable que la DGT pueda tener imágenes del momento del ataque y del posible o posibles responsables, al tratarse de un punto en el que, debido a la existencia de los túneles, hay varias cámaras de videoviglancia cerca.
Ataques en otros puntos del Área Metropolitana
Esta no es la primera vez que estos dispositivos de control de velocidad han sido boicoteados, ya que en algunos de ellos situados también a ras de carretera también han sido atacados.
Sucedió por ejemplo con el situado a la salida de Pinos Puente, el que hay en la GR30 dirección Jaén pasado Ogíjares o el que existe en la GR3303 en Churriana de la Vega dirección Granada.
Aunque lo habitual ha sido romper los cristales que protegen el soporte metálico de la cámara donde está el radar, también ha habido otro tipo de ataques como pintar con spray este punto o taparlos con cartones o carteles.
Medidas de seguridad
Precisamente, con la intención de acabar con este tipo de situaciones, una de las novedades de la Dirección General de Tráfico ha sido la instalación de radares a mayor altura, de modo que la accesibilidad para un peatón, pese a estar en sitios donde habitualmente no pueden acceder, sea más difícil.
Sucede por ejemplo en el que acaba de instalar la DGT en la N432 entre Atarfe y Pinos Puente, que ha sido instalado sobre una plataforma de dos metros de altura.
Otra de las medidas adoptadas por la DGT ha sido la instalación de cámaras en postes altos, similares a una farola, que vigilen el propio radar y los ataques a los que pueda ser sometido.
Gracias a estos radares hace que los coches vayan más lentos y hagan menos ruido y no molesten a los vecinos que vivimos cerca del autovía. Deberian incluso de poner limite de menos velocidad o poner bandas sonoras u otra solución, porque aún el ruido es insoportable.