jueves 28 marzo
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Cijuela se vuelca con María José

La familia de esta adolescente de 17 años consigue, en solo una semana, el dinero para sufragar los audífonos que necesita con la solidaridad de su pueblo, así como de Chauchina, Santa Fe y Láchar

María José deberá llevar los audífonos en todo momento. Foto: aG

Tan sólo ha hecho falta una semana para que María José, una adolescente de 17 años y vecina de Cijuela, consiguiese los audífonos que necesitaba para poner remedio a una hipoacusia neurosensorial bilateral o pérdida auditiva en los dos oídos.

Siete días de vértigo en los que, pese a lo que por momentos se ha convertido en una carrera de obstáculos, la solidaridad ha logrado extenderse por todo el pueblo, así como por los municipios limítrofes. A esta localidad metropolitana, se unían otras como Chauchina, Láchar y Santa Fe con el objetivo de ayudar a sus padres, ambos parados y sin recursos, a sufragar los 4.764 euros que costaban ambos aparatos -3.100 euros si se pagaban en el plazo de un mes-.

"La niña llevaba más de un año diciendo que no escuchaba, por eso la llevamos al médico de Cijuela y decía que era moco y cera, pero nos cambiamos de médico a Santa Fe y la segunda vez que la vio dijo que no era normal y la mandó al otorrino. El especialista le hizo dos pruebas más específicas donde salió que María José tenía esa pérdida de audición. En concreto, 55 a 60 decibelios en cada oído", cuenta José, el padre de la niña.

Como él, su esposa Concepción asegura que cuando les informaron del precio de los audífonos se les "cayó el mundo encima". "Se nos juntó el cielo con la tierra en un momento porque José está parado, tenemos tres hijos, y yo sólo percibo 300 euros de pensión. A esto, se añadía que llevábamos dos meses mal, ya que en el tiempo que él ha estado en Palma de Mallorca trabajando no le han pagado. Una situación que está denunciada y ahora tenemos que buscar un abogado para poder recuperar lo que ha trabajado. Se nos ha venido todo encima", comenta la mujer al tiempo que precisa que aún "estamos asimilándolo todo".

Aunque todavía emocionada por lo estresante de los últimos siete días, Concepción afirma que "todo ha sido muy rápido" desde el pasado jueves 30 de marzo cuando a María José le confirmaron el problema que tenía. "El viernes 31 de marzo se lo comentamos a la Asociación Por una Infancia Feliz y, a partir de ahí, se desencadenó todo. Mi hija está asimilándolo, puesto que esta situación nos ha cambiado a todos. Ha sido María José, con una madurez increíble, la que le ha explicado a su hermano pequeño que tiene unos 'auriculares' nuevos con los que se debe tener mucho cuidado al jugar para que no se rompan", recuerda esta cijueleña orgullosa.

Ayuda desde México

Ya el primer lunes de abril, según manifiesta la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Cijuela, Amparo Serrano, todos se pusieron a trabajar para intentar darle una solución. De este modo, se ubicaron huchas por la localidad y se fijaron carteles en los pueblos de alrededor, "la avalancha de ayuda ha sido desproporcionada".

"Las actividades que teníamos pensado realizar para apoyar a esta familia no ha dado tiempo a desarrollarlas porque cuando consiguieron el dinero para sufragar los audífonos se paró todo. De tener una gala organizada para este martes al viernes pasado cancelarlo todo, en este caso, gustosamente", apunta la edil satisfecha.

Una movilización en la que las redes sociales han jugado un papel fundamental, ya que el mensaje de ayuda para María José ha llegado hasta México a través de Facebook y Whatsapp. "Nos ha preguntado gente que cómo lo podían hacer porque allí son pesos y querían cambiarlos a euros para donarlos", apuntan los progenitores mientras insisten en que todo se paró cuando consiguieron los 3.100 euros.

"No queríamos pasar -continúan- de que nos hiciera falta a que la gente pensara que somos unos sinvergüenzas, sobre todo, con los últimos casos de fraudes que se han dado en torno a movimientos solidarios. Yo solo quería para que mi hija pudiese escuchar bien, si no llego a fin de mes no hay problema, sólo quiero que mi hija pueda escuchar".

A pesar de haberse solucionado todo en una semana, las anécdotas se han repetido, entre ellas, los padres de esta vecina de Cijuela destacan la de una niña de Chauchina que vio el cartel en una tienda "y se llevó su hucha, se sentó en el suelo, la abrió allí y estuvo toda la tarde echando céntimo a céntimo lo que guardaba en la alcancía".

Así las cosas, y con los sentimientos todavía a flor de piel, esta familia no olvidará en un tiempo a aquellos que sin pensarlo se volcaron para hacer de la necesidad de María José la suya propia. Desde las 'cheerleaders' de la localidad, a asociaciones como Amalgama de Santa Fe, Por una Infancia Feliz de Cijuela y establecimientos como Bambú de Chauchina, El Rincón de mis sueños o El Romerillo, entre otros.

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