Cinco detenidos en 12 horas por violencia de género hacia sus parejas en Granada
Los arrestados tienen entre 20 y 39 años y todos los casos se produjeron entre la tarde del 27 y la madrugada y el día del 28 de julio
La Policía Local de Granada ha detenido a cinco hombres, de entre 25 y 39 años, por diferentes agresiones a sus parejas en sus respectivas viviendas y en un espacio de tiempo de unas 12 horas.
Según ha informado el cuerpo policial en una nota de prensa, la primera intervención se produjo hacia las 19.00 horas del 27 de julio cuando, una llamada informaba de que en un domicilio de la calle Mirlo de la capital, una mujer se había refugiado en el piso de una vecina, ya que al parecer su pareja la había agredido momentos antes.
Desplazada la unidad al lugar, se encuentran con un varón de 39 años dando fuertes voces y con síntomas de embriaguez. La mujer de 22 años, que se encontraba "muy alterada y llorando", les dijo que tuvo que salir del domicilio "a toda prisa", puesto que había sido agredida por su marido tras una discusión por temas económicos, y este le propinó golpes en cara y cabeza, además de cogerla por el cuello "con ánimo de estrangularla".
Ante tales hechos, se procedió a la detención del presunto agresor siendo trasladado a dependencias policiales. La víctima fue acompañada a un centro sanitario para ser asistida de las lesiones sufridas.
Sobre las 00.45 horas del 28, otra llamada informaba de que en una vivienda de la calle Rey Abú Said había una fuerte discusión. Personados los agentes de la Policía Local en el lugar, una joven de 21 años les asegura que había estado discutiendo con su pareja y le había propinado un fuerte golpe en la cara que la había lanzado contra la pared. La chica presentaba lesiones compatibles con un golpe en el labio.
El presunto agresor corroboró que habían discutido pero que "únicamente la había empujado". Ante los hechos relatados, y dado que en la vivienda los agentes pudieron ver un cuadro caído en el suelo posiblemente producido por el choque de la víctima contra la pared, detuvieron al hombre de 25 años y poniéndolo a disposición judicial.
A las 05.30 horas, una nueva llamada alertaba de que una persona estaba pidiendo auxilio porque su pareja la estaba agrediendo. Desplazados a la calle Bernarda Alba, los policías hablaron con la mujer y esta les dijo que estaba acostada y que su pareja había empezado a discutir con ella y, sin motivo aparente, la había golpeado en distintas partes del cuerpo, mostrando a los agentes lesiones en la mejilla izquierda y en la pierna derecha.
El presunto agresor había huido del domicilio, pero fue localizado más tarde en el portal del edificio. Ante los hechos descritos y las lesiones que presenta la víctima, se detuvo al chico de 20 años.
Con una orden de alejamiento
Casi al mismo tiempo que la anterior, sobre las 05.20 horas, otro aviso informaba de que en una vivienda de la calle Don Bosco se escuchaban gritos y golpes, así como una joven llorando. La Policía Local se encontró en la vivienda a un joven sin camiseta, "muy alterado y con síntomas de haber consumido bebidas alcohólicas", y detrás de él a una chica que gritaba que no le siguiera pegando.
La víctima aseguró que habían salido de copas y tras volver a casa habían empezado a discutir. En un momento dado, él comenzó a agredirla intentando ella defenderse. El presunto agresor corroboró la declaración de la chica, indicando que la discusión se había iniciado "por motivos de celos".
Los agentes procedieron, así, a la detención del joven de 25 años e informaron a la víctima de la necesidad de presentar denuncia en comisaría, negándose esta en un primer momento y manifestando posteriormente que lo haría al día siguiente.
Por último, hacia las 08.40 horas del 28, la unidad del Grupo de Mujer y Menor de la Policía Local de Granada se personó en la vivienda de una víctima de violencia de género para valorar la evolución del riesgo, dado que le consta actualmente una orden de protección. En el portal del edificio, la mujer les manifestó que su expareja, sobre el que pesa orden de alejamiento, estaba en el interior de su domicilio.
Este habría accedido de forma sorpresiva cuando ella abrió la puerta al esperar una visita. Al parecer, y según les relató, ya había hecho lo propio la noche anterior, presentando cierta agresividad y con síntomas evidentes de embriaguez. La había insultado y propinado golpes en las paredes, huyendo del piso al percatarse de una llamada al teléfono de emergencias.
De este modo, al entrar en la casa, los agentes encontraron a un hombre de 30 años al que identificaron y detuvieron por un presunto delito de quebrantamiento de condena.
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