Colofón glorioso desbaratado
La lluvia reaparece en la última jornada cofrade, lo que obliga a suspender los recorridos a mitad de mañana
Y al octavo día, la que resucitó fue la lluvia. La Semana Santa de Granada 2014 se marcha con un sabor glorioso hasta el Sábado Santo solo estropeado un poco por la situación vivida por las tres hermandades que salieron en el día de Gloria, que se transformó en una jornada gris dejando un colofón casi a medias.
Pese a que las previsiones meteorológicas auguraban lluvia en algún momento de la mañana, las hermandades arriesgaron y decidieron poner toda 'la carne en el asador' para apostar por una Semana Santa completa. Quien no arriesga no gana, se dice.
Y con ellas, no quiere decir que por lo vivido los cofrades hayan vuelto a ser derrotados por el mal tiempo. Sin embargo, el sabor de boca se queda con ese trazo de amargor para seguir esperando, y ya van 15 años, una Semana de pasión sin mirar al cielo de Domingo a Domingo.
El detalle
Aún hay que no tiene conocimiento de lo que supone la Semana Santa de Granada e incluso no le importa o no tiene en cuenta que algunas de sus acciones puede derivar en situaciones que dificulten el normal desarrollo de las estaciones de penitencia. Así, un vehículo estacionó minutos antes de la salida de la estación de penitencia de Resurrección y Triunfo en San Miguel Arcángel, pese a los carteles que rogaban lo contrario. Fue el propio capataz Alberto Ortega el que llamó a un nutrido grupo de sus costaleros con la intención de mover el vehículo, aunque por fortuna para los de la trabajadera y para el coche, la grúa municipal llegó a tiempo para retirarlo.
Santa María del Triunfo lucía espléndida con su exorno floral diseñado por Álvaro Abril. Foto: Álex Cámara
Triunfo hasta Catedral
La primera de las dos hermandades que debía tomar la difícil decisión de ponerse o no en las calles de Granada era la de Señor de la Resurrección y Santa María del Triunfo, que desde la Iglesia de San Miguel Arcángel determinó ponerse en las calles aunque las opciones de aguacero eran "muy escasas", según se encargó de comunicar a los propios componentes de la corporación la hermana mayor, Eva Valladares.
La cofradía estrenó con acierto las jarras del paso de palio, con una decoración floral de Álvaro Abril espectacular con dos ramos y mucha variedad, lo que resaltó más la figura de esta imagen protagonista del último día de la pasión, muerte y resurrección de Cristo. El dorado del paso de misterio, por Manuel Calvo, también ofreció más esplendor a este cortejo guiado por Alberto Ortega, el capataz más 'atareado' durante estos días.
Y como si de una situación pretenciosa se tratase, fue justo al entrar el palio en la Santa Iglesia Catedral cuando comenzaron los problemas para la cofradía, que por fortuna se encontraba a buen recaudo cuando comenzó la lluvia. Entonces la hermandad determinó dar por concluida su salida por las calles de Granada, aun cumpliendo su estación de penitencia pero sin completar el recorrido final, que se hará en los próximos días. Los rostros y llantos de los cofrades en el interior de la Catedral tomaron protagonismo, aunque este año al menos, pudieron sacar a sus titulares al contrario que el pasado.
Los Facundillos, a su llegada a la plaza de las Pasiegas. Foto: Álex Cámara
El futuro
El futuro de la Semana Santa de Granada pasa sin duda por cortejos como el que cada Domingo de Resurrección aporta la Hermandad de la Cañilla con el paso del Dulce Nombre de Jesús portado en andas por niños, los conocidos como Facundillos.
Más de uno de los cofrades que a día de hoy disfruta de las hermandades portó alguna vez una campana de barro para festejar que Cristo había resucitado, trayendo recuerdos memorables para el cortejo que aun sin hacer estación de penitencia sí se incluye en la carrera oficial.
No obstante, el cortejo vio complicado su trazado cuando la lluvia les sorprendió en Alhóndiga, lo que les obligó a llegar de inmediato hasta la Santa Iglesia Catedral. No sería positivo que la primera experiencia de un pequeño con la Semana Santa fuese desagradable por la lluvia.
El paso del Resucitado del Regina fue cubierto con un plástico. Foto: Álex Cámara
Resucitado a medias
La segunda de las hermandades que inició su cortejo con la intención de completar la estación de penitencia fue la del Resucitado y Nuestra Señora de la Alegría, que inició su andadura desde la Iglesia del Sagrario con un cortejo que aún puede ganar en amplitud y en el que los niños tuvieron la importancia del día con su campanas.
El único paso de la cofradía del Regina Mundi estrenó un almendro con injertos ratificales en flor, lo que dio más naturalidad a este misterio que desde hace unos años procesiona en su conjunto en un único paso.
La situación más complicada para la hermandad se vivió cuando a mitad de camino, a punto de entrar en San Matías, la lluvia los sorprendió, provocando que los integrantes de la corporación que precedían al paso se mojaran y distanciaran del mismo, hasta producirse un corte total. Una vez suspendida su estación de penitencia, la cuestión era llegar hasta el Sagrario cuanto antes, para ello se empleó la calle Mesones, que volvió a ver un discurrir un paso en Semana Santa después de 31 hermandades sin hacerlo en el mismo sentido que el año anterior.
Mientras la hermandad ya se encontraba en el interior de su templo, el paso de misterio aún estaba en la plaza de la Mariana, cubierto de un plástico. Y aunque lo más lógico hubiera sido iniciar el paso 'mudá' para llegar cuanto antes, los costaleros dirigidos por Antonio Méndez Vargas trabajaron sendas marchas en Ganivet y Pasiegas. En este último caso, con lluvia incluida y ya sin paso, lo que provocó el desencuentro con algunos miembros del cortejo.
Sea como fuere queda año por delante para analizar y determinar si las decisiones tomadas de esta y otras hermandades fueron las correctas. Nadie está exento de cometer errores que, en ningún caso, pueden ensombrecer una Semana Santa casi pletórica. Tuvo a las 32 hermandades en la calle. Y eso, se mire por donde se mire, ya está en los anales de la historia cofrade de la ciudad.
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