Confusión y malestar en varios pueblos de Granada al no cambiar su situación pese a bajar la tasa de contagios
Algunos de ellos han pedido a Salud que revisen las cifras y otros tienen que hacer publicaciones para aclarar entre sus vecinos la situación
La revisión de las medidas decretadas por la Consejería de Salud y Familias a través del Comité Territorial de alerta de Salud Pública de Alto Impacto de la provincia de Granada ha provocado confusión y malestar entre algunos ayuntamientos granadinos, que han emitido notas y comunicados instando a la Junta a la revisión de las cifras de contagios por coronavirus.
Algunos de estos municipios han bajado después de 14 días de la tasa 1.000 o 500 que obliga al cierre de la actividad no esencial y al cierre perimetral de sus términos municipales, sin embargo según el BOJA y la nota del propio Comité se mantienen en situación de medidas estrictas.
Es el caso por ejemplo de Láchar, que el pasado 18 de enero comenzó a superar la tasa de 1.000 contagios de coronavirus por cada 100.000 habitantes y por tanto debe producirse el cierre total -permietral y de la actividad no esencial-.
Las dos semanas bajo este precepto se cumplieron el pasado 1 de febrero y el día 4 esta localidad metropolitana se situó en los 910 casos, descenso que se ha constatado con la última revisión de datos, al tener 540 puntos. Sin embargo Láchar debe continuar con las medidas más estrictas, lo que ha provocado que su ayuntamiento haya pedido que se revise esta situación.
Algo similar ha ocurrido en otros pueblos como Gójar, en donde el pasado 18 de enero se superó la tasa de 500 contagios, en la que ha cumplido los 14 días el pasado 1 de febrero. El día 4 el índice de esta localidad bajó a 321 y este lunes a los 287, aunque también debe continuar con el cierre perimetral, como marca la medida.
El Ayuntamiento gojareño ha mostrado su "disconformidad" con esta situación por "agravio comparativo" con otros municipios a los que se les ha permitido salir del cierre de sus términos municipales antes de los 14 días.
En Diezma, por contra, el deseo era que después de la reunión de coordinación de este lunes se produjera la apertura del municipio y salir del cierre perimetral, al estar en 261 puntos. Sin embargo los expertos lo mantienen en las restricciones como si tuvieran más de 500 casos por cada 100.000 habitantes.
Situación parecida se ha dado en Otura, en donde la tasa está en 386 casos y se mantiene el cierre perimetral después de dos revisiones por debajo de 500. En Capileira están en una tasa de cero contagios, por debajo de 500 desde el día 4, sin embargo debe seguir con el cierre perimetral, como le sucede a Moclín, con 358 puntos.
Por debajo del millar de contagios
Aunque el pasado jueves, cuando se revisaron las cifras, Íllora bajó del millar de contagios de coronavirus por cada 100.000 habitantes y ha constatado ese descenso en los datos de este lunes (745 puntos), este municipio también debe seguir con el cierre de la actividad no esencial y prohibir la salida y entrada al municipio.
En este caso, el Ayuntamiento ha tenido que recordar a los vecinos que las medidas no entrarán en vigor hasta su publicación en el BOJA y han pedido información a Salud al respecto para ponerla en conocimiento de la ciudadanía.
Ventas de Huelma ha dado por hecho en sus redes sociales que sus comercios podrán reabrir desde este miércoles después de haber bajado del millar de casos por cada 100.000 habitantes este lunes, hasta los 761, después de haber sido de los primeros en entrar en este índice que les llevó incluso a los 2.500 puntos.
Sin embargo, en la nota remitida a los medios por el Comité de Expertos esta localidad de la comarca de Alhama se mantiene entre los pueblos que deben continuar con las medidas más restrictivas.
Esta misma situación le sucede a otros pueblos como Sorvilán, con cero casos y por debajo de 1.000 contagios desde el pasado 1 de febrero; o Torre Cardela, que entró en las medidas restrictivas el 15 de enero y debe seguir en ellas pese a bajar de 500 puntos.
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