De un centenario a una futura coronación, una Granada radiante en su Lunes Santo
El Zaidín se emociona con la Virgen de la Luz y el Señor de Granada deslumbra con solemnidad desde el Centro · Varales nuevos para Amargura en el décimo aniversario de su coronación · Los Dolores conquista la ciudad desde el Darro y San Agustín tiene más cerca el bordado de su manto
A pesar de la incertidumbre y el miedo existente a que el cielo volviera a reivindicar su dosis de protagonismo, las cinco hermandades del Lunes Santo de Granada pudieron efectuar con normalidad su estación de penitencia, incluyendo algún sobresalto en su regreso en unos pronósticos nada halagüeños superada la media noche que, por fortuna, no se dieron.
La jornada se caracterizó, además, por un pequeño retraso en la Carrera Oficial a la llegada del Huerto hasta la Carrera de la Virgen desde Ancha de la Virgen, tiempo que poco a poco las demás fueron recuperando aunque de nuevo a su llegada a la Catedral se produjo una demora que, sobre todo San Agustín, se esforzó por recuperar en tiempo y forma.
Las calles de Granada rebosaron de gente, por lo que empieza a ser más que un tópico aquello de que los días grandes ya no son ni el Domingo de Ramos ni el Lunes Santo, a tenor de la cantidad de personas que quieren disfrutar de las cofradías en las calles.

77 años de vinculación eterna
En la calle Santiago se puso en la calle una de las dos primeras hermandades que debía resolver su salida a primera hora de la tarde, pero cuando los pórticos que hay encima del portón de las comendadoras se abren es que no hay duda: el Huerto se pondrá en la calle.
Lo hizo con un amplio cortejo en el que no faltó la presencia del Cuerpo Nacional de Policía, medalla de Oro de Granada por sus 200 años, y cuya petición fue formulada por la hermandad. Desde hace 77 años, ambas instituciones mantienen una estrecha colaboración y eso se tradujo en la imposición de la bandera de la Comisaría provincial en la Plaza de los Campos.
Si algo tiene la salida de El Huerto es emoción, cuyo paso de palio de la Virgen de la Amargura estrenó doce varales de Juan Díaz Losada y orfebrería de Alberto Quirós justo en el año en el que se cumple una década desde su coronación canónica. La noche, pese a ser la primera en llegar a su sede canónica, se hizo eterna con una bulla de ensueño en la que los más fieles se dejaron conquistar por la titular mariana del Huerto.

Cuenta atrás para la coronación
Si de fervor se trata, el Zaidín tiene el secreto cada Lunes Santo cuando se pone en la calle la hermandad del Cristo del Trabajo y la Virgen de la Luz. No hay corazón en la calle Polinario que no lata al son que marcan las y los costaleros que portan a sus dos titulares.
El amplio cortejo de la hermandad quedó patente al contar más de media hora de tiempo entre uno y otro paso de diferencia, fruto de que algo debe estar haciéndose bien en esta cofradía cuando año a año siguen creciendo en número de hermanos y sobre todo en fila acompañando a sus titulares.
El Zaidín recibió con especial cariño a la Virgen de la Luz, justo cuando faltan ahora poco más de tres años para su coronación canónica, detalle que quedaba reflejado en uno de los cirios del acompañaban a la imagen en el palio. Lo hacía detrás del paso de misterio del Cristo del Trabajo, que estrenó bordado y que empieza a hacer una idea de cómo será y deslumbrará en cada rincón de Granada cuando esté completado.

Cien años de vinculación con Granada
La Hermandad del Rescate celebró con Granada sus cien años de vinculación en otra jornada para la historia, en la que el regreso eterno, con saetas incluidas, en la Plaza Jesús del Rescate, solo fue la cuenta atrás para volver a reencontrarse con la ciudad por tercera vez dentro de la solemnidad.
La sobriedad de su imagen la ha conducido a ser una de las tallas más veneradas en la Semana Santa de Granada desde que fuera tallada por Diego de Mora en 1718, aunque habrá que esperar a octubre para verle con nueva túnica, que se ha diseñado por Álvaro Abril.
Destacar si cabe la presencia de la banda titular de la cofradía, que forma un binomio perfecto detrás del Señor, una simbiosis que invita a la reflexión al discurrir del paso, que se llenó de su Barrio de la Magdalena de principio a fin y con una multitud esperando desde Trinidad para acompañarle hasta su sede canónica.

Nuevo peto para Los Dolores
La Hermandad de Los Dolores llegó al Centro de Granada con lluvia, pero de pétalos, los que cayeron en varios puntos del recorrido para impregnarse de su característico color salmón con los que el río Darro se tiñe por unas horas de un tono diferente al original.
La titular mariana estrenó un peto granadino de estilo barroco con bordados de finales del siglo XVIII en oro fino y plata con motivos vegetales sobre lamé de plata de finales del siglo XIX, rematado en fleco y concha de oro.
La hermandad consiguió arropar mucho más a Granada en su discurrir, desde la calle San Matías, pasando por Enriqueta Lozano, la Mariana o Ancha de la Virgen, con un amplio cortejo en nazarenos y también en camareras, haciendo una entrada triunfal en la Carrera de la Virgen.

Silencio desde San Antón
El día concluyó con el silencio y el recogimiento que llega desde la calle San Antón, el punto más próximo a la nueva Carrera Oficial desde el que se puso en la calle el Sagrado Protector de Granada, el Cristo de San Agustín, al que la música de Capilla Cristo de San Agustín invitaba al recogimiento.
Con mucho acierto acompañó la Capilla Santo Ángel Custodio y la Coral Magnum Ensemble para la Virgen de la Consolación, que protagonizó también momentos de recogimiento mientras aguarda al estreno del bordado del paso de palio, actualmente liso y de riguroso luto.
La hermandad cumplió con creces en las calles con su recogimiento hasta su llegada a la calle San Antón a oscuras, una tradición que se sigue manteniendo y con la que Granada 'apagó' los ecos de un Lunes Santo radiante y completo.