Descubren en Bérchules los restos de un campamento militar morisco de la Guerra de Las Alpujarras
Se han catalogado varios yacimientos de distinta cronología, como un despoblado de época almohade-nazarí o dos tardoantiguos

Arqueólogos de la Universidad de Granada, pertenecientes a un proyecto de investigación, han descubierto en Bérchules los restos de un campamento militar morisco de la Guerra de Las Alpujarras
Este hallazgo ha sido llevado a cabo por el estudio que lidera el arqueólogo del Laboratorio de Arqueología Biocultural 'Memolab' de la UGR Blas Ramos, promovido por el Ayuntamiento de Bérchules y financiado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
A lo largo del 2024 se ha llevado a cabo la prospección y catalogación de los elementos patrimoniales y arqueológicos de Bérchules y Álcutar con el objetivo de divulgar y difundir los resultados obtenidos y así conseguir un conocimiento científico más amplio acerca de la historia de ambas localidades.
La investigación ha consistido en un análisis sistemático del término municipal, recorriendo sus distintos lugares y analizando la información histórica extraída de los restos materiales, ha trasladado la UGR en una nota de prensa.
Esta labor ha supuesto el hallazgo de alrededor de una docena de yacimientos arqueológicos, muchos de los cuales son inéditos. La revisión de aquellos lugares de los que ya existían noticias, como la Fábrica de los Moros o el Tajo del Reyecillo, ha permitido esclarecer qué tipo de restos se conservan en estos lugares y cuál es su cronología.
El Tajo del Reyecillo de Bérchules
Uno de los lugares más interesantes ha resultado ser el Tajo del Reyecillo, un lugar donde, según cuentan las leyendas de La Alpujarra, fue capturado Abén Aboo, el último rey de los moriscos. Así, el director de la investigación ha señalado que se tenía constancia de la existencia de leyendas sobre cuevas frecuentadas por la población morisca, "pero hasta la actualidad pocos equipos habían reparado en este lugar para llevar a cabo una intervención arqueológica sistemática".
"La falta de apuesta por esta clase de trabajos, así como la escabrosidad de algunas zonas, hacen que sea poco atractiva. Sin embargo, los hallazgos apuntan hacia temas hasta ahora inéditos para conocer una etapa tan importante como la morisca", ha apuntado.
De entre los restos que se han podido localizar, se observa una barricada de mampostería de más de 30 metros de longitud y numerosos fragmentos de cerámica del siglo XVI que se encuentran dispuestos en distintas posiciones.
Según Ramos, "la dispersión de la cerámica señala que los rebeldes ocupaban distintos abrigos repartidos por todo el tajo, muchos de los cuales podían cubrirse mutuamente, por lo que se encontraba muy bien defendido. Además, contaba con buenas posibilidades de comunicación hacia la sierra. Gracias a los documentos escritos sabemos que este campamento era utilizado por el último cabecilla de la rebelión, Abén Aboo, quien fue entregado a las tropas castellanas por sus propios correligionarios para finalizar la guerra".
Se trata, por lo tanto, de un elemento de gran interés para el conocimiento de la Guerra de Las Alpujarras y del proceso que sufrió una gran parte de la población alpujarreña. Este hallazgo se suma a otros elementos que enriquecen el patrimonio del período morisco en la comarca, como la reciente excavación, por parte del equipo, de un lienzo de muralla reocupado durante la guerra en el Fuerte de Juviles o los restos de una torre localizada en Órgiva y catalogada.
"Los restos del Tajo del Reyecillo son clave para entender un conflicto que se saldó con más de 20.000 víctimas y que cambió totalmente la dinámica sociocultural de La Alpujarra. No es el único elemento perteneciente a este periodo: en Murtas, espeleólogos del GAEM hallaron una cueva con restos de varias personas que huían de este conflicto, y en 2022 comuniqué a la Delegación de Cultura el hallazgo de una atalaya construida alrededor de 1515 y arrasada durante la razzia de Órgiva en 1565", ha explicado.
Hasta ahora se había podido documentar distintos elementos defensivos, pero no un campamento desde el que se organizaba la rebelión. "El patrimonio de este conflicto debe ser puesto en valor, tal y como le corresponde", ha indicado el director.
Otros yacimientos hallados en Bérchules
Desde el 2023, con ayuda del Ayuntamiento de Bérchules, a través de un programa financiado por el Ministerio de Transición Ecológica, se decidió poner en valor este patrimonio a través de su estudio e investigación.
Según afirma el teniente alcalde, Miguel Emilio Ocaña, "queríamos saber cuánto había de verdad en las leyendas que nos contaban nuestros padres y abuelos. Este proyecto surge de la necesidad de los berchuleros de conocer su historia, de conectar la leyenda con la realidad".
Además del campamento militar, se han catalogado numerosos restos de distinta cronología, como un despoblado de época almohade-nazarí o dos yacimientos tardoantiguos. "El yacimiento de Cortes, en frente de Bérchules, es uno de los más grandes que se han documentado y parece corresponderse con uno de los primeros asentamientos de la Edad Media en esta zona", ha subrayado.
Actualmente, el equipo se encuentra analizando parte de lo localizado y estudia conjuntamente con el Ayuntamiento de Bérchules la continuidad del proyecto para la puesta en valor del patrimonio arqueológico de la localidad.