El banco de pruebas pasa factura
El Granada CF pierde ante Osasuna por 3-1 en un encuentro en el que Diego Martínez optó por alinear a Vallejo como pivote, una apuesta que rectificó en el descanso
Experimentó Diego Martínez, pero no dio con la fórmula correcta. El técnico del Granada CF sorprendió utilizando a Vallejo en la medular ante la falta de efectivos ante Osasuna. Sin embargo, tuvo que cambiar la formación en el descanso en un partido gris y plagado de errores atrás, que provocó la derrota ante un equipo necesitado de ganar después de tres meses.
La imagen de los rojiblancos mejoró en la segunda mitad, ya con dos goles en contra en el marcador. Sin embargo, pese a conseguir recortar distancias pronto, los visitantes vieron cómo los rojillos perforaban su portería por tercera vez minutos antes del final para evitar una posible remontada.
No tuvo la primera parte que habría soñado el Granada CF en El Sadar. Diego Martínez sacó tubos de ensayo y matraces para experimentar con el once en una apuesta que no terminó de cuajar. En esta ocasión, el técnico alineó en la medular a un Vallejo perdido, sin participación y consagrado al balón en largo.
Pese al resultado al descanso, fueron los rojiblancos los que comenzaron avisando. Primero fue gracias a una presión de Kenedy sobre Sergio Herrera que acabó en mano del brasileño cuando interceptaba el despeje del guardameta. Tras él, una recuperación de Luis Suárez en el área rival llevó a un centro de Machís que se paseó por el área a los dos minutos de partido.
Desde entonces, el partido entró en una fase soporífera, con menos fútbol que intensidad. Con el centro del campo convertido en tierra virgen, los balones volaron de área a área en busca de un remate que permitiese adelantarse a cualquiera de los dos conjuntos, ambos perdidos en la creación de juego.
Probó a Rui Silva con un disparo desde la frontal Jony, que más tarde se marcharía lesionado. Encontró también el remate en una falta lateral Budimir, pero no logró orientarlo hacia la portería del luso. La réplica llegó a botas de Luis Suárez gracias a un centro de Kenedy, el mejor jugador en ataque de los rojiblancos, pero el cabezazo del colombiano se marchó por poco.
Entre las idas y venidas, el que encontró el premio fue Osasuna. Centró Jony por banda, con tiempo por un fallo en la marca de Foulquier, falló en el despeje en primer lugar Domingos Duarte y culminó la pifia Germán para permitir a Budimir empujar el esférico a escasos metros de Rui Silva para adelantar a los rojillos.
Ocho minutos tardaron los de Arrasate en duplicar la ventaja ante una zaga casi incompareciente. Cambió el conjunto local la banda, pero no el ‘modus operandi’. Centraron por su banda derecha, entró Budimir al área y remató a placer entre los dos centrales para hacer el segundo tanto, último de la primera mitad.
Poco más dio de sí una primera parte dormida en todos los aspectos y en la que Osasuna se llevó dos goles al marcador sin apenas llegar a la portería del Granada CF. Pudo recortar diferencias justo antes del descanso Luis Suárez, nuevamente en combinación con Kenedy, pero su disparo volvió a marcharse.
Otro Granada CF tras el descanso
La reanudación del encuentro trajo consigo una versión completamente diferente del conjunto rojiblanco. Quini tomó el lugar de un Foulquier nefasto y Jorge Molina mandó a la caseta a Vallejo para cambiar a un 4-4-2 más habitual en el equipo, algo que se notó sobre el campo.
Mejoró su imagen el Granada CF hasta el punto de recortar diferencias en menos de cinco minutos. Subió la banda Quini, la puso para Luis Suárez, que buscó a Jorge Molina y se topó con un defensor. Volvió a coger el colombiano el rechace y lo cruzó para superar la salida de Sergio Herrera, poniendo el 2-1 en el marcador.
Volvió a tenerla al poco de superar la hora de partido el ariete. Entró por banda Machís y puso el balón dentro del área de Sergio Herrera para que el ‘7’ pudiese disparar. Sin embargo, llegó demasiado forzado como para encontrar un remate que lograse superar la salida del guardameta, que estuvo atento para achicar espacio cuanto antes.
Pese a la mejoría, se salvó el Granada CF de un penalti señalado por mano de Quini en su área. Revisó el VAR la jugada y llamó a Estrada Fernández, que valoró la existencia de la infracción, así como una posible falta sobre Germán segundos antes. Estimó que Calleri propinó un manotazo al central, por lo que señaló esa acción en lugar de la pena máxima.
Reaccionó el conjunto visitante con dos remates consecutivos de Jorge Molina. Sin embargo, el experimentado delantero no logró conectar de forma contundente ninguno de los dos, perdiéndose la ocasión en el primero y logrando un saque de esquina en el segundo que no terminó en nada.
Diego Martínez agita el avispero
Con el paso de los minutos y la falta de ocasiones para los suyos, el técnico del Granada CF volvió a mover el banquillo buscando una reacción de los suyos. Entraron Soldado y Puertas en lugar de Carlos Neva y Kenedy, colocando al de Benahadux de lateral derecho y a Quini en el carril izquierdo.
Puso el entrenador rojiblanco a todos los delanteros sobre el campo en una apuesta que le duraría pocos minutos y que, además, no daría resultado. A cinco minutos de terminar el encuentro, Moncayola sacó un golpeo seco desde la frontal tras un saque de puerta para hacer el tercero con ayuda de Fede Vico, que acababa de entrar por Luis Suárez.
Quiso reaccionar el Granada CF con un nuevo contragolpe, esta vez conducido por Puertas. Sin embargo, Roncaglia cortó la jugada con una falta que le valió la segunda tarjeta amarilla, dejando a los suyos con diez para los minutos finales. Tras ello, una internada de Roberto Soldado estuvo a punto de convertirse en un tanto de Jorge Molina, pero reaccionó a tiempo la defensa para impedir el pase de la muerte.
Sin tiempo para más, Estrada Fernández pitó el final de un partido insulso. Diego Martínez experimentó ante las bajas en el centro del campo y no logró dar con la fórmula para sumar ante un Osasuna que revive gracias a su primera victoria en los últimos tres meses. Ante el gris partido de los rojiblancos, los rojillos cerraron el partido saliendo de la zona de descenso añadiendo tres puntos a su casillero trece jornadas después.
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