El barrio Abadía de Albolote se rebela contra la instalación de una antena de telefonía
Los vecinos de esta zona que aúna dos barrios piden su inmediata retirada al estar a menos de 60 metros de dos colegios y cerca de una zona residencial
Los residentes del barrio Abadía de Albolote llevan casi un año de lucha contra la instalación de una antena de telefonía móvil. Este dispositivo se ubica a 54 metros de un colegio, a 60 de un centro de educación especial y a 80 de las viviendas, por lo que consideran que "no se cumplen las distancias mínimas" para su ubicación.
Así lo ha asegurado ahoraGranada el portavoz de los vecinos, Rogelio Gorlat, quien ha explicado que existen recomendaciones europeas que indican las distancias mínimas que deben tener la instalación de estas antenas respecto a la ciudadanía, pero que "nunca se pongan" cerca de un colegio o una residencia.
Es por ello que han denunciado que el caso de esta antena, perteneciente a Orange y situada en una finca junto al cementerio de Albolote, multiplica los campos magnéticos al coincidir con cables de alta tensión.
Los residentes comenzaron hace unos días las movilizaciones por esta situación, en las que participó parte de la comunidad educativa, y pretenden seguir desarrollándolas todos los meses hasta que la antena sea retirada a otro punto donde no afecte a la ciudadanía.
Además, han logrado reunir más de medio millar de firmas que han presentado ante el Ayuntamiento de Albolote pidiendo la retirada y colocado pancartas en sus balcones con la finalidad de mostrar su malestar con esta situación.
De momento, sin ir a la Justicia
Respecto a la vía judicial Gorlat ha recalcado que la compañía telefónica nunca se ha negado al traslado de la antena, aunque por ahora no se ha producido ningún acuerdo, y ha dudado de que exista el informe pertinente que justifique la instalación de la antena en este punto.
Así, desde los vecinos aseguran que el Ayuntamiento de la localidad se ha puesto en contacto con Orange para tratar de buscar otra ubicación como unos terrenos aislados de población, entre otros, aunque de momento no se ha producido un acuerdo al respecto.
El representante de los vecinos ha recordado que desde 2016 la Unión Europea reconoció que estas situaciones "ya no son mitos" y que los expertos han asegurado que las opciones de cáncer "se multiplican de tres a diez".
Así, ha incidido en que estos dispositivos telefónicos deben estar ubicados de 350 a 400 metros de distancia de la población, ya que "hacen que bajen la melatonina, la defensa y la sustancia que mejor tiene el cuerpo contra radiaciones".