El empacho de elogios termina en indigestión
Si el buen juego sumara, otro gallo cantaría · Tras dos buenos partidos vuelven las peores sensaciones · La defensa sigue sin estar
Rochina, Lombán y Andrés se lamentan de uno de los tres goles recibidos. Foto: LOF
Dijo José Ramón Sandoval en la sala de prensa de Anoeta que "el halago debilita". Y el Granada CF no es que haya recibido halagos, es que ha terminado empachado después de los dos encuentros disputados en las dos últimas semanas. Hay que ir a la verdad del asunto: el buen juego no da puntos.
Esto, que parece tan obvio y tan certero en determinadas ocasiones, no parece estar claro si no se mira la clasificación o los goles que ha encajado el Granada CF en lo que va de temporada. Números peores, solo los tiene el Rayo Vallecano en cuanto a los tantos que recibe, pero los de Paco Jémez, a diferencia de los de Sandoval, marcan más y atinan en la portería rival, lo que por ahora les da cuatro puntos.
El caso es que el Granada CF ha vivido los primeros 14 días del mes instalado en un constante baño de elogios y de reconocimiento hacia el buen hacer del equipo que, por desgracia, le ha dado cero puntos. Estuvo bien la imagen en Villarreal. También ante el Real Madrid. Pero la indigestión ha sido palpable ante la Real Sociedad.
El problema a todo esto radica en el hecho de que la Liga sigue pasando. Que hay jornadas en las que el Granada CF da lo mejor de sí y otras, como las de este domingo, da una imagen pobre y con sensaciones desagradables que auguran lo peor en la jornada 38
He aquí el equilibrio que deben mantener jugadores, directiva y sobre todo los aficionados. Quedan 14 jornadas para que llegue el final del campeonato. Traducido a puntos se convierte en 42. Las cuentas habrá quien empiece a hacerlas, con buen o con mal juego.
El propio Sandoval reconoció tras el choque ante los donostiarras que la defensa no había estado a la altura. El mal endémico volvió a aparecer un encuentro más. Y o a esta situación crónica se le empieza a poner remedio o las cosas no terminarán por salir. Entonces la indigestión será de otro tipo. Solo queda aguardar.
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