jueves 28 marzo
LA CRÓNICA  |   |

El deseo de ganar hace aguas

El equipo rojiblanco se queda en el intento de cosechar el primer triunfo de la temporada después de mostrarse con mucho miedo ante un Deportivo que se adelanta · Los últimos 15 minutos, lo mejor de lo mostrado por los de Alcaraz

Los jugadores del Granada CF se despiden de su afición al finalizar el partido, cuando un diluvio caía sobre el campo. Foto: Álex Cámara

Los jugadores del Granada CF se despiden de su afición al finalizar el partido, cuando un diluvio caía sobre el campo. Foto: Álex Cámara

FICHA DEL PARTIDO
Granada CF:
Ochoa; Cuenca, Vezo, Lombán, Saunier (Boga, 66'), Gabriel Silva; Carcela, Pereira, Uche (Samper, 75'), Toral (Kravets, 69'); y Barral.
Deportivo de la Coruña:
Tyton, Juanfran, Mosquera, Emre (Guilherme, 75'), Marlos Moreno (Ryan Babel, 61'), Florin Andone, Sidnei, Arribas, Luisinho, Bruno Gama y Borges (Fajr, 87').
Árbitro: Undiano Mallenco (navarro). Amonestó al local Saunier y a los visitantes Luisinho y Celso Borges.
Goles: 0-1,
Florin Andone (64'). 1-1, Lombán (81').
Incidencias:
Encuentro disputado en el Nuevo Estadio de Los Cármenes ante 13.157 espectadores. Manaña lluviosa.

La historia del empate del Granada CF ante el Deportivo de la Coruña puede comenzar a escribirse justo en el momento en que el equipo rojiblanco podía haber recibido el 0-2 en el marcador. Entonces, Babel remató en el segundo palo un saque de esquina que el árbitro de forma incorrecta anuló por un fuera de juego inexistente a todas luces.

A partir de ahí el Granada CF mostró una cara totalmente desconocida en los minutos anteriores. Tanto fue así que los de Alcaraz fueron capaces de empatar un partido que apuntaba a derrota e incluso hicieron todo lo que estuvo a su alcance para lograr la victoria que, esta vez, tampoco llegó.

Pero por empezar por el principio, el choque de los rojiblancos volvió a tener la seriedad de otros partidos en defensa, si bien el miedo volvió a apoderarse de una alineación inicial en la que los locales solo cambiaron a un jugador respecto a la visita al Camp Nou. Barral fue la referencia en ataque de un equipo idéntico de tres cuartos de campo hacia atrás, con defensa de cinco y volviendo a tapar sus defectos para tratar de sacar a relucir alguna virtud.

En el ataque al equipo granadinista le sigue constando un mundo generar peligro, hasta el punto de que la única aproximación de la primera parte se produjo cuando un disparo de Andreas Pereira fue detenido por Tyton sin problemas bajo su portería.

Tampoco es que el Deportivo de la Coruña hubiera hecho muchos méritos hasta ese minuto, el 26, para tratar de arañarle algo más que un gol al Granada CF. De hecho, solo Antone y Marles Moreno consiguieron inquietar algo al Memo Ochoa con dos remates que no se concretaron de ninguna manera.

Cruzada la primera media hora de partido, el choque derivando en un correcalles algo inusual. Los equipos se encargaban de mover la pelota de un lado a otro del campo, pero de forma pausada, sosegada, con miedo y, lo más importante, sin generar peligro al contrario.

Así, acabaron 45 minutos muy similares a los de otros partidos disputados por los granadinistas en Los Cármenes, que en el segundo tiempo tenían que ir a por todas para cosechar el primer triunfo de la temporada.

Sin cambios

La vuelta de vestuarios apena trajo cosas nuevas a un guión que estaba más próximo del empate a cero que de cualquier otra cosa. El Deportivo empezaba a dar por válido un empate mientras el Granada CF no le inquietara en su portería. Mientras esperaba atrás, los de Garitano encontraron su mejor oportunidad en una contra para abrir el marcador.

Así fue como Florin Andone, el hombre de referencia del Deportivo de la Coruña y que le tiene tomada la medida al Granada CF, consiguió batir a Ochoa. El delantero se marchó a la contra tras recibir un balón en largo. Lombán trató de disputárselo, pero el defensa rojiblanco no terminó de defender como debía la ocasión, que derivó en que el deportivista se quedó solo ante el meta mexicano.

A su merced, intentó batirlo entre las piernas pero el balón se le quedó al portero. Sin embargo, su rechace fue aprovechado de nuevo por Andone, que batió esta vez sí al guardameta para establecer el 0-1 en el marcador y adelantar a los visitantes.

El drama volvía a vestir la camiseta rojiblanca horizontal, aunque aún con 25 minutos para poder reconducir el enésimo intento por cosechar la ansiada victoria que no termina de llegar.

Antes de que el Granada CF pudiera volver a meterse en el partido llegó el gol anulado a Bruno Gama, una gran parada de Ochoa y alguna jugada más de los granadinistas, que despertaron tarde y a su manera.

Lo hicieron cuando el técnico granadino introdujo a Samper, Boga y Kravets. La mordiente arriba supuso más llegadas, aunque sin precisar las ocasiones. Sin embargo, a la salida de un saque de esquina, tras un remate de Vezo, Lombán se encontró con un balón que disparó al fondo de la red para hacer el 1-1.

Con el empate el Granada CF trató de generar peligro. Lo hizo. Incluso Carcela envió fuera por poco un disparo lejano que podría haber dado la victoria. Pero aunque podrían suponer muchos los 7 minutos que quedaban por delante, fueron insuficientes para que el puerto que busca el granadinismo volviera a avistarse en el catalejo.

Las sensaciones son encontradas. Las hay para los que piensan que se ha perdido otra oportunidad para ganar el primer partido. Otras apuntan a que el empate fue el mal menor que frena su progresión mostrada en las dos últimas semanas. Ahora llega el parón y luego dos partidos fuera de casa y. antes de que la Liga regrese a Los Cármenes, la Copa del Rey. Todo parecen obstáculos cuando de pensar en positivo se trata.

Número Cuaderno Rojiblanco 01

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