El Museo Arqueológico de Granada invita a descubrir el dibujo y los aromas históricos este verano
A las actividades, de carácter gratuito, se suman una serie de talleres y conferencias dirigidas a todos los públicos

El Museo Arqueológico y Etnológico de Granada, dependiente de la Consejería de Cultura y Deporte, se convierte este verano en centro cultural del Albaicín con una intensa programación veraniega que incluye dos exposiciones: una de dibujo utilizado como herramienta de trabajo en Arqueología y otra sobre los olores a lo largo de la Historia.
A estas actividades, de carácter gratuito, se suman una serie de talleres y conferencias dirigidas a todos los públicos, según ha destacado la Junta de Andalucía en una nota de prensa este jueves.
Con esta programación, tal y como ha apuntado el delegado de Cultura y Deporte, David Rodríguez -que ha estado acompañado por la directora de la institución, María Ángeles Ginés- se invita a los ciudadanos a disfrutar de la cultura en estos meses, con propuestas atractivas para mayores y pequeños, así como para personas con discapacidad, haciendo partícipes del programa a todos los ciudadanos.
En relación a la muestra de dibujo arqueológico, que podrá visitarse hasta finales de octubre, ha explicado que son diez paneles ubicados en el patio de la casa de Castril sobre su origen, evolución e importancia para la investigación.
El cierre de la exposición coincidirá con el final del ciclo de conferencias sobre dibujo arqueológico que acompañarán las próximas vitrinas del mes y donde ya lucen los amuletos egiptizantes de Almuñécar, dibujados por la profesora de la Universidad de Granada, Asunción Jódar.
En agosto, este espacio mostrará la primera industria lítica de Europa occidental: los esferóides de Orce; y ya en septiembre, tendrá lugar la exhibición de un capitel romano de la villa de Los Vergeles. En octubre, esta programación se cerrará con una selección de dibujos de todos los alumnos que han participado en el seminario efectuado con anterioridad sobre dibujo arqueológico.
En cuanto a la muestra olfativa, el delegado ha señalado que han colocado una en cada sala del Museo que evoca los ambientes o los ungüentos que pudieron tener las piezas elegidas. A través del arquitecto Antonio Maciá Mateu doctor en Arquitectura y profesor titular en la Escuela de Arquitectura de Alicante, interesado en investigar los comportamientos humanos ante determinados estímulos mediante la neuroarquitectura, ha diseñado esta propuesta sensorial mediante el olfato que servirá para evocar ambientes.
Al efecto, se ha hecho una pieza denominada Beso Olfativo que es el dispositivo al que habrá que acercarse para oler las esencias. El autor de estas es el perfumista Cristian Pamies (Patio de los Perfumes), quien ha estudiado y recreado las propuestas olfativas que representa cada pieza en las diversas salas.
Evocar un hábitat
David Rodríguez ha comentado que para esta ocasión se han elegido en la sala 1 la recreación olfativa de un hábitat neolítico en Cueva en alusión a las piezas de Montefrío o Albuñol que alberga la vitrina 1. En la sala 2 hay una recreación olfativa de los ungüentos que contendrían los vidrios de la calle Zacatín, mientras que en la 3 la recreación olfativa está en una arqueta nazarí de taracea.
"Se pretende con esta experiencia que los visitantes, además de recibir información visual durante su visita a las salas, incorporen también estímulos olfativos y táctiles que les acompaña en un viaje por los grandes períodos cronológicos y culturales que albergan las tres salas del museo", ha afirmado el delegado de Cultura, para quien la pieza diseñada consigue que el usuario al aproximarse a la obra que emana la esencia, viaje hasta el sistema límbico generando emociones que posteriormente fijarán los recuerdos de esta experiencia cultural innovadora, sumergiéndose en una experiencia visual y olfativa que le conecta a culturas pasadas y refuerza el sentimiento de pertenencia a una narrativa colectiva.
Además, la colorimetría de las tres piezas diseñadas (una en cada sala) busca potenciar la relación de los dispositivos con las piezas a las que alude los aromas. El color negro evoca aromas a ahumado, el color naranja recuerda imágenes cercanas a la arcilla y las armaduras metálicas, y el color marrón se asemeja a la madera; se capta la esencia de los periodos expuestos y a su vez se refuerza la emoción que evoca el encuentro con vidas pasadas. El olfato permea el diseño desde su forma, el color y el encuentro.
De este modo, el Museo Arqueológico ofrecerá experiencia cultural multi-modal que disminuye la distancia entre el usuario y la obra. Partiendo de una exposición visual, se incorporan estímulos olfativos y táctiles que enriquecen el espacio y transforman la visita en un acto de diálogo interno que contribuye a crear nuevas memorias a una intensidad que la experiencia visual por sí sola no alcanza.
De forma paralela a este proyecto, se desarrollarán cuatro talleres familiares sobre materias primas y composiciones aromáticas que tendrán lugar en las siguientes fechas los martes 8 y 15 de julio, a las 11.00 horas y los jueves 10 y 17 de julio, a las 11.00 horas. Las actividades están dirigidas a todos los públicos, bajo inscripción previa en la web.