El pleno de Maracena se diluye entre acusaciones sin aclarar las causas del secuestro
La alcaldesa desvela que su ya expareja estaba empadronada en la localidad pese a que no residía en ella
El pleno extraordinario convocado este miércoles por el Ayuntamiento de Maracena se ha diluido en las acusaciones entre los grupos políticos aunque no servido para aclarar los motivos que pueden estar detrás del secuestro de una concejal de la corporación el pasado 21 de febrero.
La sesión, convocada a instancias de la regidora municipal, Berta Linares; ha durado aproximadamente dos horas y ha puesto de manifiesto la condena unánime de lo ocurrido por parte de los grupos, aunque con distintas lecturas en cuanto a las consecuencias y los motivos que están detrás del suceso.
Una de las novedades que se ha conocido durante el pleno es que la ya expareja de la alcaldesa, presunto secuestrador de la concejala, estaba empadronado en la localidad metropolitana sin residir en ella.
Algunos grupos políticos, salvo CS y PP, han pedido la dimisión de la primera edil al considerarla “responsable” de lo ocurrido políticamente y para evitar “hacer más daño” a Maracena.
Previamente a este ha tomado la palabra la alcaldesa de Maracena quien ha incidido en que la intención para volcar un pleno como este no ha sido otra que “esclarecer en la medida de la información de la que se dispone” lo ocurrido, al tiempo que dar “la mayor tranquilidad posible a la población”.
Linares ha vuelto a mostrar en público su deseo de que su compañera se “recupere cuanto antes” y pueda superar “este golpe”, mientras que los demás, como ella, lo superarán “como podamos”, pero “lo primero es ella, los demás formamos parte de un segundo plano”.
La regidora maracenera, que ha pedido al Gobierno local y a la oposición que se “dediquen a trabajar” por el municipio, ha reconocido que ha pasado “los peores” días de su vida desde la muerte de su padre y ha incidido en que la “máxima prioridad” es la “recuperación y tranquilidad” de Vanesa Romero.
Ha mostrado su “plena disposición” a nivel personal y en el Ayuntamiento, a colaborar con la justicia para esclarecer “el hecho tan terrible” dando la documentación necesaria.
“Ni la cercanía a las elecciones, ni la elaboración de la candidatura ni ninguna otra cosa es para poner este Ayuntamiento en cuestión, no lo vamos a consentir, lo más importante son las personas”, ha dicho Linares.
Turnos de palabra
“Querer relacionar la división política con una locura a mi no me cabe en la cabeza”, ha expresado el viceportavoz del Gobierno local, Antonio Garcia Leyva, quien ha criticado a la oposición por su actitud en los últimos días, negando que el Ayuntamiento esté intervenido tras pedir la Policía Judicial que se salvaguarden documentos y expedientes de cuatro áreas.
En su intervención ha dicho que esperan que Romero se “recupere” de esta situación, y que hay “dos compañeras sufriendo lo indecible”, refiriéndose a la alcaldesa también. A su juicio, ha ocurrido “una locura que es inconcebible para nosotros y no pone en cuestión la labor de 16 años”.
García Leyva ha reprochado a la oposición su actitud durante el pleno, en el que se han expuesto “situaciones grotescas”, lamentando las “mentiras” de Vox respecto a los informes o que los grupos hayan pedido la dimisión de la regidora o la suya propia.
Ha considerado que hay “bastante maldad” en las palabras de la concejal del Grupo Mixto, Esperanza Romero; y al edil del PP, Julio Pérez, le ha censurado que “por momentos” se haya comportado como un fiscal en el pleno.
El viceportavoz ha recalcado que se realizará una auditoría externa para ahondar “de principio a fin” toda la documentación y que aportará “tranquilidad” a los ciudadanos.
Oposición
Respecto a los grupos de la oposición, el concejal y portavoz del PP, Julio Manuel Pérez, ha conseguido con una de sus preguntas que la alcaldesa desvelase que su expareja estaba empadronada en la localidad, lo que supone una “ilegalidad”.
“Todas las incógnitas van a salir, pero no podemos mantenernos al margen a la hora de formular ciertas preguntas”, ha dicho Pérez, que también ha preguntado a la alcaldesa si ella habló con su pareja solo la noche de los hechos o la mañana de lo ocurrido, ante lo que ella ha respondido que ya informó de ello a la Guardia Civil.
Pérez ha evitado pedir la dimisión de la regidora a considerar que es una decisión que debe tomar ella, pero le ha instado que “recapacite y haga lo mejor para el pueblo y vecinos”, aunque le ha reclamado que piense en Maracena.
En el grupo de Unidas Podemos, en el que ha quedado patente la división existente entre dos de sus concejales, María Grazia Cortese, han pedido una comisión de investigación justificada para abordar esta situación y que la oposición pueda cumplir con sus obligaciones de “fiscalizar” la labor del Gobierno. El otro edil de este partido ha pedido la dimisión del concejal de Seguridad Ciudadana, Antonio Hidalgo, al que responsabiliza de lo ocurrido.
La portavoz de Vox, Cristina Jiménez, ha preguntado a Linares si conocía a quién llamó el día de los hechos el que era su pareja, si sabía que había alquilado una cochera en Armilla para el secuestro y qué conversaciones tenían para impulsar hechos tan graves.
Esta formación, junto a Partido Socialista de Libre Federación y la concejal del Grupo No Adscrito, Esperanza Romero, son los únicos que han pedido la dimisión de la regidora.
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