"Si cerramos, nos arruinan"
Miles de afectados reclaman ayudas "urgentes" a Gobierno central, Junta de Andalucía y Ayuntamiento para poder "resistir" y "salir adelante"
Los sectores de la hostelería y el turismo se han echado este jueves a las calles de Granada para lanzar un contundente SOS ante la situación generada tras las nuevas medidas decretadas por la Junta de Andalucía, que entraron en vigor el pasado martes.
Así miles de afectados han tomado las principales vías de la ciudad -desde Triunfo y hasta el Palacio de Congresos-, algunos con mandiles negros en señal de luto y otros con los que vestían a diario hasta el pasado lunes, pero todos compartiendo una misma sensación: "Si cerramos, nos arruinan".
Empresarios con más de 30 años de trabajo detrás de una barra; jóvenes que heredaron el legado de sus padres; los que probaron suerte y decidieron emprender su camino en solitario; aquellos que se hicieron socios junto a un grupo de amigos, pero todos subidos hoy en el mismo barco para gritar que no son "el problema, sino parte de la solución".
Es por eso que los más de 2.000 asistentes, según Policía Local, y en torno a 10.000 según los organizadores, han exigido ayudas a Gobierno central, Junta de Andalucía y Ayuntamiento de Granada para poder "resistir" y "salir adelante".
En este sentido, César, uno de esos trabajadores que vieron cómo su empleo en un hotel de Granada, del que depende un centenar de familias, quedó interrumpido de un día para otro, afirmaba ver el futuro "muy negro". "No tienen en cuenta que en otras crisis económicas que ha sufrido el país, como la de 2008, precisamente fue la hostelería y el turismo los que salvaron la economía y ahora nos tienen abandonados", comentaba mientras sostenía en sus manos un cartel en el que se leía: "Granada, zona cero de la catástrofe.
Uno metros más arriba, y cuando la cabecera de la manifestación encaraba la calle Reyes Católicos, el gerente de Belle Epoque en Alhamar y de otro local en el Club de Tenis de El Serrallo, Francisco Ortigosa, aseguraba que esta situación le generaba "indignación y tristeza" por no poder llevar a cabo su actividad. "A día de hoy, en nuestro caso particular, no tenemos deudas con los bancos ni hemos hecho grandes inversiones, pero si es verdad que 2020 está perdido y posiblemente también el 2021", reconocía al tiempo que reclamaba la supresión de la tasa de basuras, de ocupación de terrazas, de las cuotas de las seguridad social, "tanto nuestras como las de nuestros empleados", y que se abra una línea de crédito blando.
Protesta en el Ayuntamiento
Ya frente al Consistorio de la ciudad, algunos de los participantes en la movilización recriminaban al alcalde, Luis Salvador, y a parte del equipo de Gobierno la necesidad de ayudas "urgentes" para un sector que está "agonizando" y que genera en la provincia más de 15.000 empleos directos y genera de forma directa el 15% de su PIB.
Justo allí, otro de los hosteleros afectados, Jorge Luis Nieves, de La Gloria en Bibrambla y La Caprichosa de calle Párraga, reclamaba que las tres administraciones "deberían de dar soluciones". "Entendemos que no hay tanto dinero como en otros países, pero aquí necesitamos una ayuda, que paguemos menos impuestos o que nos rebajen la cuota de autónomos y que podamos abrir por lo menos hasta las 18.00 horas", reconocía mientras indicaba que "si no tenemos para pagarles a nuestros 15 empleados, no pueden comer".
Por su parte, el regidor municipal granadino hacía hincapié en que las 10.000 personas, según las estimaciones de los organizadores, se habían movilizado "porque están en una situación terminal y tenemos que ayudarles y, si en estos momentos, la sanidad hace que, para proteger vidas, haya que reducir la movilidad y adoptar medidas de cierre hay que tener ayudas para que aguanten esta etapa".
"Granada es la única provincia que está cerrada y he aprovechado para pedir al consejero de Presidencia, Elías Bendodo, un plan de específico de zona catastrófica y se ha comprometido a que entre este jueves y viernes se anunciarían medidas concretas para Granada", precisaba Salvador mientras insistía en que también "hablo con el presidente de la Junta y la FEMP para tener fondos directos para hacer planes específicos para el sector del comercio y hostelería".
La marcha terminaba hacia las 12.22 en el Palacio de Congresos con la lectura de un manifiesto de apoyo a la hostelería.
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