El uso de inhaladores, a examen entre los vecinos de La Zubia
Un grupo compuesto por siete médicos residentes trabaja desde noviembre en un proyecto que pretende reducir los síntomas en pacientes crónicos que emplean este dispositivo
El Centro de Salud Universitario de La Zubia estudia el uso de inhaladores por parte de pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Un grupo compuesto por siete médicos residentes trabaja desde noviembre del año pasado en la investigación, que por el momento ha evaluado los hábitos de 50 diagnosticados.
Entre las primeras conclusiones del análisis, que pretenden extender a ambulatorios de toda la provincia, los sanitarios han detectado que el empleo de esta medicación no siempre es el adecuado, han informado desde el Centro de Salud en un comunicado.
La idea, explican los coordinadores del proyecto, parte de la premisa de que para reducir los síntomas es “primordial” el uso correcto de estos dispositivos que permiten suministrar la medicación directamente a los pulmones.
Sin embargo, los pacientes de EPOC “suelen estar algo olvidados en los controles de salud” que se llevan a cabo en las consultas de atención primaria. Una vez prescritos los medicamentos no se suele comprobar si los enfermos lo aplican correctamente.
Durante la primera fase del proyecto, los médicos residentes diseñaron el proceso del estudio, con la preparación de la entrevista personal a los enfermos y la elaboración de un listado de pacientes que cumpliera con los criterios de la investigación.
Entre los meses marzo y abril de este año, los médicos recibieron en consulta a los sujetos seleccionados. En el diálogo en el centro de salud, los médicos preguntaron por la aparición y evolución de la enfermedad, así como por los hábitos de consumo de tabaco.
Usar los inhaladores
Por último, pidieron a los pacientes que utilizaran sus inhaladores. “La mayoría de los pacientes los usan de forma correcta, pero sería necesario modificar algunos detalles para un uso óptimo de los mismos”, concluye el grupo de investigación, que describe como “excepcionalmente buena” la colaboración de los enfermos.
Entre los fallos detectados, están no vaciar los pulmones completamente antes de aplicar el inhalador, no retener la respiración (apnea) después del uso del inhalador, y la falta de coordinación entre la inhalación y la pulsación del dispositivo cuando se tratan de cartuchos presurizados (la pulsación debe tener en lugar inmediatamente posterior a la inspiración, lenta y constante).
Una vez concluida esta primera fase, la intención de los médicos es volver a citar a los pacientes en unos meses para valorarlos de nuevo. En paralelo, pretenden organizar un taller para el uso correcto de inhaladores y concienciar sobre la importancia de dejar el tabaco como “medida preventiva y terapéutica más necesaria y eficaz en cuanto a la EPOC”.
Los médicos quieren extender el estudio a lo largo de toda la provincia, por lo que animan a sanitarios de todos los centros de salud de la provincia a contactar con ellos para sumarse a la investigación.
La EPOC es una patología crónica que consiste en una inflamación de los pulmones que dificulta el paso del aire. Tos, mucosidad, falta de aliento o dificultad para respirar son algunos de los síntomas de esta enfermedad.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) 251 millones de personas la sufrían en 2016. En España afecta a un 10% de la población adulta. Es una dolencia “potencialmente mortal”, relacionada con el consumo de tabaco, que predispone a otras enfermedades más graves.
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