jueves 25 abril
SUCESOS  |   | Redacción aG

Investigados dos jóvenes en Churriana y La Zubia por saltarse las restricciones

En Guadix otro hombre también ha sido detenido por desobediencia grave después de que durante tres días seguidos fuera sorprendido por la Guardia Civil en la calle sin motivo justificado

Dos personas han sido puestas a disposición judicial por desobediencia en Churriana de la Vega y La Zubia. En el primer municipio, la Guardia Civil sorprendió a tres jóvenes en el interior de un vehículo en el aparcamiento de un supermercado.

Según ha informado el Instituto Armado en una nota de prensa, el pasado 26 de marzo, los agentes identificaron a dos de ellos y les informaron de que iban a ser denunciados, pero el tercero, de 19 años, se negó a identificarse e incluso intentó huir.

Los agentes tuvieron que interceptarlo y lo trasladaron hasta el puesto de la Guardia Civil de Armilla; allí en primer lugar fue identificado y después investigado por un delito de desobediencia a agente de la autoridad.

En La Zubia, una patrulla de la Guardia Civil ha detenido por desobediencia grave a un joven de 23 años al que intento identificar cuando conducía un ciclomotor por las calles de la localidad, pero se dio a la fuga a gran velocidad, aunque inmediatamente después fue interceptado.

En Guadix, la Guardia Civil ha detenido a un vecino de Guadix de 35 años como presunto autor de un delito de desobediencia grave, después de que durante tres días seguidos fuera sorprendido haciendo caso omiso de las restricciones del estado de alarma decretado por la crisis sanitaria del coronavirus.

Según ha informado el Instituto Armado en una nota de prensa, el primer día fue sorprendido por una patrulla de la Guardia Civil conduciendo por las calles de Guadix con una segunda persona dentro del coche sin un motivo justificado, por lo que tras identificarlo se le informó de que sería denunciado por contravenir lo dispuesto en el Real Decreto 463/2020.

Al día siguiente esa misma patrulla volvió a sorprenderle en la calle sin un motivo justificado y le advirtió de que, si perseveraba en su empeño de no cumplir con lo que establece la ley en estos momentos, podría ser detenido por un delito de desobediencia grave.

El tercer día, el 26 de marzo, se presentó en el acuartelamiento de la Guardia Civil de Guadix sobre las 13.00 horas pegando voces y amenazando a los agentes por las dos veces que había sido denunciado, por lo que fue detenido, como se le había advertido previamente, por un delito de desobediencia grave a los agentes de la autoridad.

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