La autocrítica de los 'hombres gol'
En el ojo de la crítica durante todo el año, Rodri defiende que tanto él como Adrián Ramos han hecho todo lo posible por mejorar sus números anotadores
Ahora que solo quedan dos jornadas para el final de la Liga regular en Segunda División, ver las cosas con perspectiva quizás permita sacar otras conclusiones en el entorno del Granada CF a las que han primado durante todo el año futbolístico.
Uno de los focos en los que se ha puesto el acento es en la poca capacidad goleadora de los dos hombres gol de este Granada CF, Rodri Ríos y Adrián Ramos, los dos encargados de jugar como delanteros centros y que siempre han estado en la picota de los más críticos y los no tanto.
Pero el propio Diego Martínez ha ido capeando como ha podido las preguntas de la prensa semana a semana, sobre todo saliendo en defensa de sus dos jugadores claves en la delantera, llegando a decir que le daba igual quién disputara los partidos y que aportan mucho más que un gol.
Así, el técnico ha tenido además que ir alternando al colombiano y al sevillano-soriano del Granada CF, para administrar momentos y sensaciones de cada uno, hasta el punto de que ha encontrado en ambos la conexión total en el momento clave de la temporada.
Solo hay que ver los números de Rodri en las últimas jornadas. Lleva seis partidos como titular seguidos y en ellos ha marcado tres goles y ha provocado un penalti. El resurgir del delantero llega en el momento más oportuno para el granadinismo, pues además sus tantos han contribuido a dos victorias y un empate en casa.
Los números de Adrián Ramos tampoco son nada malos en esta recta final, en la que no ha jugado como titular desde hace seis partidos, pero que sin embargo entrando desde el banquillo ha marcado dos goles también claves: uno en Lugo para la victoria, de penalti; y otro crucial en Albacete que supuso el 0-1.
El propio Rodri salió este miércoles en defensa de él y su compañero, asegurando que les encantaría llevar más goles y que han hecho todo lo que estaba a su alcance para ganar los partidos. Y visto con perspectiva, se puede decir que su ausencia de goles en otros partidos tampoco era para tanto.
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