La batuta de Pozo aumenta el festival a domicilio
El sevillano crea y marca un gol con la participación de Vadillo para impulsar al Granada CF a la zona de ascenso directo · El equipo se dedicó a defender en el segundo tiempo y supo sufrir ante un Nástic peleón
Los jugadores del Granada CF celebran el único tanto del partido en Tarragona. Foto: La Liga 1|2|3
El Granada CF ha cosechado este sábado su quinta victoria de la temporada a domicilio con un tanto de Pozo, que con su batuta ha conseguido adormilar las opciones de un Nástic peleón y que generó peligro, pero que aun intentándolo todo se quedó grogui tras el gol del sevillano.
El técnico rojiblanco resolvió la papeleta de la banda izquierda como estaba esperado, con la introducción de Quini por el lesionado Álex Martínez. La sorpresa estuvo quizás en el regreso de Antonio Puertas al 'once' en detrimento de Fede Vico, algo que se barruntaba en las últimas jornadas.
No obstante fue el Nástic de Enrique Martín el que como auguraba Diego Martínez comenzó a exigir desde bien temprano y tuvo hasta tres saques de esquina en los primeros compases del partido, si bien a los locales les faltó llegar con más precisión a la meta de un Rui Silva que apenas vio cómo inquietaban.
Alejandro Pozo advirtió a los cinco minutos con un balón que recibió desde la derecha por parte de Víctor Díaz, el centro le llegó al joven jugador sevillano, que la controló y la echó al suelo, pero su remate se fue algo desviado ante la meta defendida por Bernabé.
Ocho minutos más tarde Pozo protagonizó otra genialidad con un balón que venía desde la derecha de nuevo y le llegó a la perla de la cantera sevillana, ahora en el Granada CF. El futbolista la dejó de tacón a Quini, que se fue a la línea de fondo y cuando trató de dar el último pase a Ramos se topó con el meta local.
Tampoco llegó Puertas en una nueva cometida de los rojiblancos en el minuto 22, mientras que Pozo lo intentó en la frontal un minuto más tarde. Los locales por su parte tuvieron la gran ocasión a los 24 minutos, después de un gol anulado a Sebas Coris, que previamente había rechazado Rui Silva en un disparo de otro compañero.
Un gol y a casa
Pero al igual que en Málaga el Granada CF supo esperar su momento y tener la ocasión para llevarse el partido como así ocurrió. Alejandro Pozo se llevó un buen balón en las proximidades de la meta defendida por Rui Silva y se la dejó a Vadillo, que inició una carrera en la que le acompañó Adrián Ramos y el propio Pozo en la izquierda con una carrera más propia de un velocirraptor. El talentoso jugador rojiblanco supo definir al fondo de la red para establecer el 0-1 definitivo.
De ahí al final de la primera parte pocas cosas más pasaron, un Nástic noqueado que deseaba que llegara el descanso y un Granada CF dominante controlaba en defensa por encima de todo. Esta fue la tónica dominante también después del paso de ambos equipos por vestuarios.
De hecho, la única ocasión clara que dispusieron los de Diego Martínez tras el paso por vestuarios fue un balón centrado por Montoro a balón parado, al que no llegaron a rematar ni Martínez ni Germán y que rechazó la defensa del Nástic.
Las llegadas de los locales fueron tres en el segundo tiempo. Por un lado fue Manu el que trató de sorprender a Rui Silva de vaselina. Por otro lo intentó Barreiro en la frontal también rozando el palo del meta rojiblanco. El tercer y último disparo con peligro fue de Uche, que cabeceó dentro del área.
Pero el Granada CF supo volver a defenderse como en Málaga, ante un Nástic mucho menos ofensivo, para atar la victoria que les deja líderes provisionales de Segunda División.
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