La Federación de Hostelería critica la "amenaza" de huelga y advierte de que "no será un elemento disuasorio"
Los empresarios se muestran dispuestos a seguir negociando, pero subrayan la necesidad de cerrar un convenio que "se pueda aplicar" y que esté "adaptado a la reforma laboral"
La Federación Provincial de Empresas de Hostelería y Turismo de Granada ha reprochado a los sindicatos que "amenacen" con ir a la huelga y les ha advertido de que "no será un elemento disuasorio" para que la patronal abandone su postura de reclamar "un convenio que se pueda cumplir y que se adapte a la realidad del sector".
La patronal de la hostelería se ha pronunciado de este modo después de que el encuentro mantenido este lunes con los sindicatos en el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales (Sercla) haya finalizado sin avenencia, lo que ha llevado a CCOO y UGT a anunciar que se mantiene la convocatoria de huelga prevista para el 29 agosto y el 4, 10 y 11 de septiembre.
El secretario general de la Federación, Antonio García, ha lamentado que se "amenace" con una huelga como "medida de presión" cuando las negociaciones para el nuevo convenio se mantienen, advirtiendo de que esta actitud hace "un daño descomunal" no sólo a las empresas sino al destino turístico y al empleo que genera.
"Hay provincias en una situación idéntica a la nuestra y no han pronunciado la palabra huelga, me gustaría que nuestros representantes sindicales fueran así", ha añadido García aludiendo a las negociaciones que se están desarrollando en la provincia de Málaga.
Así, ha advertido de que el 30 de agosto está prevista una salida desde Granada de la Vuelta Ciclista a España; arranca el Mundial de Baloncesto y unos días después se celebra el Campeonato de Tiro Olímpico, eventos todos ellos que "arrastran a una gran cantidad de personas", entre ellos "numerosos medios internacionales".
Los empresarios se muestran dispuestos a seguir negociando, pero subrayan la necesidad de cerrar un convenio que "se pueda aplicar" y que esté "adaptado a la reforma laboral" y a la "realidad del sector", de modo que las empresas "sobrevivan".
"Es cierto que ha habido un aumento de las ocupaciones, pero la rentabilidad de las empresas está bajo mínimos", ha añadido García, quien ha advertido de que por ello los empresarios mantendrán su postura en las negociaciones.
