La que 'estáis liando'... estorninos
Aunque hay épocas en las que ni aparecen, pero cuando lo hacen se convierten en el peor compañero de vecindario y comercios de la Plaza Trinidad
Durante todo el día la plaza es un ir y venir de ciudadanos, turistas o comerciantes hacia su día a día, rutas para visitantes o quehaceres habituales. Sin embargo, al llegar la noche, cuando el sol empieza a caer, ellos toman la Plaza Trinidad.
Y se apoderan de este punto céntrico de Granada porque aún no se ha encontrado el elixir para provocar que se vayan. Para echarlos directamente. Los estorninos se convierten cada atardecer, durante gran parte de la noche y mientras salen los primeros rayos de sol en el peor vecino de quienes viven, trabajan o pasean por este enclave.
"Las criaturas que viven en estos pisos no sé ni cómo duermen", comenta un comerciante que tiene un kiosko y al que probablemente más de una vez alguna publicación le haya quedado directamente para tirar a la basura.
A su ruido insoportable también le acompaña los restos que van quedando en el suelo y que caen desde el aire o los olores que se van quedando, al menos, hasta que pasan los operarios de limpieza municipal.
Lo peor de todo es que al tratarse de una especie protegida por la Comunidad Europea las actuaciones en este punto se reducen con la pretensión de que estos inquilinos de la plaza Trinidad busquen otro punto con menos molestias para todos.
En declaraciones a ahoraGranada, el concejal de Medio Ambiente, Juan Antonio Mérida, ha asegurado que es en la parte Norte de la plaza donde están mayormente concentrados, junto a la esquina con la calle Mesones, en la que hay mayor densidad.
No obstante, ha recordado que no es la cantidad que había hace tres años, porque se trata de una cifra "muy inferior" a la de entonces.
El edil ha dicho que en cualquier caso se multiplicarán por tantas veces como hagan falta las labores de limpieza para mantener la plaza en buen estado.
El Ayuntamiento de Granada ya había planteado varias opciones contra estos incómodos pájaros como halcones, altavoces o redes, que sin embargo han caído en 'saco roto' con el paso del tiempo.
Ahora, el consistorio prevé poner en marcha una lucha 'multifactorial' que completa varias acciones a la vez para molestarles y provocar su marcha. Mérida augura que debido al frío los pájaros terminarán por volver a marcharse de la plaza.
Mientras tanto estos animales se han convertido en el 'enemigo público' número 1 no solo de las autoridades, sino también de los vecinos y comerciantes de la plaza de la Trinidad, quienes mantienen su disgusto cuando con sus picos se acomodan en los árboles de este punto de Granada.
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