La reforma del ROM de Granada, al pleno de julio
IU y PSOE critican que se abrirá la puerta a la "elección a dedo"
El pleno es el último del curso político. Foto: Álex Cámara
El Ayuntamiento de Granada llevará este viernes al pleno ordinario del mes de julio la aprobación de una modificación parcial del Reglamento Orgánico Municipal (ROM) que permitirá que sus altos cargos no tengan que ser funcionarios.
La reforma ha sido ya criticada tanto por el PSOE como por IU, que advierten de que este cambio, que han censurado por su "urgencia", abrirá la puerta a la "elección a dedo" de las personas que ocupen esos puestos.
Sin embargo, y según ha señalado en rueda de prensa el concejal de Personal, Organización y Servicios Generales, Juan Antonio Fuentes, esta modificación viene impuesta por una sentencia dictada por la jurisdicción contencioso-administrativo y da cumplimiento a la Ley de Bases del Régimen Local, que entró en vigor el pasado mes de diciembre.
Por ello, ha respondido a las críticas de la oposición "sonrojándose" por sus afirmaciones porque, según ha dicho, tanto IU como PSOE "colocan" en las consejerías de la Junta, en altos cargos, como en las viceconsejerías o direcciones generales, a personal que no es funcionario de la administración autonómica.
"¿Cómo son entonces capaces ellos de darnos lecciones de ética moral?", se ha preguntado Fuentes, quien ha asegurado que el Ayuntamiento granadino es de los que menos personal de confianza tienen, y de 17 altos cargos, sólo cinco no son funcionarios, aunque cumplen otra serie de requisitos, como poseer una licenciatura y acreditada experiencia en el sector.
El PSOE ya ha anunciado que votará en contra de la aprobación inicial de modificación del ROM, porque "sus verdaderos intereses no son nada claros", según ha indicado este jueves en rueda de prensa el responsable del grupo municipal socialista en materia de personal, Baldomero Oliver, que ha afirmado que los socialistas no quieren ser "cómplices" en esa "manifestación ostensible de querer hacer del Consistorio un cortijo para que el alcalde y los suyos coloquen a sus amigos".
El concejal ha dicho que "la reforma propuesta por el PP no responde, tal y como está planteada, al objetivo que se supone debía perseguir" y eso "es algo que se aprecia a poco que se escarbe un poquito, pues el planteamiento es tan malo desde un punto de vista técnico que salta a la vista".
"Incumple" la reforma local
Según ha indicado, el PP pretende reformar el artículo 5 del ROM para que directores generales y coordinadores generales de este Ayuntamiento puedan ser elegidos de personal no funcionario, algo que, desde su punto de vista "incumple la propia reforma de la Administración Local".
Por su parte, el portavoz del grupo municipal de IU, Francisco Puentedura, ha denunciado que el equipo de gobierno municipal "inicie una reforma urgente y express del ROM, con objeto de salvar los altos cargos del Ayuntamiento que son elegidos a dedo entre el personal de confianza del PP y del alcalde de Granada".
Según Puentedura, la Ley que reforma la Administración Local señala que "el nombramiento de nuevos altos cargos debe realizarse entre el personal funcionario del Ayuntamiento o de otras administraciones, como medida de ahorro en el coste de los puestos directivos, y sólo excepcionalmente se permite que no sean funcionarios, si por el desarrollo de sus funciones está justificado" para ello "esta excepcionalidad de ser funcionario público debe recogerse en el Reglamento Orgánico Municipal, motivo por el cual se ha hecho esta reforma".
Por ello, para el portavoz, "esta modificación del ROM no está justificada pues no es obligatoria, sino potestativa del Ayuntamiento". Además el edil de IU asegura "que el gobierno municipal del PP ha abusado de estas excepciones a lo largo de su trayectoria convirtiéndolas en norma".
Como ejemplo señala cómo el PP ha nombrado ocho coordinadores de área más ocho directores generales de las mismas áreas que se solapan en sus funciones "suponiendo un coste al año de más 1.500.000 euros en sueldos". De estos 16 altos cargos, siete no son funcionarios "lo que supone un coste añadido de cerca de 700.000 euros al año que podría ahorrarse el Ayuntamiento si estos puestos hubiesen sido cubiertos con personal funcionario propio".
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