La soprano Patricia Petibon canta en la Alhambra
La francesa interpretará un ramillete de canciones francesas e hispanoamericanas, en las que se incluye alguna sorpresa
La soprano de coloratura Patricia Petibon hace su presentación en el Festival de Música y Danza de Granada tras haber triunfado en los principales escenarios europeos. Su registro artístico va desde el barroco hasta la música contemporánea.
En el Palacio de Carlos V interpretará una selección de canciones del repertorio francés e hispanoamericano con concesiones a Claude Debussy, en la celebración de su centenario, a coetáneos y discípulos tales como Satie, Collet o Poulenc, y a compositores como Manuel de Falla o Joaquín Turina que visitaron el París de comienzos del siglo XX.
Obras de Claude Debussy, Nicolas Bacri, Joaquín Rodrigo, Gabriel Fauré, Henri Collet, Fernando Obradors, Manuel de Falla, Joaquín Turina, Erik Satie, Francis Poulenc, Heitor Villa-Lobos, Francisco Mignone, Enrique Granados, Leonard Bernstein, George Gershwin, Agustín Lara… acompañadas de alguna sorpresa y de la pianista Susan Manoff. El concierto cuenta con el patrocinio de ABADES, empresa colaboradora del Festival que ayer albergó en el Carmen de los Chapiteles, un Encuentro con la encantadora artista, tras la firma de convenio con Julián Martín Arjona, presidente del Grupo Abades.
El pájaro de fuego
Tercera y última función del espectacular cuento para niños con música, sombras y danza a partir de El pájaro de fuego, de Igor Stravinski, de la compañía italiana Gioco Vita. El espectáculo cuenta con la colaboración de Corral & Vargas.
Arpa Jonda es una combinación perfecta entre la innovación, la creación y la tradición. Este proyecto muestra un recorrido por distintos palos del flamenco: tientos, soleás, granainas, alegrías, bulerías… contando con el arpa como principal protagonista, a la que acompaña una voz redonda y acogedora que se adapta a la particular textura del instrumento.
Esta suma propone una mezcla de sonidos y ecos armónicos que demuestran que los sutiles timbres y las jonduras del arpa, son también un camino para el flamenco.
En esta ocasión es el arpa la que aborda un repertorio flamenco al estilo tradicional, como solista y como instrumento de acompañamiento al cante.
El resultado es un sonido incuestionablemente flamenco que busca y encuentra en sus treinta y ocho cuerdas un mundo nuevo de posibilidades y matices. Explorando con libertad el instrumento la arpista desarrolla de su propia mano una nueva técnica a medida de este proyecto y con una intención puramente flamenca. Un formato rompedor que ofrece una experiencia que no deja indiferente al público, por ser una apuesta flamenca elegante, original y creativa.