La tormenta no amaina en Los Cármenes
El Granada CF suma un empate insuficiente para calmar las aguas ante el Deportivo de la Coruña, que supo esperar su momento y pudo llevarse el partido
El Granada CF ha cedido dos puntos más en el Nuevo Estadio de Los Cármenes, esta vez ante el Deportivo de la Coruña, un punto que no sirve para amainar la tormenta que cae sobre el club rojiblanco al haber sumado solo un punto de nueve posibles como local en lo que va de temporada.
La tarde sorprendió a propios y extraños en el Zaidín con una tormenta que, como si de símil futbolístico se tratase, reflejó a la perfeción la tempestad que se cierne sobre el equipo de Guillermo Abascal, que sigue pidiendo tiempo y promete trabajo para reconducir las desconexiones a las que se ven sometidos sus jugadores cuando reciben un mazazo moral.
Ocurrió en dos ocasiones durante el partido. En el minuto 32 de partido cuando José Ángel remató un balón tras un saque de esquina que podía haber supuesto el 1-1 en el marcador, tras el que los futbolistas rojiblancos 'dimitieron' de sus funciones y apenas arrearon para evitar que llegara el gol de los gallegos, como así fue.
La otra ocasión que supuso el seísmo en los futbolistas del Granada CF que estaba en el campo fue el gol de Lucas Pérez en el minuto 2 de la reanudación. De ahí a los últimos 15 minutos los rojiblancos se apagaron, otra vez.
Dice Guillermo Abascal que promete seguir trabajando para que estas situaciones no se produzca. La pregunta es si el tiempo y el fútbol, que no espera a nadie, le darán la posibilidad de reconducir una cuestión que ya le ha costado más de un disgusto al granadinismo.
Seis cambios respecto al Huesca
Con las ausencias de Uzuni, Hongla y Tsitaisvili por su convocatoria de selecciones, el técnico sevillano apostó por revolucionar su once, pese a que este viernes dijo que tres cambios en la alineación ya eran "muchos".
De este modo, apostó por una defensa de tres centrales buscando más ayudas atrás ante el descaro de algunos jugadores del Deportivo, metiendo juntos por primera vez en el once a Migue Rubio, Ignasi Miquel y Williams. Del mismo modo dio su primera titularidad a Reinier y Pablo Sáenz y apostó por Weissman en la delantera.
El plan de partido pareció claro. Meter el gol y retenerlo. Le salió a medias la intención al Granada CF, que vio cómo con una buena combinación entre Saénz y Neva el balón acabó raso centrado ante un intento de despeje de Martínez la pelota se coló dentro de su propia portería.
A partir de ahí el equipo rojiblanco fue especulativo en gran parte del partido, hasta que en la segunda parte, cuando se vio con el agua al cuello, figurada y literalmente; arreó en busca del 2-1 que llegó de la mano de Boyé, pero la acción, iniciada por Rubén Sánchez, estaba en claro fuera de juego.
El Granada CF sigue apurando la paciencia de su afición en este arranque liguero, con solo cuatro puntos de doce posibles y dejando una imagen más que mejorable. Elche será la piedra de toque a domicilio para comprobar si los errores se corrigen o se agravan.