Las brujas vuelven a danzar en Soportújar
La VIII Feria del Embrujo, del 8 al 12 de agosto, se ha convertido en el prólogo pagano de las fiestas patronales del municipio alpujarreño
La Feria cuenta con la colaboración de Diputación y forma parte de un proyecto turístico y antropológico sobre la brujería. Foto: J. Grosso
La 'Feria del Embrujo' de Soportújar es una fiesta popular y pagana que se celebra cada mes de agosto desde hace ya ocho años, antes de que llegue la fiesta patronal de San Roque y en la que se evocan y recrean algunos de los rituales que supuestamente celebraban las brujas a lo largo y ancho de esta aldea alpujarreña, así como algunos actos más adaptados a los nuevos tiempos. La Feria cuenta este año con la colaboración de la Diputación de Granada y forma parte de un ambicioso proyecto turístico y antropológico sobre la brujería.
Como ocurre cada mes de agosto desde hace ocho años, el próximo jueves día 11 una larga comitiva de brujas hará su entrada ceremonial en el pequeño municipio de Soportújar (300 habitantes), en el centro de la Alpujarra granadina. Como manda la tradición, las brujas, en realidad un nutrido grupo de vecinas y turistas disfrazadas con sombrero negro y escoba, celebrarán el tradicional aquelarre en la plaza del Ayuntamiento y encenderán luego, una gran queimada con degustación de productos típicos alpujarreños y velada musical.
El diputado provincial de turismo, Enrique Medina, ha manifestado durante la presentación que “la Noche de las Brujas se ha convertido en otro referente más dentro de las fiestas tradicionales de la Alpujarra y en una de las actividades mas atractivas del verano, que en el futuro podría ser declarada de interés turístico autonómico y nacional”.
El alcalde de la localidad, José Antonio Martín, ha indicado por su parte que “el éxito de la Feria del Embrujo ha sido sorprendente porque en la primera edición contabilizamos 5.000 personas y el año pasado llegamos a los 20.000 visitantes, y gracias a esta gran acogida los negocios locales que estaban en horas muy bajas antes del proyecto, tienen ahora las visitas garantizadas todo el año y también esto repercute a nivel comarcal, enriqueciendo la oferta turística de la Alpujarra”.
Una singular historia
A juicio de Martín, “la Feria forma parte de un proyecto más ambicioso denominado 'Proyecto Embrujo', un proyecto estratégico de restauración arquitectónica, patrimonial y antropológica para el desarrollo turístico de nuestro municipio. Para ello estamos trabajando en contacto con otras localidades que comparten la misma identidad, como Zugarramurdi (Navarra) o Salem (USA), la llamada “ciudad de la Brujas”.
A los oriundos de Soportújar los han conocido siempre sus vecinos de la Alpujarra como los “brujos”. Aunque se desconoce el origen del gentilicio, el Ayuntamiento está recuperando parte de esta singular historia a través de la tradición oral transmitida por los abuelos y bisabuelos de la localidad. “Un conjunto de historias extrañas, unas muy antiguas y otras más actuales, que son realmente misteriosas y que no tienen explicación alguna”, asegura su alcalde.
La octava edición de la “Feria del Embrujo” de Soportújar se extiende la próxima semana para dar paso el sábado 13 de agosto a las fiestas en honor a San Roque, el santo patrón de la localidad. Además, de la llamada “Noche de las Brujas”, el jueves 11, el Ayuntamiento ha programado un espectáculo de danza flamenca (lunes), una velada poético-musical (martes), un espectáculo circense y una fiesta caribeña (miércoles) y como fin de fiesta, el viernes 12, una noche de comedias y el tradicional baile de las brujas, que volverán a danzar antes de que llegue San Roque.
El municipio de Soportújar ha hecho de la brujería su seña de identidad y sobre todo, un eficaz reclamo turístico para todo el año. La localidad de tan solo 300 habitantes cuenta ya con varios espacios vinculados con el tema, como la Era de los Aquelarres, la Cueva del Embrujo, el Ojo de la Bruja, el Mirador del Embrujo o el Centro de la Interpretación de la Brujería, que forman parte del ambicioso “Proyecto Embrujo”, financiado por la Junta de Andalucía, la Diputación de Granada y el propio Ayuntamiento.
