Crecen un 29% desde la Covid las personas que reciben ayudas de Cáritas en el Área Metropolitana de Granada
Más de 1.300 personas recurren a este servicio de la iglesia, que ya ha advertido la disyuntiva que surge en la población vulnerable entre pagar la hipoteca o comprar alimentos
El aumento del coste de la vida debido a la crisis de precios ha provocado en los últimos años un incremento notable del número de personas que son atendidas por Cáritas a través de sus centros repartidos por el Área Metropolitana de Granada en sus municipios, en donde 1.341 ciudadanos reciben ayuda para superar las dificultades sobrevenidas por esta situación.
Se trata por tanto de un incremento del 29% respecto a los datos registrados por Cáritas el primer año de la pandemia de la Covid-19, cuando entonces eran 1.033 personas las atendidas. El dato también es mayor a los registrados un año antes, al alcanzar en 2022 los 1.179.
Se trata de los registros de 2023 correspondientes a la Memoria Anual que Cáritas elabora cada año, que reflejan un incremento de las personas que acuden a este servicio de la Iglesia y que el año pasado ayudó a cerca de 7.500 personas en la provincia, de los que un 40% corresponden al encarecimiento de la vida.
Cáritas desglosa al número de personas que atiende por las vicarias que tiene en sus territorios además de por arciprestazgo, que en el caso del Área Metropolitana lo distribuye en cinco puntos ne la comarca metropolitana, excluyendo la capital.
De este modo, la zona de Las Gabias, donde se integran hasta nueve pueblos del Área Metropolitana, es donde más personas reciben ayuda de este servicio, con hasta 571, cifra que ha aumentado desde 2020 en hasta 61 más y que un año antes estaba en torno a las 303. Los recursos que destina en este punto ascienden a los 47.293 euros con 59 agentes.
Le siguen los pueblos que integran el territorio de Sierra Elvira, la zona Norte y Oeste de la comarca y cinco municipios, en los que se atienden a 338 personas cuando hace cuatro años fueron 297. Los recursos que se destinan en este punto llegan a los 39.376 euros con 59 agentes también.
Alfaguara es el tercer territorio en número de personas de la comarca metropolitana, con hasta 166, lo que se traduce en 14 más que las que había en 2020 y en donde la partida es de 18.753 euros con 61 agentes.
Por otra parte, en la zona de Sierra Nevada, integrada por 13 municipios de la Vega Sur y por debajo de la montaña, son 137 personas las que ncesitan ayuda, si bien la partida es de 2.358 euros coordinados por 25 agentes.
Por último, en la zona de Santa Fe el aumento de las ayudas de Cáritas en sus ocho pueblos ha pasado de los 26 casos en 2020 a los 129 que atienden actualmente, con 33.418 euros y 40 agentes.
Los pobres, cada vez más pobres
En su informe Cáritas ya puso el acento en que los pobres cada vez son más pobres y tienen mayor dificultad para resolver situaciones más complejas en el día a día, siendo la alimentación la que lidera las demandas de ayudas de emergencia para los ciudadanos que acuden a esta entidad de la iglesia católica.
Los registros reflejan que las 94 Cáritas parroquiales de la diócesis granadina lograron atender las demandas más urgentes de 6.568 personas, con un impacto total de unas 13.983 personas beneficiadas, gracias a una inversión superior al millón de euros.
4 de cada 5 personas atendidas recibieron ayudas para comprar alimentos. Estas ayudas encabezan las partidas de gasto con más de 380.000 euros invertidos.
Las familias dedican una mayor parte de su presupuesto a pagar la vivienda y otros gastos esenciales a consecuencia del incremento de precios. Como estrategia de subsistencia, cada vez más personas comparten hogar para hacer frente a los gastos. En apenas cinco años, el porcentaje de hogares en régimen de realquiler ha pasado de un 3 a un 9% y en el caso de compartir piso con otras personas sin parentesco alcanza al 10% de la población atendida.
Las situaciones de necesidad y privación aumentan especialmente para los hogares con presencia de niños y niñas (49%) lo que afecta a las condiciones de vida de esos menores y predispone a un mayor riesgo de pobreza o exclusión en la adultez.
Las situaciones de carencia más extremas corresponden a quienes no disponen de ingresos por trabajo o por prestaciones (57%) y los hogares monoparentales (19%), en su mayoría encabezados por una mujer, especialmente expuestos a situaciones de privación material severa al contar, en numerosos casos, con una sola fuente de ingresos.