"Lo que hablamos en junio no podrá ser con la penalización, pero nuestra motivación sigue intacta"
En la primera entrevista antes del inicio de la Liga, Diego Martínez dice que el "único camino" que ha de seguir el Granada CF pasa por la unidad de todos, pues el equipo no está "para perder fuerzas" · Está contento con los refuerzos y pide estar agradecido a Ramos
A las puertas del debut como entrenador en Primera División, Diego Martínez afronta el reto de conducir de nuevo al Granada CF hacia el éxito en busca de la permanencia. El gallego asume que el reto será complejo, pero al mismo tiempo le apasiona el camino que tendrá que desarrollar hasta la meta. Así vive en ahoraGranada el técnico rojiblanco el estreno liguero de su equipo en la primera entrevista de la temporada que concede.
Pregunta.- ¿En qué cambia empezar una pretemporada en un club en el que ya se estaba, a hacerlo de nuevas como el año pasado?
Respuesta.- En lo que es la organización de la misma no cambia nada. En la planificación de los contenidos y el conocimiento de los recursos que tienes en el club, a todos los niveles, como el clima, qué viene mejor a los jugadores, qué nos viene mejor al cuerpo técnico… En ese sentido es mejor cuando llevas un año. No tienes que poner tantas cosas en marcha. Conoces tus necesidades mejor.
P.- ¿Tranquiliza personalmente comenzar el verano sabiendo que ya se está en un equipo, como le ocurría en el Sevilla Atlético?
R.- Es cierto que el conocer no solo a los auxiliares, al servicio médico y a todo el mundo que trabaja contigo, llevar un año creo que ayuda mucho, es mejor. Es un tiempo que se gana.
P.- ¿Y conocer a la plantilla, es un tiempo que también se gana?
R.- Ahí es distinto, porque un por un lado tienes la ventaja que hay un tren en marcha y unos valores que el núcleo que mantenemos creen en ellos y están identificados con ellos y le harán mucho más fácil la integración. Pero luego hay que integrar a esos nuevos en una categoría nueva. Lo bonito de esto es que con el mismo jugador necesitas reinventarte, sorprenderlo y cosas distintas. Dar respuestas a necesidades diferentes, nuevos estímulos y darle nuevos roles. Es la parte que más me gusta, lo que tiene que ver con el verde.
"Todas las decisiones que tomas, hasta aquellas que no tomas, son importantes. Todo suma y todo resta"
P.- ¿Es posible la amistad entre un jugador y un entrenador?
R.- Sí, sobre todo cuando dejas de ser entrenador-jugador. Tengo muy buena relación con mis jugadores. Raúl Espínola fue jugador mío y ahora es amigo mío, siendo ayudante. Esa relación de amistad se solidifica cuando ya no hay una relación de entrenador y jugador de por medio. Eso no significa que no haya confianza y complicidad. Es más, yo a este grupo le estoy muy agradecido porque tenemos un vínculo muy especial, afectivo y de confianza muy fuerte y bueno. Pero somos profesionales, tengo que tomar decisiones, el que no juega pues está jodido, obvio.
P.- ¿Incluso al que le toque salir ahora en el mercado de verano?
R.- Bueno pero es ley del fútbol. Sucede siempre, también puede suceder porque lo firma otro equipo por un fichaje mejor. O porque los ciclos de los jugadores se agotan. Es una cosa natural. Desde la frontalidad y la sinceridad la decisión se podrá compartir o no, pero vas de frente y es la realidad. Eso a la larga genera que el vínculo siga fuerte a nivel afectivo a nivel de amistad.
P.- ¿Cuál es la decisión más difícil que le ha tocado tomar este verano como entrenador del Granada CF?
R.- Son muchas a lo largo de las semanas. No podría jerarquizar una decisión más importante que otra. Todas las que tomas, hasta aquellas que no tomas, son importantes. Todo suma y todo resta. Creo que jerarquizarlas no corresponde a la realidad.
Estamos en un ambiente muy complejo, de atender a muchas personalidades muy diferentes, con situaciones personales diversas, con un marco institucional muy complejo, con una situación económica compleja… En cualquier caso tenemos que sentirnos muy orgullosos de dónde estamos y del proceso que llevamos como equipo.
"Preparados para competir estamos. Ilusionados también. Aunque lejos de lo que podemos y queremos llegar a ser, evidentemente, porque todavía queda"
P.- Aunque como entrenador le hubiera gustado que la pretemporada durase tres meses para probar cosas, el tiempo da para lo que da, ¿se hace corto el verano para planificar una temporada entera?
R.- Yo sí que veo y creo que sería positivo que la ventana de fichajes acabase antes de empezar la Liga. Como en la Liga Inglesa, eso y el tema de los horarios en la Premier me parece muy interesante. Cualquier trabajador debe tener claro cuál va a ser su futuro antes de comenzar una competición, donde debe haber unos intereses comunes. Ese trasvase de jugadores no es positivo para el club y los jugadores. Por mi manera de ver la vida tenemos que adaptarnos.
Muchas veces las soluciones no son las ideales, pero sí que son las mejores para ese momento. Eso es un poco lo que intentamos. Claro que el verano se hace corto, pero más que el tiempo es el ‘timing’ de las decisiones. Si a ese ‘timing’, de entradas y salidas; se le une que empieza la competición, que nuestra realidad va variando de cuando vas planificando la plantilla antes del verano a cuando va avanzando, qué puedes fichar y que no. Esto solo añade dificultad y adversidades.
P.- ¿Llega el Granada CF con los deberes hechos a la primera jornada?
R.- Preparados para competir estamos. Ilusionados también. Aunque lejos de lo que podemos y queremos llegar a ser, evidentemente, porque todavía queda. Pero muy ilusionados. Tenemos que tener muy claro el tipo de equipo que somos. Sabemos que seremos del presupuesto más bajo, si no el más bajo de la categoría. No voy a entrar en el límite salarial. Estamos a la cola en ese aspecto, pero a la cabeza de motivación, de ganas de reivindicarnos, de ganas de mostrar los valores que nos han traído hasta aquí y que nos han hecho identificarnos como equipo con nuestra afición.
Esa es nuestra fuerza. Tener clara nuestra realidad, nuestro rol dentro de la categoría, eso es una buena manera de optimizar nuestros recursos al máximo. Nos vamos a exprimir como equipo, como profesionales. En eso sí que tengo una ilusión tremenda, porque veo cómo se esfuerza el grupo cada día.
P.- El año pasado empleó una frase que caló: “Donde no lleguemos con el presupuesto, llegaremos con la ilusión”.
R.- Pues este año más todavía. Quién nos iba a decir aquello. Hemos cumplido un sueño y a mí a nivel personal más todavía. Granada es una ciudad que la sientes muy tuya y con la que tengo unos vínculos tremendos. Además he sentido el cariño de la gente. Ese sueño lo cumplimos el año pasado y nos costó muchísimo. En esa línea debemos ir.
Claro que queremos que la consecuencia en mayo sea mantenernos en Primera, pero eso queda tan lejos que lo único que nos vale es el presente, el ir al siguiente partido. Va a haber que sudar sangre, como me decía Antonio Cordón. Cada punto en Primera cuesta mucho, para eso estamos mentalizados, pero también tenemos que disfrutar de ese esfuerzo titánico.
"Hemos acertado en lo futbolístico y en lo personal. Queremos jugadores con ganas de entrenarse, que se identifiquen pronto con los valores"
P.- ¿Se está mentalizado para cambiar el chip de pujar por un ascenso, con lo que ello conlleva en cuanto a resultados, a hacerlo por no bajar? El guión será otro.
R.- Por nuestra parte y lo que yo veo en el equipo, cuerpo técnico y jugadores, hay gente del entorno que estuvo en Primera sabe el sufrimiento que cuesta. Cuando hablo con Fran Sánchez o Antonio Fernández Monterrubio tienen claro qué rol y qué tipo de equipo vamos a ser en la categoría y tienen claro que la tolerancia a los momentos malos tiene que ser mayor y mejor a la del año pasado. Aunque el año pasado, en la semana a semana hubo momentos en los que todos fuéramos muy tremendistas, fue para enmarcar. Solo tuvimos dos derrotas seguidas.
Me hace gracia cuando se dicen las cosas y no se analizan. “El equipo empezó titubeante”, he llegado a escuchar sobre nuestra pasada campaña. ¿Que empezamos titubeantes con once puntos de quince? Lo firmo para mi carrera empezar así siempre. Y luego el final de Liga que tuvimos, hubo quien pensaba que nos caeríamos desde noviembre, porque teníamos un final de Liga impresionante. Sporting, Oviedo, Tenerife, Albacete, Mallorca, Cádiz… Nosotros de los últimos partidos perdimos en Gijón, que no merecimos, y los ocho siguientes ganamos tres y empatamos cinco. Que todos momentos malos sea perder dos partidos.
P.- ¿Está contento con los fichajes, con lo que ha venido?
R.- Sí, la gente que ha venido estoy contento. Teníamos claro cuál es nuestro mercado, que está muy acotado, no solo por lo económico. Hemos acertado en lo futbolístico y en lo personal. Queremos jugadores con ganas de entrenarse, que se identifiquen pronto con los valores. Que sean profesionales, con ganas de mejorarse y de aprender de las experiencias nuevas. En ese sentido estoy contento.
Sí que es cierto que necesitamos refuerzos, lo sabe el club. La categoría será muy exigente. Tenemos ahora mismo disponibles 19, contando con que Neva va a tener ficha en el primer equipo. Los números hablan por sí solos y más con el nivel y exigencia en Primera, que la habrá a nivel físico, emocional y de todo. Son muchos factores que por ello necesitamos esos refuerzos. Los que están quieren estar, han querido venir y saben a dónde vienen. Es algo que acelera el compromiso con el equipo.
P.- Del mismo modo que el día en que se confirma la penalización de la Liga supondría un varapalo, este martes el club avanzó que ha vuelto a ganar ‘oxígeno’ en el tope salarial, ¿le tranquiliza esto a tres semanas para que se cierre el mercado?
R.- Siempre intento estar tranquilo. He intentado mantener al equipo focalizado en el verde. Intento controlar aquello que puedo controlar. Lo que se escapa a mis ámbitos de competencia lo único que puedo hacer es tenerlos en cuenta y adaptarme, intento no emplear mucha energía en eso. Cuanto mejor estemos y si eso es así, pues mejor.
Ojalá podamos cumplir lo que habíamos previsto en la planificación del verano, que anticipo que no será así. Lo que hablamos en junio eso no podrá ser ya con esta penalización, aunque se haya ahora ampliado. Hemos tenido que reajustar sobre el reajuste. Si ya de por sí es difícil, ahora es el más difícil todavía. Ahora, nuestra motivación y nuestro hambre siguen intactas.
P.- ¿Se van a completar todas las fichas?
R.- Sinceramente no lo creo, aunque esto del mercado nunca se sabe hasta que se cierran. Antes de que se cierren pueden aparecer oportunidades que ahora no contemplas y de repente aparecen, para lo bueno y para lo malo.
P.- Se da el caso además de que este año hay tres jornadas antes del cierre.
R.- Eso es lo que no entiendo. Es un error. No voy a hablar de números en cuanto a fichajes. No sabemos cuántos, pero lo que habíamos previsto inicialmente no se puede. Lo que sí ojalá podamos en los próximos días es que vayan cubriéndose las necesidades que tenemos. A partir de ahí, poder afrontar la temporada sin miedo a que en el avión de camino a Villarreal no nos pongan muy alto el aire acondicionado no vaya a ser que se nos resfríe alguno. Debemos hilar fino a todos los niveles.
P.- ¿Es viable el salto de un futbolista de Segunda B a Primera, para cuando tenga que recurrir a algún jugador del filial?
R.- Sí, por qué no. Al final esto es hablar por hablar. Lo importante es lo que tú muestres sobre el césped. El verde es el que da y quita. Trabajamos con los jugadores, los preparamos para dar el salto al primer equipo. De hecho esta pretemporada hemos estado con muchos de ellos. En ese sentido no solo es el rendimiento, sino las circunstancias, entender los procesos de cada uno. El año pasado vimos procesos con determinados jugadores, que a alguno le ha valido para continuar, como es el caso de Aarón. Otros como Adri Castellano han salido o José Antonio está cedido.
Cada proceso es diferente. Al final creo que es bueno contribuir a mejorar a ese jugador lo máximo posible. Contribuimos a procesos de jugadores que estaban cedidos, caso de Pozo, que posiblemente permanezca en la primera plantilla del Sevilla; Neva, que va a estar con nosotros, ha estado durante un año en el día a día y ese proceso lo lleva en la mochila. Ha hecho una buena pretemporada soportada en un año de trabajo que lleva con el equipo. No es solo una de nuestras funciones y es uno de los desafíos que más nos gustan. Que nuestros jugadores crezcan con nosotros, más allá de que uno juegue 3.000 minutos o 500.
Para poder convencer a determinados jugadores esa es una de las claves también. Los grandes equipos saben que cuando nos ceden a un jugador, con nosotros tendrán una metodología y condiciones en las que el jugador se desarrollará y crecerá. Cuando vuelven a sus clubes son mejores. Dejando en el camino lo que nos interesa, que es el rendimiento en el Granada CF.
"Claro que hay a lo largo del año conflictos y claro que hay jugadores que no juegan que estén descontentos o fastidiados. Otra cosa es cómo se gestiona y cómo se lleva en el día a día"
P.- Una de las cosas que más repiten los jugadores de usted es que está encima de ellos, exigente mentalmente. El manejo de cada situación para que todo el mundo esté cómodo, aunque no juegue, esa fijación, ¿cuánto de importante es para el día a día?
R.- Hay tres cosas. Siempre digo al equipo técnico que debemos especializarnos en 25 personas. Cada uno tenemos unas necesidades. Si hay unos valores y principios como equipo fuertes, y que el proyecto colectivo está por encima del individual y la gente se adhiere a él, y el que no, no puede estar, es otro aspecto importante. Eso no quita que claro que hay a lo largo del año conflictos y claro que hay jugadores que no juegan que estén descontentos o fastidiados. Otra cosa es cómo se gestiona y cómo se lleva en el día a día. El tercer factor tiene que ver con que el jugador sienta que es importante más allá de los minutos que juegue. Los hechos nos lo han demostrado.
Pozo llevaba tiempo sin jugar, sale en Albacete y es determinante. Quini empezó jugando, luego no jugó y luego fue importante. La sostenibilidad en el rendimiento de los ‘discontinuos’, entiéndaseme; es normal. Los jugadores tienen oscilaciones en el rendimiento. Les pasa a todos los equipos del mundo.
Es muy difícil ser siempre desbordante con el rival, por ejemplo. Hay posiciones donde es más difícil ser regular. A lo mejor tener regularidad en el puesto de central es más ‘fácil’, porque es un puesto de constancia más que de desequilibrio, como puede ser un extremo o un delantero. La sostenibilidad en el rendimiento, saber aceptar cuando uno no juega, hacerles ver que son importantes… Hay que mostrárselo y demostrárselo.
Esto no es un discurso mío. Luego con hechos, cuando tú estás bien, los méritos son los que hace que cada uno juegue o no juegue. Y cuando uno está bien se le refuerza y cuando no, hay que hacerles ver que son importantes. Eso cuesta, se va alimentando. Luego también esto tiene que ver con que tengo muy buenos líderes dentro del vestuario. Si yo no los tengo, para que transmitan esto, no tiene sentido. El entorno no ha sido tóxico, en cuanto a buscar mentiras. Opinar va a opinar todo el mundo, pero no ha sido un entorno de meter mentiras. Básicamente es eso: ser especialistas en 25 jugadores, alinear el proyecto personal con el colectivo y hacerles ver que todo el mundo es importante, porque lo son.
Una de las cosas de las que más orgulloso me sentí el año pasado fue que nuestros auxiliares sintiesen lo importante que eran para nosotros, y así me lo transmitieron, que se sienten parte del equipo. Y es que lo son, para que haya un buen clima de entendimiento y de exigencia. Somos todos un equipo y tenemos que exprimir el limón, ir todos a nuestro máximo. Las consecuencias será lo que tenga que ser. Son valores que han calado dentro.
P.- El año pasado se vio esa gestión en ejemplos como con Vadillo o Puertas, cuando eran irregulares, o cómo salió en defensa el viernes de Adrián Ramos, después de que fuera pitado. Es quizás esta la gestión en público y en privado de situaciones futbolísticas y personales con gestos que, aunque parezca que no los hace, existen.
R.- A Vadillo y a Puertas lo ‘matábais’ (bromea). Hay una que no me sacaron, y es que dije que Ramos y Rodri estarían cuando más los necesitáramos. Uno marcó en Albacete y otro contra el Tenerife. Pero ahí nos abrazamos todos (ríe). Lo de Adrián Ramos cuando ya llegamos aquí era un poco especial. Pero tenemos que estar muy agradecidos a Adrián. La situación que le ha tocado soportar, y hablo del año que he vivido con él, lo ha hecho con una profesionalidad y humanidad tremenda.
Es muy buen tipo, buena persona, un gran profesional y que se ha matado por nosotros en momentos de mucha dificultad. Ha puesto los intereses del equipo por delante de sus propios intereses y solo podemos estarle agradecidos. Esta situación sabíamos que se podía dar, no lo esperábamos, pues deseábamos que se hubiese solucionado antes. No se solucionó y lo aceptamos y asumimos. A Adrián Ramos hay que estarle muy agradecido, por todo lo que nos ha dado y todo lo que nos va a dar.
"Nuestro único camino es que vayamos unidos. En el momento en que no vayamos todos unidos de la mano perderemos fuerza y te garantizo que no estamos para perder fuerza"
P.- ¿Está preparado para cuando, llegado el caso, la afición se ponga nerviosa por los resultados?
R.- Estamos preparados para todo. Si vengo de Pamplona y de Sevilla, de entornos muy exigentes. Todos lo que queremos es ganar. Debemos tener claro qué tipo de equipo vamos a hacer. Esto también me lo decían el año pasado y en la jornada 2 la gente nos aplaudió después del empate con el Lugo. Me parece un poco cómodo decir “es que somos así”. Lo que vivió el equipo el año pasado con la afición es que estuvo de 20 sobre 10.
Creo que esa es nuestra línea, nuestro único camino es que vayamos unidos. En el momento en que no vayamos todos unidos de la mano perderemos fuerza y te garantizo que no estamos para perder fuerza. Necesitamos toda la fuerza del mundo. Son momentos donde las aficiones crecen y maduran.
Creo que el Granada no era hace unos años los valores que representan estos jugadores. Eran otros, ni mejores ni peores. Si hemos conseguido algo que me decían que era imposible, que la gente se identificase con el equipo, por qué no vamos a ser un ejemplo otra vez este año y conseguir un sueño entre todos.
P.- Es el entrenador más joven de Primera, donde debuta, ¿le da vértigo asomarse a la máxima categoría?
R.- Era un proceso natural, que tenía que llegar. Además me siento muy orgulloso de que cada categoría en la que hemos entrenado nos la hemos ganado a pulso. El ascenso de Segunda B a Segunda A, de Segunda a Primera. El cartel de entrenador joven, empecé con 20 años; me ha tocado en casi todas las categorías.
Me siento muy realizado como entrenador, muy identificado con este grupo de jugadores; el tema de la edad nunca ha estado en mi cabeza, si no no estaría sentado aquí. Creo que ha llegado cuando me tenía que llegar. Quiero volver a sentir lo que sentí el año pasado. Fui un entrenador muy feliz en el día a día, con mi equipo técnico, con mis jugadores. El día a día del verde, más allá de los resultados. Volver a conseguir esa felicidad es lo que quiero ahora en Primera División.
Popular ahora
