Los autobuses de Granada reducen su capacidad para garantizar la distancia de seguridad
Todos los vehículos cuentan con una pegatina en los asientos que no deben ser ocupados por los pasajeros
Los autobuses del transporte público de Granada incorporan nuevas medidas de seguridad para garantizar el distanciamiento necesario entre los usuarios dentro de los vehículos.
Así, desde este jueves, todos los autobuses cuentan con una pegatina en los asientos que no deben ser ocupados por los pasajeros para concienciar a los usuarios sobre la necesidad de guardar la distancia de seguridad, según ha explicado en una nota el concejal de Movilidad y Seguridad Ciudadana, César Díaz.
Para garantizar la seguridad de quienes prefieren realizar el trayecto de pie, se ha reducido la capacidad de los autobuses a entre 50 y 55 personas en el caso de los vehículos articulados, mientras que para los de doce metros la cifra se sitúa entre 30 y 35 pasajeros y en los minibuses, entre 10 y 12 usuarios.
La nueva señalización de asientos se une a la instalación en el interior de cada vehículo de unos carteles informativos en los que se advierte al usuario del uso obligatorio de mascarillas en el transporte público, de mantener la distancia de seguridad, así como la recomendación de que, como medida de responsabilidad, utilicen el importe exacto del billete, ya que desde este jueves vuelve a admitirse el pago con dinero en metálico.
Transportes Rober está realizando "un seguimiento exhaustivo de los viajeros" para ajustar los servicios de acuerdo con las distintas fases de la desescalada, con el objetivo de asegurar la utilización del autobús con plena garantía de espacio y sin aglomeraciones.
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