"Hay que sacar pecho de la Semana Santa de Granada y no callarse cuando sea criticada"
Jesús Muros, presidente de la Federación de Cofradías granadina, hace balance de sus cuatro años al frente del organismo y lamenta desconocer de dónde han surgido las últimas polémicas surgidas en torno a la pasión
Jesús Muros, en el interior de las oficinas que alberga la Federación de Cofradías de la Semana Santa de Granada. Foto: Álex Cámara
El presidente de la Federación de Hermandades y Cofradías de la Semana Santa de Granada, Jesús Muros, cumple en la recta final de esta primavera cuatro años al frente del organismo. A sólo dos días de comenzar la pasión granadina 2018 hace balance de su mandato, de todo lo que se ha podido mejorar y de las polémicas surgidas en los dos últimos años que, asegura, desconoce de dónde proceden. [VER ESPECIAL SEMANA SANTA 2018]
Pregunta.- ¿Cómo afronta Granada su Semana Santa de 2018?
Respuesta.- Hemos avanzado muchísimo y creo que vamos a tener muy buena Semana Santa. Los cortejos se van consolidando, según me cuentan las hermandades y lo que hemos podido ver nosotros en estos tres años es que efectivamente los cortejos son más nutridos y hermandades que tenían un cortejo pequeñito se les ve cortejos alegres. Esperamos que los que son monaguillos cuando cumplan diez años no quieran ser monaguillos grandes, cuando antiguamente a los niños se les ponía su hábito nazareno se les recortaba la cara. Creo que vamos a tener muy buena Semana Santa.
P.- ¿A pesar del tiempo?
R.- Las predicciones sólo anuncian lluvia para el Domingo de Ramos, sólo hasta media mañana. La predicción que tenemos a través de una empresa con tres satélites es que dan lluvia hasta media mañana del Domingo de Ramos y luego no dan lluvia hasta el Sábado Santo, que dan una borrasca pero con lluvia que puede ser pasajera.
P.- Entonces, ¿ha vuelto a firmar el 'pacto' para que no llueva?
R.- Sí, claro (sonríe). Dije que en cuatro años de presidente no lloviera y sólo faltaron Las Maravillas y la Borriquilla el primer año. En mis tres mandatos sólo dejaron de salir estas dos hermandades.
P.- Los problemas, ¿los crea la Federación de Cofradías o se los crean?
R.- Es posible que en algún momento Federación en su capacidad de organizar cree algún conflicto. Hay un refrán que dice que 'para freír un huevo hay que romperlo'. Cuando se cambia el sistema del concurso de fotografía y se cambia después de no sé cuántos años, indiscutiblemente crea un conflicto entre algunos fotógrafos que no les parece bien. Ya está publicado hacer el concurso este año con esos cambios que hemos creído razonables atender. Se ha ido evolucionando y cambiando.
No hay un interés de protagonismo ni de cambiar por cambiar. Cuando decidimos crear la entrada por detrás a los palcos de Ganivet no es un capricho, es una exigencia de seguridad. No es razonable que si se produce cualquier problema la gente tenga que abandonar los palcos por el mismo sitio por el que discurre una hermandad. Hay una vía doble de evacuación. Eso puede crear algún conflicto, porque la gente se sube a las escaleras, molesta a algunas personas, estábamos acostumbrados a que desde la Plaza de Mariana hasta Correos se llegaba andando a la par de los nazarenos. Eso no era bonito.
Todas esas cosas que ha hecho Federación ha creado en algunos casos un malestar o un conflicto, pero había que hacerlo. En otros sitios se ha podido crear porque somos humanos. No tengo, ni mi Junta de Gobierno, el don de la perfección ni de la verdad. Equivocarnos, indiscutiblemente nos podemos equivocar y si nos equivocamos rectificamos.
P.- La calle Ganivet y la Tribuna Oficial y en Pasiegas, ¿estaban antes de que usted llegara al cargo?
R.- Sí, en Catedral estamos entrando desde el año 2000 y ya llevábamos 10-12 años allí. En Ganivet siendo hermano mayor de la Aurora ya he pasado por esa calle. Si estuve dos años sin cargo en mi hermandad y llevo tres de presidente, al menos las tribunas en Ganivet llevan seis o siete años...
P.- ¿A qué se debe este 'incendio' con las tribunas en este momento?
R.- No tengo ni idea. Lo mismo que las tribunas u otra serie de acontecimientos que se han producido en los dos últimos años no sé de dónde vienen ni por parte de quién en crear conflictos artificiales. Pero ahí están.
Insisto en el tema de la cera, en ninguna de las grandes capitales de provincia ni en sus grandes ciudades, donde hay grandes semanas santas; en ninguna hay este tema de la cera. Por qué en Granada, a lo mejor hay mucha gente que no le gustamos.
P.- Sin embargo, quizás haya mucha gente que no le gustan pero se aprovechan de la Semana Santa.
R.- Indiscutiblemente. Cuántos puestos de trabajo genera la Semana Santa. Cuánto ganan algunos negocios en Semana Santa y no lo hacen el resto del año. Ya no es sólo el turismo, me refiero al montón de vecinos, de la Carretera de Jaén o Málaga, Chana o la Encina, que durante el resto del año no se les ocurre bajar un lunes o un martes al centro de la ciudad a tomarse un helado y resulta que en Semana Santa vienen. Eso está generando una riqueza para la ciudad.
Muros, en un momento de la entrevista con ahoraGranada. Foto: Álex Cámara
P.- ¿Qué tal es la relación con el Ayuntamiento de Granada?
R.- Cordial, no puede ser de otra manera.
P.- ¿Podría ser mejor?
R.- Siempre se puede ser mejor, pero es que también podría ser peor. Es cordial, muy cordial.
P.- ¿Hay circunstancias en las que echa de menos que el Ayuntamiento empatice más con las hermandades y cofradías y se ponga más de su parte?
R.- Entiendo que tanto el Ayuntamiento como el resto de ciudadanos deberían poner en una balanza qué les da la Semana Santa a la ciudad y qué le entorpece. Una vez que se viera ese balance y viera que es muy positivo de lo que le da la Semana Santa, quizás el Ayuntamiento y muchas otras instituciones pensarían de otra manera.
P.- ¿Está cansado de ser presidente?
R.- A veces sí. Esto es un trabajo muy cansado y en algunos momentos desagradecido. Cuando uno accede a un cargo y más en las cofradías no entras para que se te agradezca nada, sí entras para servir. Yo no quiero que nadie me agradezca nada, pero sí que en algunos momentos no reciba unos ataques sin ton ni son.
P.- ¿Qué le va a quedar por hacer cuando acabe su mandato?
R.- Elaborar un reglamento de régimen interno, aun cuando ya está perfectamente asumido lo del diputado de día, estuviera por escrito. Me hubiera gustado que algunas veces se hubiera entendido mejor lo que hacía la Federación. Y sobre todo haber llegado mucho más a los pequeños. Quizás la Federación ha dado pasos muy importantes de lo que es su reconocimiento de la ciudad en actos en los que no estaba y ya está representada y quizás no haber concienciado a sus propios cofrades de que dejen de ser cofrades de Domingo de Ramos a Domingo de Resurrección. Y que saquen pecho de su Semana Santa y no se callen cuando sea criticada en cualquier sitio.
P.- ¿Qué va a hacer en mayo entonces?
R.- Sinceramente no lo sé. Tengo que evaluar lo que le está suponiendo a mi salud estar aquí, hay una serie de temas que no se ven y no se notan. Este estrés está minando la salud de un hombre de 61 años y que durante cuatro años no ha tenido vida fuera de lo que es la vida social cofrade.
P.- Tiene ganas de sentarse en un palco o ir a ver una salida sin ser reconocido.
R.- Eso es. Más de sentarme en un palco, poder ir a un rincón desapercibido. El otro día, a modo de anécdota, iba por la calle e iban unas señoras hablando. De repente se me acercó una y me dijo: "¿Usted es ese hombre de las cofradías que sale mucho en la tele?". (Sonríe) En muchos aspectos he dejado de ser anónimo, me siento observado a veces cuando te subes a un autobús. Esa sensación de no anonimato no me gusta mucho. No obstante alaga mucho cuando alguien se acerca y dice que se hace muy bien esto o aquello.
Alaga mucho el montón de chavales jóvenes que se siente identificada con lo que se está haciendo. Esa es la medalla que me llevaré si decido no quedarme. Cuando dejé de ser hermano mayor de la Aurora es lo que me llevé, que tenía una Junta de Gobierno con gente muy joven. La muestra es que sigue trabajando magníficamente, algo tuve que ver ahí. Si aquí se queda un grupo joven que vaya tomando el relevo en las hermandades o la federación, eso me haría sentirme orgulloso.
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