Los primeros pasos de Carmen en la lucha feminista
Esta granadina de 11 años encabezó por primera vez la marcha del 8M en Granada para reivindicar la igualdad plena entre géneros
A sus 11 años, Carmen vivió este 8M de una forma diferente. Aunque ya había participado en otras movilizaciones, la de este miércoles fue la primera en la que encabezó la marcha que recorrió las calles de Granada para reivindicar la igualdad plena entre hombres y mujeres. Una experiencia "inolvidable" que había estado esperando desde hacía días.
Los nervios se reflejaban en sus ojos, los mismos que se cogían en la boca del estómago. Su garganta se había preparado a conciencia para gritar con más fuerza. En su cabeza, todos los cánticos que había aprendido.
Su jornada comenzó en el colegio donde estudia, el Gómez Moreno de la capital. Con las uñas pintadas de morado y estrenando una camiseta del mismo color, regalo de la pareja de su padre, no quiso dejar pasar la oportunidad de explicarles a sus compañeros "la importancia de este día y lo que es el feminismo". "He conseguido que algunos de mis amigos se unan a la marcha", comentó ilusionada después.
A pocos minutos del comienzo de la manifestación, la niña reconocía sentirse nerviosa aunque entusiasmada por "participar en una marcha en la que poder manifestar lo que yo siento por el feminismo". "Espero que la gente se conciencie de la importancia que tiene la igualdad y que los que vayan paseando por la calle se vayan uniendo", apuntó al tiempo que entonaba su cántico favorito: "Mírala que linda viene, mírala que linda va, es la lucha feminista que no da ni un paso atrás. Si tu pasas por mi casa, si tú ves a mi mamá, tú le dices que venga conmigo, que este movimiento no da ni un paso atrás".
Durante todo el recorrido, Carmen no paró de vocear las consignas dispuestas para la ocasión, pese a la "vergüenza" inicial. "Me ha gustado mucho cuando he cogido el megáfono para gritar: ¡Alerta, alerta que camina, la lucha feminista por las calles granadinas!".
A su lado estuvo en todo momento Alejandra Chenoll, familiar suyo y miembro del Espacio Feminismo Unitario de Granada. "Carmen ha estado viendo la preparación de toda la campaña de comunicación. Es una niña muy curiosa y siempre está haciendo preguntas. Es llamativo cómo le da mucha importancia a detalles que ya las adultas no les damos. Ayer nos pintábamos las uñas de morado porque ella quería ir al colegio y que todo el mundo supiese que era feminista y la importancia de serlo y reivindicarlo", comentó.
Para Chenoll, "es muy importante reivindicar un mundo nuevo, más igualitario, donde ser mujer no signifique que por serlo naces con desventaja y estás como designada a que te atraviesen distintas violencias. Es importante también que las niñas vean que caminan sobre piedras que pusieron otras. Esto es un camino largo en el que no vamos a cesar. Para mí es importante transmitir estos valores a mis sobrinas, mis hijas que ya son mayores y a la hija de mi pareja porque ellas son el futuro".
Carmen guio la marcha hasta el Paseo del Salón, donde culminó. Todavía ilusionada por lo vivido, reconoció su deseo de repetir la experiencia el próximo año porque "ha sido muy bonita". Ella, junto a los cientos de niños y adolescentes que participaron en la tarde de este miércoles en la movilización reivindicativa, es ya uno de los eslabones de una cadena feminista imparable.
