Moclín se cita con el Cristo del Paño
Está previsto que esta fiesta reúna a más de 15.000 romeros, por lo que ha preparado para esta Fiesta de Interés Turístico un dispositivo de seguridad
El Ayuntamiento de los Pueblos de Moclín, en el Poniente de Granada, espera que la procesión del Cristo del Paño reúna este sábado a más de 15.000 romeros, por lo que ha preparado para esta Fiesta de Interés Turístico un dispositivo de seguridad que contará con servicios de drones y helicópteros.
Según informaba en septiembre el Ayuntamiento de Moclín en una nota de prensa, el dispositivo "este año se verá ampliamente reforzado con personal y medios técnicos". "Todos somos conscientes de que el hecho de que la procesión se celebre en sábado se traduce en una asistencia de personas mucho mayor y, por tanto, en unas necesidades de servicios para ellos muy superior", ha explicado el alcalde de Moclín, Marco Pérez.
El dispositivo coordina a técnicos del Ayuntamiento y representantes de Guardia Civil, Infoca, 061, 112, Protección Civil, Distrito Sanitario, la parroquia y los servicios medioambientales, y los cuerpos policiales autonómico y local.
La concejala de Seguridad Ciudadana de Moclín, Natalia Moreno, ha agradecido la implicación de todos los cuerpos e instituciones que, de una u otra forma, participan en el dispositivo, "con más de 250 personas que garantizarán la seguridad de los asistentes y que la celebración de un día tan importante para todos sea un éxito".
El dispositivo especial contará con servicio de drones, helicópteros, UVI móvil, varios retenes de bomberos y más de una veintena de vehículos de diversos cuerpos de seguridad. No obstante, la fe hacia este lienzo --utilizado por la mesnadas de los Reyes Católicos-- es tal que los actos religiosos comienzan semanas antes, cuando la Asociación de Amigos del Santísimo Cristo del Paño baja la imagen para exponerla al público en su templo, la iglesia de la Encarnación.
Esta devoción está documentada desde el siglo XVII, cuando ya se hacía mención a sus "cualidades milagrosas" que surgieron, según cuenta la historia local, de la supuesta curación de un sacristán que tenía la vista casi perdida por cataratas, conocida como la enfermedad del paño.