Murphy se queda sin trabajo en Granada
El Granada CF vence por la mínima al Leganés con el tercer gol de Antonio Puertas y destierra los malos augurios que años atrás acompañaban al equipo, que suma ya 14 puntos
Acostumbrados hace solo unos años a que un rival se llevara puntos de Los Cármenes en los conocidos como minutos de la malafollá, a que el colista pintara la cara de los jugadores del Granada CF y de hacer el mejor equipo posible al rival más débil, por ahora, de la categoría, se puede decir alto y claro que Murphy se ha quedado sin trabajo en Granada.
El Granada CF ha cosechado este sábado una nueva victoria y van cuatro en siete jornadas que le permite mantenerse en una nube inimaginable hasta hace mes y medio cuando comenzó la competición. Los rojiblancos vencieron por la mínima a un Leganés que fue de menos a más.
Para este encuentro Diego Martínez ofreció una alineación que fue idéntica a la del partido ante el Barcelona, con los mismos protagonistas en busca de tres puntos clave y con cinco cambios respecto al choque del martes en Zorrilla.
Comenzó el partido con un Granada CF llevando la iniciativa en los primeros compases, hasta el punto que de la presión arriba los de Diego Martinez botaron hasta cinco saques de esquina, uno de ellos a raíz de un remate en segundo palo de Ramón Azeez que se fue alta.
La primera ocasión clara de la primera parte para el Leganés llegó a los 22 minutos cuando En Nesyri quedó ante Rui Silva, encargado que los madrileños se adelantaran en el marcador.
Pero el Granada CF lo siguió intentando sin desistir y así Germán dio un balón en largo a Roberto Soldado, que no pudo cogerla en primera instancia pero aprovechó el error de la defensa visitante.
El delantero valenciano se hizo con el balón y se fue a la frontal del área para cederla a la corona a Antonio Puertas, que ante la salida en falso de Juan Soriano le pegó a media altura para meterla al fondo de la red.
Con el Granada CF por delante en el marcador el equipo de Diego Martinez continuó dando pasos hacia el segundo con un rival que perdió a Rubén Pérez antes del descanso.
Los madrileños tuvieron en sus botas la ocasión más clara para poder empatar el partido estuvo en las botas de Braithwaite, que envió al segundo anillo pidiendo posible penalti de Montoro. El choque llegó con la victoria local a vestuarios.
Un Leganés mejor tras el descanso
Tras el paso por vestuarios el Leganés dio un paso decidido a por el empate buscando algún error en la defensa que generase peligro, tal y como ocurrió a los 56 minutos de partido con un balón colgado a media altura que Soldado estuvo a punto de rematar en propia meta tras rechace de su portero, que en segunda instancia atajó antes de que Siovas lo aprovechara.
El partido entró en fase de mayor intensidad, ante lo que Diego Martinez metió en el campo a Carlos Fernández. No obstante fue Montoro el que trató de batir a Soriano que estaba adelantado sin conseguirlo.
Después se iniciaron varios contragolpes en los que el Granada CF no logró definir ni en las botas de Machis ni de Fernández, pero en los que los rojiblancos corroboraron la verticalidad y rapidez de su juego.
El choque fue afrontando la recta final sin ocasiones ni de uno ni otro conjunto, marcado por el equilibrio en el control del balón y las interrupciones, lo que impidió la nitidez de uno y otro conjunto.
El Leganés mejoró en la fase final, en la que el Granada CF trató de sorprender a la contra sin conseguirlo. Lo que sí hicieron bien los de Diego Martínez fue aguantar los intentos sin fortuna de los visitantes para quedarse con tres puntos más que permiten alcanzar los 14 hasta, de nuevo, la Primera División.
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