Otra noche mágica en Escolapios
San José de Calasanz vive otro de los momentos obligados de presenciar en la Cuaresma de Granada
Momento del descendimiento de la cruz. Foto: Hermandad del Vía Crucis
La Parroquia de San José de Calasanz fue testigo este domingo de otro de esos momentos mágicos en la víspera de la Semana Santa de Granada.
El descendimiento del Cristo de la Expiración para situarlo posteriormente sobre el paso se ha convertido por méritos propios en ese momento de recogimiento y al mismo tiempo mágico que a unos días de que comience la pasión viven las cofradías en plena Cuaresma.
Pasadas las 21.00 horas, la parroquia de la hermandad escolapia se quedó pequeña un año más para volver a presenciar uno de los actos más concurridos del periodo previo a la Semana Santa.
Debido al centenario de la Hermandad del Vía Crucis, fueron hermanos e integrantes de la Junta de Gobierno de esta cofradía los encargados de portar el crucificado hasta el punto donde se encontraba el paso dorado sobre el que saldrá a las calles de Granada el próximo Viernes Santo.
Culminó así uno de los actos más esperados de la Cuaresma, que entra en la cuenta atrás definitiva hasta llegar al Domingo de Ramos.
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