Otro verano de incertidumbre institucional
Mientras el alcalde asegura de palabra que el Granada CF podrá hacer uso de Los Cármenes, el reglamento de la RFEF y la UEFA es claro: "El derecho de utilizar el estadio debe confirmarse mediante un contrato escrito"
El Granada CF y los culebrones institucionales de verano son una cita ineludible a la que ni el club ni las administraciones públicas suelen fallar cada estío. En esta ocasión es la clasificación europea del club la que tiene en vilo al granadinismo, a la espera de conocer si el uso del Nuevo Estadio de Los Cármenes podrá ser efectivo en la Europa League en caso de que la entidad tenga que jugar algún partido en el Zaidín.
Y es que las declaraciones del alcalde hace dos días, asegurando que el Granada CF lo tiene todo en regla para poder hacer uso del coliseo granadinista no casa con las exigencias de la RFEF y la UEFA en este sentido, pues el reglamento de ambos organismos es bien claro.
Se trata del documento que precisa los detalles para que los clubes puedan obtener licencia para competiciones europeas la próxima temporada y que en el título VI: Criterios de infraestructura, Disposiciones Generales, artículo 51 refleja todos los detalles referentes al estadio.
El estadio "debe ser propiedad del Club solicitante u ostentar éste, en su caso, título suficiente que le habilite para su utilización, ya sea en calidad de arrendatario, concesionario, prestatario o cualquier otro reconocido legalmente", precisa el reglamento de los organismos deportivos.
Actualmente el Granada CF tiene la cesión ampliada del Nuevo Los Cármenes pese a expirar el convenio de uso, si bien la renovación de este aún no se ha producido, lo que a pesar de la palabra del alcalde cabe recordar que "el derecho de utilizar el estadio debe confirmarse mediante un contrato escrito con el propietario del mismo".
Esto hace que de a pesar de la afirmación de Luis Salvador, de momento quede en el aire la cesión del campo, que se le cederá pero aún no está hecha. De hecho ahora se está a la espera de que los equipos técnicos de ambas partes se sienten a negociar las condiciones del convenio de larga duración.
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