viernes 29 marzo
LA CRÓNICA HORIZONTAL  |   | Nacho Santana

Permanencia en el zurrón para soñar con algo más

La victoria del Granada CF frente al Getafe permite a los rojiblancos sumar 41 puntos y mantenerse en Primera de forma virtual · Roberto Soldado se quejó de un pitido que no era del árbitro cuando iba a afrontar un contragolpe · Medié Jiménez, mano 'ligera' para las tarjetas

Las imágenes que dejó un partido que será histórico. Fotos: Carlos Gil

Volvió la Liga a Los Cármenes y lo hizo con un partido tan intenso como se esperaba. Tanto el Granada CF como el Getafe son equipos acostumbrados a los encuentros cerrados, de disputa de balón y de exprimir al máximo la ventaja, unas señas de identidad que marcaron el transcurso de un enfrentamiento sin espectadores en las gradas pero de alto voltaje. Con este resultado, los de Diego Martínez se permiten soñar con la clasificación para competiciones continentales tras cerrar la permanencia virtual.

No hubo un recibimiento multitudinario ni cánticos que animasen al equipo a buscar un resultado positivo. El ambiente, otrora festivo, se llenó con los gritos de jugadores y cuerpos técnicos, más allá del relleno virtual implantado por LaLiga que tanto contrasta con las butacas vacías. 

No afectó a los rojiblancos la falta de su público. Carlos Fernández, perdido en la primera parte en disputas con los jugadores del Getafe, demostró tras el descanso que su gran momento previo a la pausa en la competición no es algo circunstancial, sino que cuenta con la madera necesaria para dar guerra en Primera durante bastantes años. La actuación del jugador sevillano acabaría siendo decisiva tras la sustitución de Soldado.

A quien decidiese esperar al estreno de su Granada CF para volver a disfrutar del fútbol por la televisión quizás le chocase ver que ni jugadores ni colegiados cumplieron con el protocolo de distanciamiento marcado, o a los suplentes azulones con la mascarilla en la barbilla.

Lo que sí que debió de resultarle familiar fue lo que ocurrió sobre el césped: pugnas sin fin, repliegues y contragolpes, justo lo que prometía el partido entre dos equipos que opositan claramente a competir en Europa la próxima temporada. La seña de identidad de los de Diego Martínez sigue intacta 96 días después.

El pitido que pudo costar dos puntos

Entre la intrahistoria de un partido tosco con final feliz destaca una anécdota que pudo costarle dos puntos al conjunto rojiblanco. Roberto Soldado buscaba un balón en profundidad cuando se escuchó un pitido que llevó al ariete a dar un pase atrás sin mirar a una zona a la que no corría ninguno de sus compañeros.

La sorpresa para el delantero del Granada CF llegó al ver que no se señalaba fuera de juego por su parte ni se interrumpía el encuentro. El silbido provenía del bando rival, ya fuese por parte de algún jugador o de alguien del banquillo. Soldado no tardó en recriminar al juez de línea lo ocurrido con un “han pitado ellos” perfectamente audible por la falta de público. 

De esa pérdida de balón nació la jugada que dio el gol al Getafe. Quizás de haberse terminado la jugada, o de ceder el esférico en otra zona del campo, no habría existido el contragolpe que puso por delante a los de Bordalás. Quedará la incógnita al respecto

Diez tarjetas y una baja

La única nota negativa para el Granada CF tras la victoria es el balance de amonestaciones. Hasta diez cartulinas amarillas mostró el colegiado a lo largo del encuentro, seis de ellas con color rojiblanco. 

Como resultado, Diego Martínez no podrá contar en el próximo partido con Yangel Herrera. El venezolano fue amonestado en el minuto 68 del encuentro y tendrá que ver desde la grada el partido ante el Betis del lunes. Su baja será sensible, si bien su despliegue físico se podrá paliar en cierto modo gracias a las cinco sustituciones disponibles.

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