Pillado en Granada un "activo delincuente" dedicado a robar en cajeros de todo el país
El hombre, de 25 años, contaba con 21 detenciones previas y con 20 reclamaciones judiciales
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Granada a un hombre de 25 años en el transcurso de un dispositivo especial para prevenir actuaciones delictivas contra personas mayores en los cajeros automáticos.
El varón acumula 21 detenciones previas, además de otras tantas reclamaciones judiciales en vigor a lo largo de toda la geografía española por delitos cometidos presuntamente contra la propiedad, según ha informado el cuerpo policial en una nota de prensa.
La investigación tuvo su origen a finales del pasado año, momento en el que se empezaron a recibir denuncias relativas a hurtos cometidos en distintos cajeros ubicados en el Distrito Sur de Granada. Las cantidades sustraídas oscilaban entre los 600 y los 900 euros, siendo la distracción de la víctima el método utilizado para cometer estos delitos.
En todos los casos, el presunto autor, unas veces en solitario y otras con apoyo de otra persona, actuaba con el mismo 'modus operandi'. Así, abordaban a su víctima mientras esta estaba haciendo uso de un cajero automático ubicado en la parte exterior de una sucursal bancaria y conseguían distraer su atención de varias formas.
En algunas ocasiones advertían de que el cajero funcionaba mal, justo en el momento en el que el usuario ya había introducido sus claves, consiguiendo que este se marchara en busca de otro cajero, pero dejando la sesión abierta. De esta manera, los presuntos autores retomaban la sesión y operaban para extraer la máxima cantidad de dinero posible, agotando el límite diario de la tarjeta.
En otras ocasiones, distraían a las víctimas colocando algún objeto, como folletos publicitarios o periódicos, que impedían ver la pantalla táctil del cajero y aprovecha ese momento para hacerse con el dinero disponible en las opciones diseñadas para sacar cantidades fijas.
Por otra parte, la investigación se vio dificultada debido a que los presuntos autores ocultaban su identidad usando gorras, gafas de sol o mascarillas. Es por eso que las entidades bancarias de la zona recibieron una especial atención, disponiéndose patrullas a pie y en vehículos camuflados en sus alrededores.
Una veintena de requisitorias judiciales
Este dispositivo especial dio resultado cuando una mañana una patrulla policial observó en un cajero automático a un varón, con características físicas compatibles a las de uno de los presuntos autores, que se encontraba al lado de otro que estaba haciendo uso del mismo. Una vez identificado resultó ser un hombre de nacionalidad rumana y 25 años, que ya había sido detenido en 21 ocasiones y que contaba con 20 requisitorias judiciales, de las que tres eran de ingreso en prisión.
El ahora detenido había estado actuando en otras partes del país, pero principalmente en Madrid y su conurbación, lugar donde acumulaba 13 de las 20 requisitorias judiciales, además de otras dos policiales emitidas por las Comisarías de Chamartín y Ciudad Lineal.
El detenido, tras haber sido puesto a disposición de la autoridad judicial, ya ha ingresado en prisión.
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