Que no panda el cúnico
Con las dos derrotas seguidas el alarmismo empieza a asomar la cabecita · El equipo ha perdido los dos últimos partidos por sus propios errores que el rival no perdonó · La enfermería, cada vez más vacía
A los que ya peinan algunas canas y están superando la treintena con holgura les viene a la cabeza algunas frases míticas de la popular producción mexicana 'El Chapulín Colorado', un superhéroe que se dedicaba a defender, ayudar, explicar o consolar las necesidades de los ciudadanos en cualquier situación de peligro.
Una de esas frases míticas, que quizás los 'milenials' no sepan ni lo que es, era "que no panda el cúnico", una forma disléxica de pedir calma en los momentos de mayor nerviosismo, pues él con su capa roja, sus slips amarillos y su antifaz rojo lo tenía todo controlado.
Esta expresión podría emplearse en toda su amplitud en el entorno del Granada CF, donde el nerviosismo ya ha comenzado a aflorar en algunos sectores después de sufrir las dos primeras derrotas seguidas de la temporada, creyendo que todo lo que había hasta ahora era un camino de rosas.
Y no, el propio Diego Martínez ya avisó de que el camino iba a ser duro y que los 20 puntos que tiene actualmente el equipo rojiblanco, cosechados por méritos propios, le permiten situaciones como las que ahora está viviendo, a once puntos del descenso directo a Segunda División.
Cuatro errores, cuatro goles
Que los partidos ante el Getafe y la Real Sociedad no iban a ser un paseo se veía venir y quedó patente en el terreno de juego. Lo que muchos no esperaban es que en cuatro errores de los jugadores de Diego Martínez llegasen cuatro goles evitables a toda costa.
Pero el error se paga duro en la máxima categoría de una de las mejores ligas del mundo. Ocurrió también en el Bernabeu y también en La Cerámica. Cuando la falta de acierto o concentración está sobre el césped, el Granada CF tiene toda posibilidad de competir un partido.
Y es aquí donde la plantilla recurre una y otra vez al sobreesfuerzo que ha de realizar para tratar de atajar sus partidos, intentar llevarse los encuentros con porterías a cero y sobre todo evitar que el rival trate de quitar más de un punto.
Fede Vico y la enfermería
Pero la mejor noticia quizás que pueda recibir el Granada CF estos días es que la enfermería está prácticamente vacía. Después de que Fede Vico haya sido el último en abandonarla solo quedan dos jugadores en ella.
Neyder Lozano, con una lesión de larga duración; y Montoro, a las puertas de la recuperación son los dos únicos inquilinos que quedan en la enfermería granadinista. Y eso también permitirá tener la mayoría de efectivos posibles en un momento complicado en el que hay que sacar la cabeza.
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