Tres docentes granadinos, premiados por proyectos de innovación y coeducación
La delegada de Educación ha felicitado a los ganadores de los premios 'Rosa Regás' de coeducación y 'Antonio Domínguez Ortiz' de innovación educativa
Un año más, la Consejería de Educación, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía concede diferentes galardones que reconocen los mejores proyectos de investigación docente y de mejora de la práctica educativa, entre los que se cuentan los Premios Joaquín Guichot, especializados en trabajos sobre cultura andaluza, los premios Antonio Domínguez Ortiz, sobre innovación educativa, o los 'Rosa Regás' a materiales con valor coeducativo.
Tres docentes granadinos han sido los galardonados en esta edición, uno de ellos por partida doble. Se trata del maestro José Manuel Escobero, que recibió el primer premio 'Rosa Regás', en colaboración con la maestra Esther Diánez, por el proyecto coeducativo 'Un espejo en que mirarte. Someone to look up to', así como el primer premio 'Antonio Domínguez Ortiz' por la creación de un museo escolar en el colegio público 'Atalaya' de Atarfe. Por su parte, la profesora Mercedes Laguna, del Instituto de Educación Secundaria 'Pedro Jiménez Montoya' de Baza, recibió un tercer premio 'Antonio Domínguez Ortiz' por un trabajo sobre la competencia comunicativa en relación con la capacidad de aprender a pensar y argumentar.
La delegada territorial de Educación, Cultura y Deporte, Ana Gámez, ha felicitado a estos tres docentes granadinos, que “representan a todos aquellos maestros y maestras, profesoras y profesores, que trabajan cada día para mejorar la educación en todos los rincones de nuestra provincia”, y ha agradecido “la labor creativa de estos docentes, cuyos materiales educativos servirán de ejemplo a nuevas prácticas de éxito“.
Un espejo en que mirarte
El Primer Premio 'Rosa Regás' a materiales coeducativos de esta edición ha recaído en el trabajo 'Un espejo en que mirarte', presentado por los maestros Esther Diánez y José Manuel Escobero. El trabajo, que “contribuye a la motivación de los alumnos, y especialmente, de las alumnas, hacia el mundo de la ciencia y la investigación”, se basa en un libro en el que se recoge el testimonio de 67 mujeres de un total de 12 países que son referentes mundiales en la actualidad y que escriben al alumnado de primaria y secundaria cartas de motivación hacia el mundo de la ciencia y la tecnología. El proyecto incluye además una propuesta didáctica de actividades que parten de esas cartas y que se ajustan al alumnado de distintos niveles educativos.
De cómo el Síndrome de Diógenes puede ser útil en las escuelas
Con este original subtítulo se presenta el trabajo merecedor del primer premio Antonio Domínguez Ortiz, a investigaciones, experiencias y materiales para la innovación y la mejora de la práctica educativa, concedido también a José Manuel Escobero, creador en el del museo escolar 'Hipatia', cuyas piezas provienen de materiales prácticamente de desecho, reutilizados o reciclados, de uso no funcional, pero sí ilustrativo, que proceden de la comunidad educativa y de otros centros.
La metodología utilizada es una metodología totalmente creativa que permite la elaboración de materiales de alto valor pedagógico con un escaso coste, una experiencia que también sirve para implicar al alumnado en la gestión del museo mediante el uso de las nuevas tecnologías. Además, este museo cuenta con un inventario de gran utilidad para los docentes y gran valor didáctico, compuesto por una colección de fichas en las que se exponen las posibilidades educativas de las piezas catalogadas.
Leer, pensar, argumentar
En este mismo certamen de investigación e innovación educativa, uno de los terceros premios concedidos ha recaído en el trabajo presentado por la profesora Mercedes Laguna, del Instituto de Educación Secundaria 'Pedro Jiménez Montoya' de Baza, que realizó un proyecto que supone una propuesta metodológica que parte del área de Lengua en Secundaria y Bachillerato como nexo de unión con otras áreas del currículo, especialmente con la Filosofía. El método propuesto hace una apuesta por los valores del ser humano, entendidos como capacidades que es necesario desarrollar para que se conviertan en competencias personales y profesionales necesarias para la calidad de vida. Para el desarrollo de este método, se utilizan dos guías: una versión renovada del método escolástico y la fenomenología de la persona de Paul Ricoeur.