jueves 27 marzo
PREGÓN SEMANA SANTA 2025  |   | Luis F. Ruiz | Fotos: Álex Cámara

Un recorrido sencillo y palpable por las vivencias de Granada durante su Semana Santa

Mari Carmen Sánchez pronuncia el pregón de la Semana Santa de Granada en una intervención que ha entremezclado anécdotas, reivindicación y recuerdos del pasado, presente y futuro de la pasión adentrándose en un "laberinto de emociones"

Mari Carmen Sánchez durante su intervención en el Pregón de la Semana Santa, pronunciado este domingo.

Sentimiento, devoción, fe y esperanza. Mari Carmen Sánchez ha anunciado oficialmente la Semana Santa de Granada 2025 en un pregón protagonizado por el relato fiel a los hechos que durante ocho días la ciudad vive con pasión y emoción, en el que no han faltado las anécdotas, la reivindicación y los recuerdos de una Semana Santa en la que la ciudad se convierte en "un laberinto de emociones".

En su comienzo, la pregonera ha comenzado ligando las murallas de Granada como el punto que refleja la “luz del sol que despierta como un sueño antiguo que nunca se desvanece”, para trasladarse al Domingo de Ramos, que hace que los cofrades salgan a la calle “con la sonrisa puesta”. “Dicen que quien no estrena el Domingo de Ramos se le caen las manos, a los cofrades no se nos caen, porque cada Domingo de Ramos estrenamos vida y esta vida nos da las manos para abrirlas y recibir una nueva Semana Santa”, ha añadido.

“La Semana Santa en Granada no es solo una celebración, es un abrazo entre el pasado y el presente, donde el arte, la fe y la vida se entrelazan en un profundo susurro de espiritualidad”, ha afirmado Sánchez, quien ha asegurado que cuando llega la pasión a Granada “parece que a Cristo lo han sacado en carne y hueso de las iglesias”. “Hablamos de él y de su madre con una familiaridad llena de ternura, porque nuestra Semana Santa somos nosotros”, ha apuntado.

Antes de su intervención, la pregonera ha estado precedida por hasta tres marchas significativas interpretadas por la Banda Municipal de Música de Granada, entre ellas ‘Soleá dame la mano’ y ‘El Poder de la Esperanza’, que han servido de preámbulo para que su marido Miguel Alcalá la haya presentado sobre el escenario, quien ha relatado su experiencia profesional como contadora de historias de Granada a través de los medios de comunicación o anécdotas.

Mari Carmen Sánchez ha distribuido su declinación en hasta 15 capítulos y apartados diferentes, el primero de ellos dedicado a ‘La Fe’, en el que ha incidido en que hay “tantas semanas santas” como cofrades granadinos, pues su liturgia es también la de “una Granada que no quiere ser autómata”.

En este sentido se ha detenido en la medalla de cada cofrade, del que ha dicho que no es “solo un distintivo individual”, sino el eco de una herencia común y una señal de que “aunque las hermandades se distingan por pequeños detalles, el corazón que late tras cada una de esas medallas es el mismo”. “No son un adorno, son para llevarlas en nuestros actos religiosos, por eso no las entiendo en un salón de actos, en una presentación de un cartel o en una rueda de prensa. No las entiendo en las calles, en un ejercicio de orgullo de hermandad”, ha añadido.

En el repaso a su nombramiento de cómo recibió el anuncio de pregonera, se traslada hasta la calle Elvira en la tarde del primer día de la pasión, donde existe la “sensación de que todo es lo mismo pero todo se estrena”, puesto que se estrena “sonrisa, el inicio de una historia aunque el final sea conocido, todo resulta nuevo, sugerente e inspirador”. “También es una historia que vivimos con alegría, precisamente porque sabemos que al final triunfa la vida, por eso son los niños los que empiezan la Semana Santa”, ha dicho.

Así, ha ido repasando de cómo sus comienzos fueron en la Hermandad de Santa Maria de la Alhambra como hermana, aunque su primera salida fue con la Esperanza, su cofradía que ha tenido especial relevancia durante todo el pregón, hasta el punto de que en el escenario ha estado la cruz que porta Jesús del Gran Poder cada Martes Santo, junto al sudario de Nuestra Señora de las Angustias de Santa Maria de la Alhambra. Los calvarios rocosos de Ferroviarios y Lanzada han estado también presentes en el altar, con las tenazas de Jesús del Perdón, la corona de espinas del Rescate o los clavos que sostiene la Soledad de San Jerónimo, el paño de la Verónica del Trabajo o una escalera de la Soledad de Nuestra Señora de la Cañilla.

Las estatuas han sido el hilo conductor para dar a conocer la vinculación a numerosos pasos.

Las estatuas como capítulo central

Las estatuas como testigos del paso de las cofradías de Granada durante sus estaciones de penitencia han protagonizado el capítulo central del pregón de la Semana Santa de 2025. Simulando que habla con ellas, la pregonera ha recordado que Mariana Pineda lleva años viendo cómo las cofradías llegan a su plaza año a año y cómo “en su bandera bordó el amor más grande de su vida, libertad”, afirmación que le ha servido para enlazar con Jesús del Rescate.

Del Señor de Granada ha afirmado que no puede haber un Lunes Santo “más completo en el mundo” que el de Granada, con un Rescate que a los cautivos da libertad y en cuyas manos atadas se encuentra “consuelo y en su mirada una paz que solo su amor divino puede dar”.

También ha dedicado palabras para la salida del Cristo del Trabajo, puesto que no es solo “un acto religioso, sino una experiencia profundamente humana que conecta el esfuerzo cotidiano con la espiritualidad”.

Para hablar de las hermandades de Santo Domingo ha empleado a la figura de Fray Luis, testigo de salidas como el misterio de la Cena con el rojo y el blanco, “ay mi rojiblanco”. También sobre la Cañilla ha recordado que es una cofradía que hace “aún más humilde su título al centrarlo en la caña con la que se burlaron de Jesús”. Respecto a Rosario y Tres Caídas, sus rodillas están “desolladas por las piedras de un camino que lo baja del Albaicín al Realejo en un tránsito de devoción y oración. Cae por primera vez y recuerda que la soberbia hace creer que es bastante, que no es necesaria la mano de quien está a nuestro lado”.

La Inmaculada del Triunfo es testigo del Cristo de la Buena Muerte en el Viernes Santo con una hermandad que afirma que “el amor no se queda en palabras, sino que se traduce en obras concretas que transforman vidas”. Mientras, la estatua de Carlos V en la Plaza de Derecho es testigo del paso de Jesús de la Meditación: “Él nos calma y su madre es remedio para nuestras cuitas. Ella, que es Reina y Madre de los Estudiantes”.

Para adentrarse en el Zaidín ha empleado la figura de Albert Einstein y la “felicidad” de los hermanos de la Lanzada que se renueva “cada año” cuando el “moreno del Zaidín y su bendita Madre de la Caridad aguardan su salida procesional dentro del templo”.

“Semana Santa de Granada, que tienes un rincón para todos, hay un lugar poco conocido pero que guarda mucho significado”, ha dicho la pregonera, quien ha recordado que antes de abandonar el Zaidín, con la hermandad de Salesianos, hará una parada ante un pequeño monumento que rinde homenaje a quienes, en tiempos de guerra, ofrecen su labor buscando la sanción de las heridas.

“En mi peregrinar como pregonera, para saciarme de vosotros, llegué al monasterio de la Encarnación, y allí estaba Él, sencillo, callado, con la mirada baja, me ofrecía sus manos para que las besara y al levantar la mirada me pareció que me escuchaba y me atrevió a pedirle que me liberara del egoísmo, de las mentiras”, ha afirmado.

Después ha ‘viajado’ hasta el Albaicín de la mano de Jesús de la Pasión y María Santísima de la Estrella que ilumina “para siempre a sus hijos que creen, vive y llegan a los suyos el amor a una Madre que, aún con dolor por ver a su hijo sufrir bajo el peso de la Cruz, no deja de ser astro luminoso en el trance más oscuro”.

“Ningún otro sitio como Concepción de Zafra y su procesión de la Concha es un abrazo de los sentidos, un lienzo de colores que se estampa en las paredes blancas del barrio”, ha afirmado Sánchez sobre otra de las hermandades del Jueves Santo. Respecto a la Aurora, ha recalcado que llenarán “la calle de una luz que no es del sol, sino de una fe que ilumina con su esplendor cálido y acogedor”.

“Hermanos del Martes Santo, hermanos del Vía Crucis, contrapunto silencioso al bullicio de Plaza Nueva, seguid creciendo, seguid enseñándonos a orar. Ya no me puedo asomar por la ventana de la sacristía de Santa Ana a vuestro paso que, buscando mejor organización, espero la salida de mi hermandad”, ha dicho sobre la decana.

El Teatro Isabel la Católica ha sido lugar una vez más para esta apertura de la pasión.

Un puente romano que es del siglo XII

Granada, ha añadido, es tan especial que tiene un puente romano que es del siglo XII o la estatua del moro erigida en honor a un insigne filósofo y lingüista judío, “así que igual que los de Bilbao nacen donde quieren, nosotros llamamos a las cosas como nos da la gana”.

Así, ha recordado que ese “moro judío” es tan cofrade cristiano que ella, añade, lo ha visto con “un costal puesto”, aunque el delito “ha debido prescribir” para una estatua que “tal vez quería meterse bajo la trabajadera de ese Cristo de los Favores, que el Viernes Santo se desdobla y se queda de piedra en su campo y de madera, retorcido por el dolor de la muerte avanzando con el trabajo costalero que lleva el pulso firme de la fe con la cadencia lenta de quien carga el peso de todas las súplicas”.

“Y en la calle San Matías, el crujir de la madera, el roce del terciopelo, el tintineo de una medalla que choca con el pecho. Todo será latido, todo espera. Porque, al caer la tarde del Miércoles Santo, un murmullo emocionado recorre la multitud”, ha afirmado respecto a la Hermandad de Paciencia y Penas, de la que ha dicho que su salida supone una escena “de fe”.

Cerca de este punto se entona un cántico espiritual para aferrarse a la cruz de Jesús sin más advocación que su procedencia, Jesús Nazareno: “En su rostros sereno, en sus manos trémulas bajo el peso del madero, se adivina la noche oscura del alma, el tránsito doloroso hacia la luz. Granada, con su duende, y su misticismo, se convierte en un cántico vivo”, ha expuesto.

Mari Carmen Sánchez ha reivindicado que ya hubo una hermandad que fue la primera en viajar a Roma: “Sí, Granada lo hizo. Cuando ahora muchos venden su presencia en la Ciudad Eterna como un hito, ya fueron otros los que hace 25 años, movidos por la ilusión, la constancia y la inocencia, lograron que Ella se convirtiera, para siempre, en la Madonna”. Esto, ha añadido, llevó un nombre, el del padre Iniesta. Sobre la Virgen de las Maravillas ha pedido que haga de cada lágrima un jazmín que perfume el aire.

La pregonera ha recordado a quienes ya no están, tanto a sus padres como a los cofrades que todos recuerdan en un capítulo denominado 'Los eternos'.

De los oficios artesanos a sus pies

Después ha adentrado en los oficios artesanos, “qué sería de la Semana Santa sin todos ellos”, refiriéndose a pintores y a fotógrafos, porque gracias a ellos queda plasmada la Pasión de Cristo y que sea tomada “como un himno a la oración”.

“Son artistas de la devoción, el ojo del fotógrafo sabe esperar el momento preciso, no es solo técnica, es emoción, alma, el deseo de inmortalizar lo que el corazón siente, pero los labios no alcanzan a describir. El pintor con su pincel como instrumento de fe, da vida sobre el lienzo a la Pasión que nos redime”, ha argumentado.

Sánchez ha recordado su frase de que “los pasos deben ir a ruedas”, reivindicando que todos los que componen la hermandad en la calle son igual de protagonistas y que Granada ya fue pionera en que las mujeres estuvieran en las parihuelas sacando imágenes.

“No me gusta esa costalera que habla de afición, oficio, pelea, todos formamos y conformamos la hermandad en la calle, los costaleros formáis parte del cortejo, como yo, como todos”, para reivindicar las ruedas de quienes contribuyen a diario a crear sociedad y el día a día de la ciudad.

Sánchez ha hecho un repaso de casi todas las hermandades utilizando los distintos elementos de la pasión y de la ciudad

“No podemos actuar para que digan que vamos a lucirnos”

La pregonera, tercera en la historia de la Semana Santa de Granada, ha reivindicado el papel de la mujer, renegando de la afirmación de quienes las señalan porque van a lucirse.

“No vamos a lucirnos, vamos a formar parte de un cortejo”, ha dicho Sánchez, quien ha recordado que las mujeres en Semana Santa pueden ser lo que les dé la gana, habiendo sido “pioneras en mucho”, desde hermanas mayores hasta costaleras, capataces y pasando por vestiduras, músicas, presentadoras de carteles o pregoneras.

Sobre los jóvenes ha dicho que no son “el futuro”, sino una “realidad palpable”, asegurando que le encanta este movimiento cofrade “siempre abierto” y que convierten cualquier salida extraordinaria es punto de encuentro de chicos y chicas que han preparado la petaca, han engarzado guirnaldas, han preparado reparto de fotos u oraciones comunitarias.

“Porque la juventud cofrade de Granada es el alma vibrante de nuestras hermandades, el motor que impulsa con entusiasmo y devoción la tradición heredada de generaciones pasadas”, ha apuntado para agradecer que mantenga viva la esencia de la religiosidad popular.

Miguel Alcalá, marido de la pregonera, ha sido el encargado de presentarla.

Los eternos y la música

“Cada años hay ausencias”, ha dicho la pregonera para recordar a quienes no están en uno de los momentos más emotivos del pregón, que también ha tenido palabras de agradecimiento a los “directores y directoras de los medios de comunicación” que han entendido que la Semana Santa también es información, que “hay que contar lo que pasa, que hay que hacerlo con fidelidad y que se puede opinar sin hacer daño”.

Sobre la música, además de la que se escucha en las calles detrás de cada paso, la pregonera también ha reivindicado que lo es también “el golpe del pertiguero dando órdenes de subir los ciriales, el chisporroteo de las velas.

La pregonera también ha tenido palabras para los momentos de incertidumbre cuando el tiempo no acompaña en la salida de las hermandades y quiénes son las primeras personas que se busca para abrazar cando finaliza la estación de penitencia cuando no se sale.

Sobre la Hermandad del Silencio ha recordado que ella en sí misma es la "Madrugá de Granada", con cuyo cristo se traspasa "el umbral de la noche y con las primeras luces que se asomen desde Sierra Nevada, nos iremos silentes a casa, esperando un nuevo Jueves Santo, para apostarnos en el pretil del Darro y verlo reflejado en las fachadas".

La cita ha llenado el Teatro Isabel la Católica de Granada.

Gran Poder y Esperanza

Entre los apartados especiales han estado también ha habido dos capítulos especiales para Jesús del Gran Poder, que "no busca ser amado por obligación, sino por el fuego del amor sincero". "Tú, que soportaste la cruz y el desprecio, enséñanos que el verdadero amor es paciente, que la grandeza se revela en la humildad y que el rechazo del mundo no disminuye la gloria de Dios", ha apuntado para concluir que "el Gran Poder de Dios está en todas partes".

"La Esperanza es nuestra fuerza, ese es el lema de mi hermandad, ella es mi fuerza, ella es mi esperanza, ella en Granada solo tiene un nombre, Angustias, bajo el que nos acogemos con la sincera creencia de que ella acoge, escucha, serena, anima y templa", ha afirmado sobre la titular mariana de su hermandad.

La vida sin Esperanza "no es", y sí es "nuestra fuerza y en que nombre de ella procuren siempre ser buenas personas, que la derramen allá por donde vayan. En este año de la Esperanza, Esperanza lleva de la mano a quienes no tienen Esperanza".

Publicidad
©Queda totalmente prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta noticia sin autorización expresa de la dirección de ahoraGranada

Noticias relacionadas

Publicidad
DÍA A DÍA
Desarrollado por Neobrand
https://ahgr.es/?p=279335