Uzuni salva la victoria de un Granada CF sin sangre
Los rojiblancos comienzan ganando con dos acciones aisladas y gana con una genialidad del albanés en el tiempo de descuento
El Granada CF ha conseguido salvar la victoria por 3-2 ante un Eldense que puso en serios apuros a los rojiblancos, en un partido en el que se mostraron sin nitidez y de nuevo falta de intensidad por momentos que puso a los alicantinos cerca de dar la campanada en Los Cármenes.
El choque de Los Cármenes no pasará a la historia como el mejor partido del Granada CF de la temporada en casa, de hecho aún hay quien se puede preguntar por qué está en la cuarta posición por la parte baja de la tabla, pues supo poner contra las cuerdas al equipo de Fran Escribá y esperar su momento tras el descanso para empatar.
La primera parte la marcó dos acciones aisladas para que el Granada CF se pusiera por delante en el marcador casi sin merecerlo. Una de ellas en un penalti sobre Boyé, quien recibió una entrada por detrás tras un buen pase de Pablo Sáenz. Uzuni se encargó de materializar la pena máxima.
Justo antes del descanso llegó el segundo del choque de los rojiblancos, esta vez obra de Lucas Boyé, quien en una contra recibió de Ricard para perforar la portería defendida por Mackay y aportar la tranquilidad.
Entre medias de los dos goles se puede explicar el partido ramplón que estaba ofreciendo el equipo rojiblanco, con un Eldense que se hizo dueño y señor de la pelota y además apretaba tanto en la salida del balón de los granadinistas como a la defensa rojiblanca, disponiendo de sendas ocasiones en las que Mariño tuvo que repeler los disparos de Chapela y García.
En el Granada CF las acciones intermedias hay que buscarlas en un cabezado aislado de Boyé que se marchó por encima de la portería defendida por Mackay.
Falta de intensidad tras el descanso
Lejos de sentar bien el paso por vestuarios a los jugadores del Granada CF, la segunda parte volvió a quedar patente la falta de sangre en el terreno de juego. De hecho, fueron los jugadores del Eldense los únicos que pusieron alma sobre el césped hasta el punto de que en ocho minutos logró empatar el partido.
El primero de ellos lo anotó a los cuatro minutos tras el paso por la caseta, con un centro de Mateu que remató Camarasa en el punto de penalti para empezar a incomodar. El segundo llegó de un cúmulo de despropósitos del Granada CF de la defensa, que vio cómo Ortuño sin ángulo encontró portería para establecer el 2-2.
A partir de entonces el choque fue de los visitantes, que incluso dispusieron de ocasiones para poder establecer el 2-3 en el marcador, la principal solo cinco minutos después del empate, obra de Mateu, pero Mariño logró escupirla y evitar que entrase.
Escribá trató de mejorar la imagen de los suyos dando cabida a nombres como Rodelas y Juanma, jugadores del filial que se convirtieron en futbolistas del primer equipo por primera vez en Liga y que junto a Óscar situó a tres futbolistas del Recreativo en el campo ante el ramillete de bajas.
El Granada CF se volcó sobre la portería rival, a veces con más corazón que cabeza, hasta que en el tiempo de descuento casi Reinier, otro de los reincorporados, cedió un buen balón a Uzuni en la corona del área para establecer el 3-2 definitivo.
Su genialidad evita el sonrojo de más del Granada CF, que vuelve a mirar la clasificación por la parte de arriba, aunque tiene que hacer un análisis sosegado y profundo sobre los muchos puntos que debe reconducir el equipo.