martes 19 marzo
Opinión  |   |

Del 'pacto del codo' al impacto del 'codazo' pasando por el 2+2

En mayo de 2020, en una clara demostración del compromiso que tiene el PSOE con la ciudad de Granada, se alcanzó un acuerdo con el PP y Cs. El pacto fue calificado por muchos sectores como algo histórico. Después de un lustro, el Ayuntamiento de la capital iba a tener unos presupuestos, con lo que implica de cara no solo a las personas que trabajan en él sino también para las que viven en esta ciudad.

En aquel momento, hace ya casi un año, se pusieron a disposición del gobierno municipal una serie de partidas económicas para paliar las heridas provocadas por la pandemia que empezaban a sentirse drásticamente en nuestra economía. De ellas, y solo a título de ejemplo, podemos destacar: 1.000.000 euros para servicios sociales; 200.000 para recuperar las ludotecas municipales; 250.000 para empleo; 350.000 euros para afrontar la brecha digital y la digitalización; 200.000 euros para Cultura …

En aquel momento, y a través del denominado por algunos medios como el “Pacto del Codo” se concretaron unas cuantías con una finalidad muy clara. Pero con los recursos que en ese momento se liberaban para atender a las familias y a los comercios... ¿qué se ha hecho por parte del gobierno municipal? La respuesta es que muy poco. De hecho, y es un dato conocido, sólo se ha cumplido en torno al 5% de lo pactado. El acuerdo tuvo, entre sus elementos positivos, que se hizo público por los tres portavoces del PSOE, PP, y Cs y por tanto, se puede comprobar el grado de cumplimiento.

La crisis sanitaria, como todos sabemos, no ha desaparecido y ha ido provocando unas secuelas aún mas severas en la sociedad. La respuesta de las administraciones no puede esperar, de ahí que ya en septiembre de 2020 el Grupo Socialista planteara públicamente la necesidad de iniciar un debate en torno a las ordenanzas fiscales del Ayuntamiento. Pasaron los meses y la actitud de negociación del gobierno se iba cerrando cada vez más. Solo una reunión en donde se ofrecieron distintas propuestas y alternativas. Después, solo el silencio y la proposición por parte del gobierno municipal de bonificaciones en unas pocas ordenanzas que desde el primer momento hemos tildado de escasas y tardías. Y, además con errores que advertimos. La conclusión: los sectores afectados por la crisis, a día de hoy, poco o nada han recibido por parte del Ayuntamiento de Granada.

A pesar de todo ello, y ante el convencimiento de que Granada necesita un impulso para salir de la situación en la que nos encontramos, la oposición en bloque forzó al bipartito a constituir un grupo de trabajo de cara a la preparación de un nuevo presupuesto. Aunque los inicios no fueron prometedores ante la actitud cerrada a facilitar datos, debo de reconocer que tras la presión ejercida, recientemente se han puesto a disposición de los distintos grupos gran parte de la documentación solicitada.

De los datos facilitados se pone de manifiesto que la situación de nuestro Ayuntamiento no es nada buena. Esos datos no son más que otra consecuencia del empobrecimiento ocasionado por 13 años de gobierno del Partido Popular y, además la falta de un proyecto político que piense en Granada. Son muchos años de una gestión nefasta que no podía traer más que la ruina y el endeudamiento atroz.

De esa situación solo es posible salir con un proyecto a medio plazo. No basta con poner parches en las distintas heridas ofreciendo alternativas cortoplacistas. O se enfoca el asunto con una perspectiva más amplia o iremos dando bandazos sin rumbo. Y ahí, Granada tiene todas las fichas para perder. Ahora tenemos la oportunidad y no podemos desperdiciarla.

Como consecuencia de la crisis sanitaria van a movilizarse un conjunto de recursos económicos facilitados por Europa. Y en esa línea Granada tiene que convertirse en un referente de cara a potenciar sectores claves como el turismo, convirtiéndose en la ciudad de Congresos a nivel internacional. Tenemos la infraestructura necesaria para ello. Una ciudad que pueda capitalizar la base tecnológica vinculada, entre otras cuestiones, al sector de la Inteligencia Artificial de la que nuestra Universidad es puntera a nivel internacional.

¿Que ocurre? Pues que quien debe de encauzar esas iniciativas y otras, está pensando más en resolver la ecuación del 2+2, o sepa usted qué formula, que en tener una visión para el futuro de esta ciudad. Incertidumbre que ya existe, y que crece más aún con la moción de censura que PSOE y Cs han presentado en la Comunidad y Ayuntamiento de Murcia. Me comentaba un concejal muy ligado al equipo de gobierno que “siempre ha odiado las aguas mansas, y que no le desagrada moverse entre remolinos”. Pues quién sabe si existirán o no esas aguas bravas y turbulentas, ya veremos. Pero mientras tanto, este año parece que en el Ayuntamiento de Granada estamos más en la idea del “impacto del codazo” que en el “pacto del codo”.

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Columnista
José María Corpas

Concejal del Grupo Municipal Socialista y Secretario de Política Municipal del PSOE de Granada capital

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